Baby's Dolls

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Era un día común y cualquiera veía a mis dos hijas jugar con sus muñecas en el jardín, me encantaba que fueran tan unidas, como todas las tardes. Mañana seria el cumpleaños de ambas ya que son gemelas una de pelo lacio y la otra de pelo colocho era su única diferencia, y ya había terminado con los preparativos para la fiesta, había invitado a sus compañeritos de la escuela y uno que otro vecino.

Al día siguiente...

El jardín estaba repleto de niños jugando por todas partes que se viese y había llegado la hora de abrir los regalos, llame a mis niñas y ambas se ubicaron en la mesa donde estaban todos los obsequios, rompían el papel de muchos de ellos unos les gustaban, encantaban y otros no tantos pero una de ellas, la de pelo lacio, en particular amo uno de sus regalos, es una muñeca que no posee pelo, tiene los ojos negros y los abre y cierra si la mueves, boca pequeña, cabeza redonda y todo lo que trae una muñeca, vestía un vestido azul largo y zapatos negros además si le estripabas la pancita repetía lo que decías con su propia voz, solo ella recibió esa muñeca y creo que por eso mi otra pequeñita estaba un poco triste, pero no quería que los demás niños lo notaran así que siguió abriendo sus regalos hasta que ya no había ninguno, al poco tiempo los niños comenzaron a despedirse e irse con sus padres para su casa. Yo me quede ordenando la casa y el patio y les dije a mis pequeñas que podían ir a jugar a su habitación con sus nuevos juguetes, termine de limpiar y me fui a dormir.

En la noche me despertó el golpeteo de la puerta de mi habitación a de ser una de mis pequeñas dije y efectivamente estaba mi pequeñita colocha, se veía muy asustada y me pregunto que si podía dormir conmigo, yo le dije que si y le pregunte porque no quería dormir con su hermana, ella no dijo nada y se dirigió a acostarse en mi cama, no le quise seguir preguntando y dormí junto con ella esa noche.

Al día siguiente...

Me levante algo temprano pero sin despertar a ninguna de mis hijas, baje y aproveche de que las niñas estaban dormidas para hacer un poco de oficio, realice el desayuno y subí a levantarlas, fui directo al cuarto de ellas y al entrar no estaba ninguna de las dos, luego me dirigí hacia mi habitación y mis pequeñas ya estaban levantadas, al parecer estaban conversando pero cuando entre se quedaron calladas, les dije que ya estaba el desayuno y que bajaran, ellas solo dijeron si mamá, salí de la habitación algo extrañada pero no le di mucha importancia debe ser algo entre hermanas dije, puesto que yo tenia una y cuando eramos niñas teníamos nuestros secretos.
Las niñas bajaron les serví el desayuno y cuando terminaron las mande a bañarse, note que mi niña realmente le había encantado la muñeca pues la estaba empezando a llevar consigo a todas partes que ella fuera, no la soltaba y no dejaba que yo ni su hermana la sostuviera, no se el porque pero esa muñeca no me hacia sentir cómoda pues parecía como si su mirada fija en ti te viera hasta el alma, lo cual me erizaba la piel. Se hizo la tarde y como siempre mis pequeñas estaban en el jardín pero note que no estaban jugando juntas como era ya de costumbre, así que me dirijo al patio a hablar con mi colochita
- ¿porque no estas jugando al te con tu hermana cariño?

Ella la volvió a ver y sólo me dijo.
-Ella esta jugando al te mientras que yo quiero jugar a la casita, además ella tiene su mesa llena de invitados.
-Esta bien cariño.
Y volví a mis que aceres de la casa. Los días pasaban y todo seguía más extraño cada vez, mi colocha no quería dormir con su hermana y cada noche venia mas asustada que la anterior hasta que de una vez se iba a mi habitación a dormir, cada día estaba más separada de su hermana y cada día su hermana andaba mas distante inclusive de mi y no soltaba su muñeca inclusive dormía con ella. Una de esas noches me canse y le pregunte a mi niña el porque le daba tanto miedo dormir en la habitación con su hermana, que si pasaba algo raro, extraño me lo dijera sin ningún problema.

-En las noches ella se despierta y comienza a susurrarle cosas mientras duerme, luego voltea a verme por lo cual me hago la dormida, pero eso no la detiene siento que se acerca, pero yo prendo la luz y salgo de la habitación antes de que ella llegue a mi cama, pues no se mueve ni habla en la luz.
-¿Quien es la que susurra las cosas cariño?
Ella volvió a ver detrás de mi en dirección a la puerta, se puso pálida y comenzó a temblar, al volver mi mirada estaba su hermana sostenía a la muñeca en una mano y la otra la traía tras la espalda, estaba con la mirada al suelo.
-¿Cariño, que tienes pasa algo, alguna pesadilla?
Ella no dijo nada y empezó a caminar hacia nosotras, tome a mi niña de la mano pero se soltó y se coloco detrás de mi abrazando mis piernas.
-¿Te pasa algo cariño eso es?
Siguió sin decir nada y detuvo su caminar a solo un par de pasos de nosotras, empezó a subir su mirada y casi grito al ver su cara, tenia los ojos totalmente negros, no había ni un rastro de blanco en ellos, traía una sonrisa melancólica en su rostros y empezó a decir algo, al principio no lo entendí pues lo dijo como si temiera que la escucharan y luego dijo lo mismo pero mas alto.
-Muerte, muerte, era lo que repetía una y otra vez.
Yo me quede paralizada en el lugar por unos segundos luego coloque una mano tras mi espalda y acaricie la cabeza de mi otra niña ella me volvió a ver, sueltate trate de decir con sólo mover los labios ella se soltó y dio un par de pasos atrás de mi, volví mi mirada a mi hija otra vez volvía a ver el piso, pero su voz repetía lo mismo, luego la muñeca comenzó a moverse al principio pensé que mi pequeña la movió pero no era así comenzó a repetir lo mismo que mi pequeña en su voz pero ya no era una voz chillona era estruendosa y parecía que varios hablaban a la vez al volver a levantar la mirada mi pequeña lloraba sangre, mostró el brazo que tenia detrás de la espalda tenia un cuchillo y se lanzo por mi...

Grite....

-Mami despierta, Mami.
Abro los ojos y me encuentro en mi habitación estoy acostada y mi pequeña colocha esta a mi lado.
-¿Que paso cariño?
-Estabas gritando Mami.
-Tranquila pequeña Mami tenia una pesadilla, vuelve a dormir.
-Pero yo quiero jugar Mami y mi hermana también, vamos a jugar a matar a Mami. De pronto me di la vuelta para ver a mi niña con los mismo ojos negros, trate de alejarme de ella pero no pude estaba atada a la cama, este era mi final pero antes de morir volví a escuchar esa borrosa voz ahora proviene de mis pequeñas pues su hermana había entrado en la habitación con la muñeca, esa maldita muñeca, fue lo ultimo que vi pues sentí el filo del cuchillo travesar mi pecho justo en el corazón.

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⏰ Última actualización: Jan 18, 2017 ⏰

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