Querida Charlotte:
Ha pasado tanto tiempo desde la ultima ves que hablamos, pero las cosas que debería contarte no me impactaron tanto como cada detalle que he vivido este último tiempo. Solo se me viene a la mente una palabra, "belleza", y he descubierto que esta en todas partes. Es verdad, lo he descubierto, ya que yo solo me limitaba en la belleza física, nunca había escuchado hablar a personas tan profundamente de la belleza en los detalles que uno cree obvios, me hizo darme cuenta de cuan grande es todo. Recuerdo que la primera vez que entramos a la asamblea todos hablabamos entre todos mientras los otros nos hacian callar, al principio lo encontraba exagerado pero luego entendí que no era porque les molestara que hablara sino que querían hacerme notar la belleza de la sutuación. Cada vez que entrabamos al salón se escuchaba una pieza de musica clásica, pero algo me decía que no había sido escojida al azar, era como si cada pieza de música clásica hubiése sido escogida para cada día, para cada momento y incluso para cada sentimiento. Solo ese detalle, esa belleza te indicaba que eso era para ti, era especialmente para ti. Después se me hacia imposible entrar hablando, sentía que si me perdía de escuchar esa pieza de música clásica, nada iba a ser lo mismo, el momento iba a cambiar. Es como cuando vas a un concierto de música clásica y antes de que empieze escuchas como los músicos afinan los instrumentos, siempre me ha gustado ese sonido pero nunca le había tomado tanta importancia, y entendí que si los músicos no afinaran sus instrumentos antes del concierto, no sonarían bien. Pasa lo mismo con nosotros, si no nos afinamos, si no notamos esa belleza en el detalle, el momento no es completo y puede que no lo recordemos. Al darme cuenta de esta belleza pude entender mucho mas de lo que querían hablarme.
Claro que este solo es un ejemplo de muchos otros detalles, algunos pequeños, pero que hicieron de mi experiencia algo verdadero.