Ángeles blancos y negros [En Pausa] {Corrijiendo}

¿Quizás amor?

Tengo la impresión de que mi vida ha canviado desde que Seiichiro me contó todo eso acerca de mi antiguo yo, he de admitir que por una parte me lo creo pero por la otra pienso que es una broma por parte suya, o tal vez  ¿Un sueño?

Hoy es 12 de mayo, el viernes me contó todo eso y no nos habíamos visto en todo el fin de semana, esos días no pude conciliar el sueño, tenía demasiadas dudas en la cabeza como para dormir.

A la mañana siguiente me desperté muy cansado, no tenía ganas de hacer nada, ni tan solo de ir a clase, pero a pesar de eso fuí  a la escuela como de costumbre, pero hoy era diferente, era el día que llega va más temprano en todo el curso.

Cuando llegué al aula Seiichiro estava sentado en su sitio, en esta ocasión no estava dibujando como de costumbre, ahora tenía un libro entre las manos, parecía muy contento cada vez que que pasaba cada una de las páginas, ese libro saltaba a la vista, era un libro de tapas doradas perfectamente encuadernado.

Decidí no molestarle y me senté tranquilamente en mi sitio, lo observé de reojo un rato hasta que volteó y me dijo; "me haces muy feliz permaneciendo a mi lado"

Porque eso tan repentinamente, siempre me lo decía pero hoy me sonó un poco estraño, parecía extremadamente feliz, cerró el libro y me lanzó una dulce mirada acompañada de una sonrrisa, fué entonces cuando me agarró suavemente de las manos de forma que las envolvía con las suyas.

-Oye! ¿¡Que haces!? Es un poco vergonzoso -le dije mientras me sonrrojava-

-Ya hace unoa días que no te veía, me alegro de volver a verte.

-Gracias por echarme de menos pero... ¿que me podrías dejar ir de las manos?

-De acuerdo, si es eso lo que quieres, pero antes de eso

En ese momento se movió tan rápidamente que no me dió tiempo a reaccionar, su rostro de acercó al mío y me dio un beso, un beso largo y dulce,  hubiese deseado que ese instante durara para siempre, pero repentinamente oímos llegar a un grupo de gente que se acercaba ruidosamente al aula.

Para disimular nos separamos y empezamos a hablar sobre un programa de televisión que dio la casualidad que nos vimos el viernes por la noche.

Las clases finalizaron y como siempre nos separamos en la entrada principal.
El se fue hacia el lado derecho y yo por el izquierdo.

Cuando llegué a casa me tiré en el suelo de la habitación ¿Qué había ocurrido esa mañana? Estava confundido, yo ha sabía cuáles eran sus sentimientos pero... ¿y los mios? No sabia como interpretar esa sensación ¿Sería miedo? ¿Amistad? ¿Pena? ¿O quizás amor? No, eso no es posible, aunque el yo del pasado y el yo de ahora fueramos la misma persona lo que sentíamos era diferente, ¿No? O eso es lo que desearía, cuántas más vueltas le daba al asunto mi corazón latía cada vez más y más rápido.

--CONTINUARÁ-