Entre sin pensarlo un segundo mas. Los dos muchachos surfeaban muy bien esas enormes olas, pero yo todavía seguía pasando por debajo de ellas, quería esperar un poco. Quería conocer bien a lo que me estaba enfrentando en este enorme mar, quiero esperar una verdadera ola para mi y dedicársela a mi madre. Seguramente ella recorrió estos mismos mares.
Cuando se tranquilizo un poco, me quede sentada en la tabla, todo estaba callado, los dos muchachos se acercaron a mi
-¿Que paso que no entraste?
-Estoy esperando una ola mucho mas grande que esas
-Pues las vas a encontrar, son de aparecer a veces -Dijo
-¿Que tal aquí? ¿Hay algo por lo que me tenga que preocupar?
-Sonriendo- No, no, aquí no hay nada. Es solo una playa muy tranquila
-¿Como llegaste? Casi nadie encuentra a Profundo
-Mi madre vino aquí cuando tenia su edad, y siempre quiso que la conociera. ¿Saben por que se llama Profundo?
-Se decía hace muchos años que habia criaturas mitológicas en el fondo del mar
-¿En serio? Hablas de... -Hice un gesto- ¿Sirenas?
-Si, pero nunca se vio nada extraño.
-Esta playa siempre fue tranquila
-¡Hey esa es tu ola!
Mire hacia adelante y frente a mi, a pocos metros, se estaba formando una ola enorme. Me quede esperando y comencé a remar rápidamente. Me puse en posición y cuando estuve lista, monte esa enorme ola como nunca lo habia hecho, juro que puedo sentir la presencia de mi mama a mi lado, tomando mi mano bajo el túnel de agua que se acaba de hacer. Rápidamente salí de la ola al final de ella, los dos muchachos comenzaron aplaudirme. Fue increible. Lo mejor que me paso en la vida.
-¡Genial! -Aplaudieron
-Fue excelente
Mire el cielo y pude ver que se venia una tormenta grande, así que los tres volvimos a la orilla. Tome mis cosas y nos fuimos caminando los tres por aquel bosque enorme que rodeaba la playa, al llegar al pueblo, después de 15 minutos de caminar entre los arboles, nos saludamos y nos despedimos.
-¡Te vemos mañana mexicana!
-Voltee mientras caminaba- ¡Estaré aquí por la mañana!
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Profundo TERMINADA
Mystery / ThrillerTen cuidado, las sirenas no son como las ves en los cuentos de hadas