CAPÍTULO CON UN POCO DE CONTENIDO SEXUAL, NO MUY EXPLÍCITO
—————————————————————Estaba con Liam en su cuarto. Habíamos decidido pasar el día sin hacer nada concretamente, simplemente ver alguna película y pedir pizza. Hablar, tal vez. Y besarnos mucho.
— Quiero aprovechar el tiempo al máximo, Liam —dije, mientras acaricaba su pelo.
— Vamos a tener mucho más tiempo después de esto —se acomodó un poco mejor y puso su cara en el hueco de mi cuello.
Pero yo no lo creía así. Mi tío era poderoso y fuerte, era violento. Él podía, y puede matarnos a todos. Con solo un chasquido, podemos estar todos bajo tierra.
— ¿Te pasa algo? —preguntó Liam, mirándome.
— Solo... siento que algo acabará saliendo mal. Como si fuera la últim-
— No será la última vez para nadie, Leyla. Ni si quiera lo pienses.
Suspiré y bajé su cabeza otra vez hacía el hueco de mi cuello. No quería discutir, y menos con Liam. Simplemente quiero estar así para el resto de mí vida.
— ¿Cómo puedo hacer que se te quite el miedo de la cabeza? —murmuró Liam mientras dejaba algunos besos en mi cuello, algo que me ponía los pelos de punta.
Agarré un poco más fuerte su pelo.
— ¿Qué se te ocurre? —murmuré.
Liam gruñó y abrió su boca para absorver un poco mí piel. Sabía que iba a dejar marca, pero me daba igual. No me importaba para nada. Liam era para mí y yo era para Liam. Éramos el uno para el otro.
Liam estaba tumbado encima mío y entre mis piernas desde hace un rato, un poco más bajo que yo para poder poner su cabeza apoyada en mi pecho. Pero ahora la posición parecía más prometedora que antes.
Liam levantó la cabeza y me besó. Pasó de ser un beso tranquilo a más profundo, más necesitado. Liam tenía sus manos en mi cintura, y no sé en que momento las metió por debajo de mí camiseta.
Liam me dio un último beso en mis labios y empezó a darlos en mi nariz, en mis mejillas, en todas las partes de mí cara, para seguir en mí cuello y quitándome la camiseta y así poder dar más besos por otras zonas. Liam me miró, y mientras sus manos subieron poco a poco, acariciándo toda la piel, hasta el broche de mí sujetador.
— Puedo parar si crees que voy muy rápido, Leyla —susurró con su ronca voz.
Cogí sus dos manos y las coloqué encima de mis pechos, mientras yo misma me desabrochaba el sujetador. Las manos de Liam estaban puestas en mis desnudos pechos, y para nada me importaba.
— No quiero que pares —susurré.
Liam sonrío y empezó a besar mis clavículas, se deshizo de mi sujetador por completo y besó mis pechos también, bajando hacía mí abdomen. Susurra miles y miles de piropos y palabras bonitas mientras repartía besos por mi cuerpo, y me aceleraba más el corazón.
Sus besos llegaron al borde del pantalón, y un escalofrío me recorrió entera.
Se levantó un poco y se quitó la camiseta, dejándome ver su perfecto y trabajado abdomen, sus fuertes brazos. Ahora sí creo que estaba babeando.
No le dejé volver a tumbarse encima mío, ya que me levanté rápidamente tumbándolo en la cama y poniéndome a horcajadas encima suyo.
— Espera un momento —le besé.
Me levanté y casi corrí hacía la cocina. Menos mal que no había nadie en su casa, porque no sería cómodo encontrarme con el padre de Liam yendo yo con los pechos al aire y solo un pantalón puesto.
Abrí la nevera y vi el bote de nata montada. Lo cogí y volví a la habitación. Por inércia me tapé los pechos al entrar con una mano, mientras la otra la escondía detrás de mí para que no viera lo que llevaba.
— No te tapes, estás preciosa —dijo, y yo cerré la puerta con el pie.
Volví a ponerme en la posición anterior, y le enseñé la nata montada.
— Quiero probar algo —murmuré, quitándole la tapa y acercándo el bote a su boca— Ábrela.
Liam abrió la boca y puse dentro solo un poco de la nata, para luego dejarla a un lado.
— No te la trages.
Liam me miraba sin entender mucho de lo que estaba pasando, pero cuando ataqué su boca y una mezcla de sabores se inundo entre nosotros, pareció captarlo. Y supe que le gustó cuando cada vez notaba más y más su bulto.
Me separé de él y volví a levantarme, solo para quitarme los pantalones y quedar en un tanga de lencería rosa que me puse hoy. Gran elección, Leyla.
Me volví a poner a horcajadas encima de Liam, y antes de seguir con la nata, me restregué un poco por encima de su notable erección, de atrás a delante, escuchando los gemidos de Liam por el placer.
Cogí la nata y apreté el botón para echar pegotes que quedaban perfectos, como los que ponen encima de los creps, pero yo los ponía por todo su cuerpo. Y luego, mientras daba besos, absorbía la nata y, a veces dejaba marcas dónde antes estaba la nata que hacían suspirar al muchacho.
Le quité el pantalón, y su calzoncillo era la marca de su erección, que por poco parecía que iba a desgarrar la tela.
Liam me pusó otra vez abajo, poniéndose encima y alargando su brazo al cajón para coger un sobre con un condón y poniéndomelo, literalmente, a pocos centímetros de mis ojos.
— ¿Estás plena y completamente segura de que quieres hacerlo? Todavía puedo parar si no te sientes segu-
— Quiero hacerlo Liam, enserio —dije— Yo quiero hacerlo contigo, aquí y ahora.
Él sonrío y me besó, para luego quitarse los calzoncillos y quitarme a mí el tanga, poniéndose el condón.
— No dejes que me pase nada, por favor. Por favor —susurré, cogiendo su cara y acariciándola.
— No dejaré que te pase nada —me besó y luego besó mí frente— Te lo prometo.
Sonreí y le besé otra vez, para acabar mordiéndole el labio.
— Tal vez al principio duela un poco, pero voy a ir con cuidado, ¿vale?
Asentí y suspiré, Liam me besó y entró despacio, para que el dolor fuera menor.
Y tuvo razón, aunque al principio era un poco doloroso, luego dejó de serlo, y ahí fue cuando realmente nos unimos, cuando realmente fuimos uno. Cuando realmente, me sentí protegida.
— Te amo Liam —murmuré mientras le besaba.
— Y yo a ti mi amor —susurró, para seguir fundiéndonos el uno con el otro.
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Sé que ha sido una mierda i mean nunca he escrito escenas así sorry girls ☹️ Se acerca el capítulo final... ¡¡¡¡si queréis nuevo capítulo, comentar!!!!
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ángel caído » liam dunbar
WerewolfLiteralmente cayó un ángel del cielo... y con ella trajo muchas sorpresas, y como de costumbre en Beacon Hills, muchos problemas. • ¡¡HAY SPOILERS DE LA SERIE!! • todos los personajes, lugares y seres mitológicos le pertenecen a Jeff Davis, menos l...