Mi ángel negro

Epílogo/1

¿Quién coño necesita la mierda del amor? ¿Un príncipe azul? JA JA eso es lo que nos meten en la cabeza cuando somos pequeños; amor verdadero, tu media naranja, etc. Lo que no llegamos a entender es que todos los chicos son iguales ,y si no, son gays o esa fue mi impresión hasta ahora, todos los chicos se miran al espejo y se dicen a sí mismos lo guapos que son, el cuerpazo que tienen o que no hay ningún otro como ellos y en ellos todo es perfecto, pues esos creídos no se dan cuenta de que no llegarán a nada, lo único que les interesa es coger una chica, hacer que se enamore de ellos, regalándole los oídos y cuando ya está todo hecho se van. Si, así es la vida real, menos mal que eso a mi no me ha pasado, pero a unas cuantas "amigas" mías sí, y la verdad es que por una parte yo creo que se lo merecían a excepción de otras claro... En esta vida siempre hay excepciones para todo,salvo para los chicos.

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Capítulo 1

Buenas noches para quienes las tengan, es 31 de diciembre y como es seguro, nadie querrá pasar fin de año sólo. Pues yo lo voy a hacer ,estoy con el pijama puesto sentada en el sofá viendo como la gente está entusiasmada por terminar de comerse las uvas, que dan comienzo al año 2019.

¿Y como he acabado sola? os preguntareis...

Me llamo Lizeth Braun y tengo 16 años, mis padres están divorciados desde hace 5 años, cosa que me hizo madurar un tanto rápido, y la cuestión de que yo esté tapada con una manta y sentada en el sofá comiendo las 12 uvas SOLA, es por que yo he querido; ¿porqué? por que no quería pasar este día con mi madre y le dije que se fuera a pasarlo bien con su novio el último día del año, ese es el por qué de que yo esté aquí, y como siempre pensando, pero esta vez no en cualquier cosa, no, si no en todo mi año, en todo lo que ha pasado y lo que debería haber pasado. He conocido a mucha gente, pero pocas se han quedado, (eso sí lo agradezco)me lo he pasado más bien que mal, pero lo malo se queda igualmente y gracias a Dios no me he enamorado, os he de decir que no soy de esas chicas que está enamorada del amor, no, que bah todo lo contrario cuanto más lejos mejor y creeréis que es por que algún novio me ha salido rana, no es nada de eso, ya os lo digo yo, nunca he tenido novio y no por que no quisiera, por lo menos antes, ahora no lo quiero ni de coña...¿Por qué tanto asco a los chicos?, porque sinceramente para tener a un capullo creído cerca de mí ya tengo a mi hermano que por cierto ahora se lo estará pasando muy bien con su novia dándole el regalo de año nuevo... Volviendo a la realidad ya estamos en 2019 yupiii... Cuánta ilusión... véase el sarcasmo en mis palabras. Muchas imágenes se pasan por mi mente pero la más importante es mi padre, hace dos meses que se fue a vivir con su novia a Colombia, les echo mucho de menos.

Los días pasan y yo sigo metida en casa, únicamente me levanto de la cama al baño, del baño a la cocina y de ahí al salón y vuelta a mi habitación. No me apetece salir de casa para nada, tampoco tengo con quien y sólo hay un lugar al que ir, ese pub al que tan sólo he ido un par de veces el año pasado, a ver, tampoco es que no tenga amigas, que si las tengo, sólo que este año han ido todas juntas a pasar unos días fuera de Orlando y yo no he ido por que no me han dado permiso, pero bueno tendré que esperar a que empiecen de nuevo las clases, después de las vacaciones de navidad, a las que no quiero ir por el infierno de colegio al que tengo que ir, y si tengo que dar un consejo a alguien , mi consejo es que no se fíe de nadie hasta que esa persona confíe en ti e incluso ni siquiera ya que son todos demasiado falsos... Bueno la cosa es que sólo hay cuatro personas en las que confiar y ya es mucho, la mayor parte de mis amigas se encuentran donde viven mis abuelos pero mi madre no me deja ir allí.

Ya llegó el día y no me siento nada preparada para ir a ese antro de mala muerte y estoy esperando a ver si Elisabeth y Cloe se hacen amiguísimas como Nicky y Alison después de ser las archienemigas, como ha sucedido desde que empezaron las clases el pasado septiembre.

Las vacaciones cambian a las personas la verdad.

-Buenos días, feliz años a todos-dice la primera profesora, la de plástica, la perfeccionista...Con un tono muy recto con nada de ilusión ni alegría, digamos que está un poco amargada o eso es lo que aparenta, es la típica vieja de pelo corto que se lo tiñe de un color llamativo y viste cuanto más extravagante mejor. Pues si esa es mi profesora.

-Feliz año profe- saltan algunos, otros ni siquiera abren la boca yo soy una de esas ya que estoy muy concentrada haciendo la lámina que va a pedir dentro de un poco y yo ni la he empezado bueno un 1 no está mal. Eso pasa por dedicar las vacaciones de navidad a no hacer nada en concreto.

Pasan las horas y ya estoy pensando en lo que me encantaría que ya fuese viernes pero por desgracia ese sueño no se cumple ya que todavía nos encontramos en el odioso lunes en el que estaba desde el primer momento.

La semana pasa muy lenta y se nota la monotonía de los días, no sé cómo he aguantado todo de un tirón, lo mejor es que ya estoy en viernes, hoy el día a pasado más rápido de lo que esperaba ya que tanto los profesores como los alumnos están agotados. Hoy hay fiesta así que he de prepararme, hemos quedado todas para vestirnos y prepararnos en casa de Natalia, la noche se presenta buena si...