NOVIA DE LAS SOMBRAS.

Parte sin título 21

-Ahora. -Solo esas palabras para que todos mis secuaces salgan a la luz. Todos aquellos que odiaban a la familia Sheppher tanto como yo, aun siendo parte de ellos. 

Bein mi mayor preciado ata a Nat casi sin esfuerzo mientras que Col tiene algún pequeño problema para atar a April, cosa que es innecesaria por su pésima fuerza. 

-¿Que es todo esto Marion? -Intenta acercarse a mi después de haberse desecho de Col, pero dos pequeñas voces han interrumpido nuestra reunión, dos pequeñas sombras que abrazan mi cuerpo al instante. 

-Sabes que pasara si no me haces caso. -Acaricio al pequeño Máximo. 

Nat rebosa tanta rabia, podría matarnos a todos si quisiera pero también es lista y sabe que eso no la conviene, es mas si lo hace habrá matado a una de sus hermanas y eso es casi un castigo, tengo un pequeño privilegio al estar en esta familia. 

Suspiro manteniendo mi pequeña sonrisa, burlona. -Te contare una historia April...

-¿Por que no se la cuento yo? -Soy interrumpida de nuevo por esa bocazas. -Ella a matado a tus padres. 

April mantiene la mirada fija al suelo, me acerco despacio acariciando su rostro. -Dime que no es cierto. -Suplica. 

Sonrío. -Lo es. -Sus lagrimas las que tanto guardaba caen al instante. -Veras... Hace un par de años mi madre me dio la vida, una vida que prometía, para ser sinceros, mi padre era cariñoso, luchador nos mantenía a salvo. -Respiro. -El sabia perfectamente lo que era mi madre, aun así la quiso, me quiso. -Silencio. -Siempre estaba enferma, su sangre corría por mis venas y mi cuerpo no soportaba su veneno. ¿Sabes quien se levantaba? -Llora. -Mi padre. -Abrazo a Máximo. -Una noche caí muy enferma y tuve que ser hospitalizada... ¿Sabes el sentimiento que corre por tu cuerpo al escuchar a tu padre suplicar por su vida? Le mataron, y se llevaron a mi madre, entonces una niña rebelde e inofensiva entro en mi habitación, yo lloraba pero al sentir sus brazos a cogerme sentí su calidez, su fortaleza, su inocencia... Recuerdo sus palabras. "Conmigo siempre estarás a salvo" Siempre jugábamos, reíamos, eramos felices, había un vinculo especial casi inquebrantable. -Silencio. -Hasta que su padre deicidio mi destino. Me alejo de la inocencia para meterme en un mundo lleno de sexo, drogas, palizas... -Apil levanta la mirada. -Ni ella ni Dante's ni mi madre hicieron nada. "No siento nada, no hay dolor, no hay mochila acuestas" Dejaron que mi infancia se convirtiera en una maldición. -Agacho mis menos para tocar sus labios. -No creas que te odio a ti, tu... -Clavo mis ojos en los suyos. -Eres parte del juego. 

Cargan con ellas como sacos caminando hacia los cuatro por cuatro que nos esperan. Están entusiasmados de haber dado caza a la culpable de tantos de sus problemas, detalles que ya explicare después. 

Enciendo una cerilla lanzandola hacia la casa, todo arde, el fuego se aviva con cada cosa que quema, primero la madera, para luego dejar un rastro negro en el cielo. En mis ojos las llamas se reflejan, cerrarlos por un momento, respirar hondo y sonreír. 

-Nos marchamos. "Tengo todo lo que quiero." 

Los pequeños se duermen en mis piernas, acaricio sus mejillas, en cierta forma me hacen felices, tenerles demuestra mi inocencia. 

-Que harás con ellas... Marco podría descubrirlas. "Bane mi salvador,mi mano derecha, mi viejo amigo..." 

-Lo tengo todo preparado. "No te preocupes."

-Disponen de muy poco tiempo. "Su voz siempre me ha gustado, suena tan inteligente." El reloj sigue marcando las horas y por desgracia para ellas no esta de su parte. -Sonrío. 

-Deberíamos ir buscando a La Normis. "Bane tiene una mascara de gas, cada palabra que sale de su boca hace eco en mi cabeza."

-¿Para que? Mañana tendrás todo a tus pies, despertaremos a todos esos inútiles que creen vivir una libertad segura. -Me mira. -Comprenderán que han sido sumisos ante estos. -Señala a Nat. -Ante seres que se presentaron una vez como inmortales, hasta que descubrimos sus puntos débiles. 

-Con calma viejo amigo, de momento iremos a La Normis. "Quiero devolver a los niños a donde pertenecen." 

El camino era largo y pesado, el silencio  agotador los pensamientos hazachos constantes y los niños aunque dormían sus pesadillas resaltaban cuando había oscuridad en el camino, e ahí mi papel acariciar sus mejillas y tranquilizar sus mentes, al menos por varios segundos. 

-Marion por favor, dejame estar con ellos, te lo suplico. "No."

-No es tu momento April. 

-Por favor. 

Un gesto de mis manos para que Bane detenga el coche casi al instante, salgo despacio por los pequeños y saco a su madre quien yace encadenada al asiento del copiloto. Su expresiones totalmente triste, hundida... La lluvia cae por su pelo formando pequeñas gotas que caen al vacío, sus muñecas muestran pequeñas rozaduras por tirar de ellas demasiado. Su labio sangra, sus ojos están vacíos oscuros como el cielo, sin ningún tipo de vitalidad. 

-Déjame curarte eso. -Acaricio su labios quitando la sangre por completo, esta inmóvil. -Siento que te veas involucrada en mis planes. -Acaricio sus manos. -Los niños estarán bien April... Te lo prometo. "Dispara." -Varias balas chocan contra su cuerpo, el cual a caído rendido. 

-¡NO! ¡APRIL!

-Nos vamos...