Survivors - Glenn Rhee y Lexie Lutz (Glexie)

|11|- Sorrow

Tengo mucha sed, y el cuerpo me pesa el doble de lo que debería. Me asombra el que aún pueda sentir algo, aunque escucho voces, no logro distinguir ninguna.

Cuando abro mis ojos, tengo la vista nublada, y la garganta seca hace que el tragar sea difícil.

—Espero estés aliviado porque ahora yo también mostré mis atributos —mi voz suena extraña inclusive para mí. Rick, a quien único he visto, se acerca sonriente.

—¿Cómo te sientes? —Agarra mi mano y la aprieta.

—Como si me hubiera atropellado un camión —ambos reímos pero dejo de hacerlo cuando las suturas me dan una punzada.

—No te rías, puedes sacar tus puntos —me regaña Rick.

—Como diga, Sheriff —le digo—. Tengo sed —apenas he terminado de hablar cuando ha ido por un vaso a la mesita de noche—. ¡Wow! Eso es rapidez —bromeo.

—No vuelvas a asustarme así —dice con los ojos llorosos.

—No puedo prometer eso, Rick. Haría cualquier cosa por salvar a quien amo —mi garganta se siente mucho más aliviada—. ¿Cómo va la búsqueda de Sofía? ¿Dónde está Carl?

—Shane se ha encargado de dirigir la búsqueda. Ella no ha aparecido aún —responde y se forma un nudo en mi garganta—. Hemos hablado con Carol, preparándola para encontrar a Sofía convertida, pero ella aún tiene esperanzas.

—Deberías entenderla. Sofía es su hija, y definitivamente se negara a su perdida hasta que vea un cadáver —respondo. Suspiro, es increíble que algo como esto, tan simple, me agote tanto—. Quiero ver a mi adorado Carl, ¿podrías buscarlo?

Rick afirma y sale de la habitación. Un hombre de cabellos blancos entra y sonríe al verme despierta.

—Finalmente has despertado. Soy Hershel Greene y fui quien te opero —dice.

—Infinitamente agradecida, señor Green. Me llamo Lexie Lutz.

—Puedes llamarme solo Hershel, querida.

Afirmo. Es un hombre muy amable y me agrada. Se acerca y esperando mi afirmación quita un poco la sabana para revisar las suturas.

—¿Cómo se ve todo? —Le pregunto.

—Las puntadas están un poco inflamadas, pero nada que los antibióticos no puedan mejorar.

—Me permite un espejo, por favor —se aleja un poco y toma un espejo pequeño del armario. Me lo entrega y analizo las suturas—. Necesitare antibiótico por vena, y alguna pomada. Dentro de poco comenzará a picar. Es posible que mañana pueda ponerme de pie, aunque no debo hacer fuerza en exceso.

—¿Sabes de medicina?

—¿Nadie lo menciono? Me faltaba muy poco para terminar mi especialidad —respondí.

—Ya sabes lo que debes hacer hasta que sellen las puntadas.

—Seré una buena paciente.

Se escuchan unos toques y la puerta se abre. Rick ha vuelto en compañía de un lloroso Carl que me mira desde el umbral de la puerta.

Hershel devuelve la sábana a su lugar, y se marcha dejando que Carl y Rick pasen. Carl se sienta a mi lado y solloza. Le sonrió un poco y acaricio su mejilla.

—Ya te debo dos —su voz entrecortada me achina la piel.

—Podríamos resolverlo con algunas barras de chocolate —le digo y él sonríe—. Estaré bien. No te preocupes demasiado, cariño.

—¿Puedo entrar? ¿Puedo entrar? —Repetía Amy una y otra vez desde el otro lado de la puerta. Carl se levanta molesto de la cama y va a abrirle.