Mi chico es un hombre lobo?

2.-El instituto

El lunes a las seis de la mañana me sonó el despertador. Tenia puesta la canción de mi grupo favorito "los reptos". Yo siempre me despertaba muy pronto porque tardaba mucho en prepararme e irme. Cuando apagué mi despertador me vestí, ese día había elegido una camiseta azul claro de manga larga y unos vaqueros negros. Tardé mas de veinte minutos en vestirme porque entre que soy lenta y tenía mucho sueño, no podía con mi cuerpo. Me levanté me fui a la cocina y desayune, ese día una taza de café con unas tostadas. Cuando terminé me fui al baño y me peiné. Para ese día había pensado en ponerme una coleta pero como no me apetecía me hice dos trenzas de raíz. Después de peinarme, lavarme los dientes y desayunar, preparé mi mochila y me fui.

A medio camino como siempre me encontré con Elisabeth que salía de su casa súper emocionada.

-¡Hola!- dije yo.
-¡Tia, tía, tía! ¿¡Crees que le gustaremos al chico!?- dijo ella muy emocionada. (Que quede claro que a ella le gustaría mucho tener novio y está obsesionada por enamorarse)
-No se yo... Bueno ¿nos vamos?- dije yo para librarme del tema.
La verdad es que Elisabeth era muy guapa. Suele llevar siempre un top y está delgada, y su cara es bonita pero su carácter es de niña chica y eso no les suele gustar a los chicos.

Cuando llegamos al instituto, como siempre nos miraban con cara de asco. Como ya estábamos acostumbradas seguimos y pasamos entre todos esos ojos. Cuando llegamos a nuestras respectivas taquillas y metimos nuestros libros en las taquillas y las decoramos a nuestra medida, vimos que las chicas "populares y guapas" se acercaban a la puerta principal.

-¿Que hacen todas las tonpop- es una mezcla entre tonta=ton y populares=pop. Entre ellas suman: ton+pop=tonpop, osea que significa tontas populares. Es un invento nuestro.- en la puerta principal?- dijo Elisabeth.

-Ni idea- Respondí yo.

De repente vi entre todas las melenas largas una corta y morena. Era muy guapo. Tenía los ojos azules y tenía los brazos y piernas muy peludos. Cuando lo vi sentí mariposas en el estómago. Era algo que no había sentido antes por nadie. Me había enamorado.