Nervios, timidez y atracción. ¿Acaso puede ser una buena combinación? Siempre esas cosas le jugaban en contra al chico de 16 años que sentía una pequeña atracción hacia la chica de su misma edad. Tal vez todo sería más fácil si la chica no fuera una engreída y popular.
El chico creía que algún día tendría alguna oportunidad con ella, pero al contrario de eso, siempre recibía burlas por parte del grupo de amigos.
Él, Niall Horan, un chico tímido y para nada popular. Físicamente era bajo, al menos, más bajo que los chicos de su edad. Rubio, con un peinado que cubría un poco su frente y el resto del cabello desordenado. Ojos azules, unos hermosos ojos azules que te perdías en ellos, pero todo eso lo arruinaban sus dientes chuecos. O al menos eso decían las chicas, siempre haciéndolo sentir mal.
Era uno de los mejores de la clase, podría ser el mejor, pero su timidez le jugaba en contra. Su mejor amigo Liam Payne. Quizás lo ayudaba a cambiar aquella actitud.
Ella, ________ Malik, una chica popular, con unos cuantos chicos rogándole una oportunidad, eso para ella no era nada nuevo. Físicamente tenía una estatura promedio, cabello castaño y ojos marrones.
Pasaba en fiestas, huía de clases, y hacia absolutamente lo mismo que su hermano mayor, Zayn Malik. Su mejor amiga Danielle Peazer, suena de broma decir que está de novia con el mejor amigo de Niall.
Tal vez el destino de estos chicos fue estar juntos, pero en el momento preciso. Han pasado unos años, en los cuales el rubio recuerda absolutamente todas las cosas que hizo con tal de que la castaña le diera una oportunidad.
Ella lo recuerda como el chico feo, aunque ahora cambió de opinión eso será… ¿bueno?
