STOP AND STARE

AZULES COMO EL MAR

Sonó el despertador, hoy me esperaba un día largo, tenía que ir a trabajar y después tendría una reunión para ver cómo seguían los acústicos que estaba dando hasta el momento en Capital.

Me dirigí hacia el baño para tomar una ducha, y en ese trayecto recordé a la chica haciendo que en un instante se me forme una sonrisa, no podía decir que me encontraba enamorada pero si confundida hasta el punto de ser un poco Border, me había transformado en la persona que nunca quise.

Miré el celular y eran las 8 a.m, de recuerdo en recuerdo se me había pasado la hora y se me hacía tarde. Tendría que tomar el tren porque mi moto se encontraba dañada, pero nada podía molestarme ese día ya que estaba decidida en cambiar mi vida, provocando un giro y empezando a realizar lo que verdaderamente me gustaba.

Agarré mis llaves y emprendí camino hacia la estación, al llegar al lugar miré hacia uno de los costados y vi a una chica de espaldas muy parecida a la del edificio, moví la cabeza de un lado hacia otro intentando que mi mente vuelva a la realidad creyendo que estaba alucinando. Realmente pensaba que estaba volviéndome loca, no podía dejar atrás esa mirada aunque ahora solo fuese su espalda la que veía.

Llegó el tren a las 8:30 a.m y vi como esa joven subía en uno de sus vagones, maldije porque no era el tren que debía tomar y se me hacía verdaderamente tarde. Cuando arrancó el mismo y pasó el vagón en donde había subido la chica, pude notar la mirada de siempre resaltando sus ojos ahora, los que nunca había podido apreciar en cuanto a su color, eran azules como el azul con el que se baña el mar para fundirse en el horizonte junto al cielo formando una sola imagen. Para mi sorpresa me brindó una delicada sonrisa mientras me levantaba la mano, yo respondí alzando mi mano y sonriendo como una idiota enamorada, supe que si antes con solo la mirada no podía parar de pensar en ella en estos momentos más difícil se me haría.

Ya me encontraba en el trabajo, sería el último día de aguantar a mis compañeros intentando ser amables por ser famosa, nunca faltaba el pesado haciendo chistes de los cuales él solamente se reía, o la que se creía superior por tener solo unos años más que vos. Había decidido renunciar luego de varios años de ser esclava del sistema, me arriesgaría a dedicarme a la música, haciendo los acústicos y subiendo mas covers que me pedían en mi canal de música "mentalmesss" (https://www.youtube.com/user/mentalmesss), de más está decir que también seguiría con Pablo y "BNT" (https://www.youtube.com/user/BajoNingunTermino).

Me encaminé hacia la oficina de mi jefe golpeando la puerta antes de recibir la orden de que podía pasar, allí se encontraba él sentado en su sillón con sus ojos fijos en el ordenador sin perder detalle de los cálculos que hacía.

J: Hola Bárbara, ¿Cómo estás? ¿Qué te trae por acá? - Dijo sin mirarme.

B: Hola... - le respondí quedándome en silencio unos segundos mientras mi mente intentaba armar una oración, realmente estaba nerviosa pero decidida - sólo quería avisarle que hoy es mi último día de trabajo en la empresa, estoy muy agradecida con usted pero he tomado la decisión de renunciar, quiero dedicarme a la música sabiendo los riesgos que corro.

Obtuve una pequeña mirada de parte de él, había trabajado 8 años para su empresa conocía todos los movimientos así que era de esperar su sorpresa.

J: ¿Estás segura Bárbara? Mira que es arriesgado, si hay algún inconveniente sabés que podés decírmelo y lo solucionamos, pero no te apresures son muchos años que has trabajado acá y lamentaría perder una empleada como vos. - Dijo tratando de convencerme a que me quede.

B: No ha sucedido nada, solamente quiero arriesgarme y cumplir mi sueño, como le dije muchas gracias por todos estos años. - Aunque habían sucedido varias cosas que no me gustaron no me podía quejar.

Sin mas que decir me saludó y me dirigí a levantar mis pertenencias del escritorio, me sentía aliviada una persona totalmente nueva y con una preocupación menos en mi mente.

Eran las 16 p.m y dentro de dos horas tenía la reunión sobre los acústicos, así que me quedé por la zona tomando un café mientras pensaba en lo que había sucedido en la estación, ¿qué pretendía la chica? ¿quería volverme loca? Porque si ese era su objetivo, lo estaba logrando. Sólo me bastaba cerrar los ojos para que las imágenes pasarán una y otra vez, haciendo que vuelva a sonreír.

Luego de hablar con el productor como iban a ser los shows en Capital y adelantarme algo de alguna que otra provincia lo cual me ponía feliz, me fui directo a la estación, esto de andar sin la moto me molestaba tener que depender del transporte público era algo tedioso. Sólo pensaba que había posibilidades de toparme nuevamente con esos ojos azules, pero para mi mala suerte eso no sucedió.

Cuando llegué a casa estaba Flor, mi hermana, ya había preparado la cena así que hablamos de lo que había pasado en nuestros días y luego me fui a bañar para acostarme.