Me Enamore De Ti

Was It A Dream?

One-Shot

Iori Yagami x Kula Diamond

❤❦❤ Romance ❤❦❤

Was It A Dream? - 30STM

Recomendación para escuchar durante la lectura

POV Iori

Esa mañana, desperté sintiendo un tremendo dolor en mi abdomen. Un par de manos yacían sobre mi cuerpo, una sobre el área del dolor y la otra sobre mi pecho.

Abrí mis ojos y me di cuenta que ya no vestía mi camiseta, estaba sentado en el suelo y mi abdomen se encontraba vendado, dichas vendas que cubrían una tremenda herida. Ni siquiera recuerdo cómo es que termine en ese estado y esa maldita herida se cerraba lenta y dolorosamente.

Hubo algo que llamó bastante mi atención en ese momento, y eran las manos de esa chica que reposaban sobre mí, mié tras que mi cuerpo descansaba recargado sobre esa mujer.

Puse mi mano izquierda sobre la de ella, justo en la que esa niña tenía sobre mi herida. Ella la movió un poco y después entrelazo sus dedos con los míos.

Cerré mis ojos por un momento e hice un esfuerzo por levantarme, pero el dolor no me lo permitió. Tuve que quedarme recargado sobre ella.

Pude sentir un movimiento leve. Ella había despertado y perdió su inocente mirada en el techo por un momento hasta que se dio cuenta que estaba tomando mi mano. Reacciono sobresaltada, soltó mi mano y dejo de presionar mi herida.

Estuvo cerca de llevar su mano manchada con mi sangre a su rostro y se detuvo al instante, tal vez no quería manchar su piel de porcelana con mi sangre endemoniada.

Suspiré con profundidad e intente levantarme de nuevo, más ella me lo impidió.

-¡No te muevas!- me dijo con desesperación- Si te mueves la herida se abrirá mas y morirás desangrado.

Por algún motivo no me opuse a su pedido, volví a suspirar y ella recorrió su mano de mi pecho a mi herida. Fue un largo momento de silencio incomodo, hasta que decidió hablar y romper el hielo.

-¿Tienes hambre?- me pregunto con la voz baja.
-Un poco- fue mi única respuesta.
-Entonces iré a preparar algo- con una de sus manos me empujo levemente por la espalda para poder levantarse del suelo. Cuando se levanto me dejo con cuidado para que mi espalda y mi cabeza quedarán en reposo sobre el sillón en el cual ella estaba recargada -. Primero que nada te cambiare las vendas, están repletas de sangre.

Se marcho por un momento y volvió con un botiquín de primeros auxilios en sus manos. Se puso de rodillas a mi lado y comenzó a remover las vendas y gasas que estaban cubriendo mi herida.

¡Dios Santo! Si que era una tremenda herida.

Me puso agua oxigenada en la herida y esta empezó a burbujear al contacto con mi herida, limpio con una toalla y comenzó a poner gasas sobre ésta y paso a vendarme.

La miraba fijamente mientras ella me trataba la herida. Justo cuando ella terminó la detuve al poner mi mano sobre su hombro descubierto, se detuvo al instante de mi contacto y me miro con una expresión combinada de miedo, sorpresa y confusión. Ese rostro no tenía precio.

¡Cielo Santo! Se miraba tan hermosa y espléndida en ese instante.

Para ser honesto, no sabía si ya estaba delirando por la pérdida de sangre que tuve antes de despertar.