El viaje de mi vida

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Él aún estaba dolido por su antiguo querido amigo: aquel que lo acompañó en tantas penas y noches en vela con animadas pijamadas; con quien compartieron profundos y delicados secretos. Para él, como ven, no es algo de lo que se pueda sobreponer fácilmente, aunque intentara miles de veces mensajearlo por miles de maneras posibles, aunque siendo un niño muchas de ellas muy irrealistas.

A lo largo de los años decidió que, si algún día volvía a verlo, lo encararía firmemente por haberlo abandonado sin decir una mísera palabra y ¿perdonarlo?, eso lo vería según la marcha y la respuesta de su ex-best friend.

Por el momento pensó en hacer más amistades, aunque fue duro terminó reemplazándolo por alguien parecido a él sin darse cuenta, pero ¿qué esperaban? se complementaban muy bien así que tenía cierto sentido. Le costó un poco y al comienzo no paraban de preguntarse el paradero de su antiguo amigo y eso llegó a aburrirle, al parecer tenía la pinta del amigo despechado por lo cual comenzaron a esparcirse rumores como: "Bueno, al parecer no eran tan amigos", "¿Qué le habrá hecho?" "Parece que se lo comió la tierra de la nada", "De seguro eran maleantes errantes" "¡No, de seguro decidió por fin unirse al circo para que todos contemplaran sus cejas!" u "Ojalá vuelva para ver su acto".

Alfred, como se llama nuestro protagonista, en esos momentos no paraba de callarlos o amenazando a los que hablaban mal de él y creaban ideas tergiversadas sobre el circo, él claro le hacia esas bromas a su amigo, pero no podían ser reales o ¿sí?

PRESENTE

—Hey, Matty ¿estás listo? —gritó Alfred subiendo energéticamente por las escaleras algo tambaleantes.

—Claro, pero ¿por qué de la nada me invitas a tu casa del árbol? —Matthew lo miraba intrigado mientras se agarraba como podía. Él no era tan rápido y ágil, además de eso le tenía miedo a las alturas, por eso no había insistido en usarla antes.

—Porque eres mi amigo, ¿no? —y efectivamente, ahí estaba el reemplazo, suena mal pero técnicamente lo era y formaba parte del conocimiento de todos, pero estaban bien con eso por el momento.

—Sí, pero desde que se fue —se detuvo por unos segundos para después recomponerse—... Arthur, no dejabas a nadie subir

—Lo sé... Pero creo que esa casa necesita alegría y que vengamos a usarla más seguido no hace ningún daño —se defendió con una vaga excusa.

—¿Por eso la renovación? —Interrogó interesado Matthew, ya que él planeaba ser arquitecto.

—Exactamente, así prácticas para tu carrera —Alfred sabía muy bien los sueños de Mathew y no les era indiferente, claro que lo apoyaba buscando formas para que se desenvolviera en ello, adema también necesitaba un lugar para estar a solas y leer sus comics/estudiar sin ser perturbados.

—Sé que planeas Al, y esta vez no hare todo el trabajo solo por esa excusa —dijo por fin poniéndose de píe en la infraestructura.

—¡Hey, la otra vez te divertiste! —no le costaba nada convencer a los demás, aunque Matty ya le había pillado la maña.

El tímido Matt no pudo más que negar con la cabeza y comenzar a reírse mientras limpiaban y quitaban cada poster, hojas caídas y removían el polvo acumulado por los años. Demoraron una hora, pero estaban satisfechos con la limpieza y empezarían las mejoras, pero un descanso no le viene mal a ninguno de los dos.

—Al, habías mencionado que este año no te harán una fiesta de cumpleaños —comento Matthew bebiendo un vaso de limonada que la madre del dueño de la casita les había traído hace rato.

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⏰ Última actualización: Jan 18, 2017 ⏰

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