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Un sábado cualquiera un chico enojado por una cosa que su uke había hecho y eso era... Publicar una historia de ellos dos sin su permiso y ese chico se llama LeonardoRisterd .
Cuando llegue a su casa entre por la puerta trasera y al subir a su habitación lo pude ver en su ordenador jugando un videojuego llamado "smite" sin decir nada me acerqué a él y lo tome de la boca para que no gritara el dio un salto por el susto e intentó voltear pero yo sé lo impedí rápidamente lo saque de su silla y lo lancé a su cama.

_ me extrañaste? - dije coqueto-

_ como entraste?! - dijo alterado-

_ eso no importa, listo para tu castigo?

_ q-qué? Es una broma verdad?

_ no viste lo que te dije en wattpad? Ahora sufrirás las consecuencias

_ no, Bruno espera!

_ no esperare nada - dije apagando la computadora- no quiero que nada nos interrumpa - cerré la puerta con seguro

_ o-oye n-no es gracioso...

_ mj... Bueno no estoy jugando, y otra cosa como esto es un castigo... Pues dejaré la ventana media abierta para que tengas que ahogar esos lindos gemidos tuyos...

_ que?! Oye no te copies de ese manga!

_ es que me gusto ese castigo, ahora que comience lo bueno 7u7

_ no!, aléjate! - dijo parándose de la cama y manteniéndose lo más alejado de mi-

_ no sirve que te resistas al final igual pasara... - dije acercándome-

_ m... - parece que aun cree que lo dejare ir-

Rápidamente me acerqué a él y lo acorrale contra la pared.

_ prepárate porque no seré gentil... - dije seductor-

Empecé a lamer su cuello y dejar marcas de chupetones, él se quejaba y trataba de alejarme pero yo no sé lo permití. En un movimiento lo deje en su cama debajo mío.
Mientras lo besaba le iba quitando la ropa dejándolo totalmente expuesto ante mí. El solo gemía y jadeaba.
Pero como vi que lo disfrutaba, sin prepararlo lo penetre en una estocada, él dio un grito de dolor junto con unas pequeñas lágrimas, sin piedad lo embestía fuertemente, sin parar, cada estocada iba más profunda.

_ ah! B-Bruno! Aghn... Du- duele~...

_ no grites tanto o los vecinos te van a escuchar... - dije aún penetrandolo-

_ mgh ah... Ghm... Ah~

_ te gusta tu castigo? - le dije burlón-

_ b-basta~... Ah... Ya...

Yo no hice caso a sus súplicas, solo seguía penetrandolo y masturbandolo, el gemía pero también trataba de no ser escuchado...

_ ah... Me voy a correr...

_ n-no... Te corras... Dentro... Ah~

Pero cuando él dijo eso ya era demasiado tarde ya me había corrido pero al no quedar satisfecho lo levanto y lo pongo contra la cabecera de la cama y lo vuelvo a penetrar.

_ ah! Bruno!! duele!... Ah~... Más despacio! Mgh ...

_ haz más silencio o ¿acaso quieres que alguien te escuche?

_ ah... Mgh... Bruno... Ah...

_ me excitas cuando gimes mi nombre...

_ ah...

Después de unos minutos me corro nuevamente dejando su interior lleno de semen... Ambos nos quedamos descansando en su cama y hablamos un poco.

_ eres... Un... Maldito violador pervertido!!

_ gracias me alagas

_ te odio

_ ya cállate uke tsundere, sabes que te gusto

_ no podré caminar...

_ pero no tienes nada que hacer~~ que tal otra ronda?

_ jodete

Fin

Esta historia está basada en hechos reales...

Las mil y un violaciones Donde viven las historias. Descúbrelo ahora