Yo no buscaba a nadie y sin embargo apareciste tu

Era el primer día, no tenía intenciones de hablar con nadie, para que si los iba a ver durante mucho tiempo. Al día siguiente nos obligaron a presentarnos, como si nos hicieran un favor, pero ocurre algo un poco inesperado, escuche una voz de una mujer, era tierna, mire hacia aquella voz y vaya que sorpresa, eras tú, destacabas entre las demás, cabello negro, linda sonrisa con braquets, curvas hermosas, pero sin duda lo que me cautivo de ti fue tu actitud, eras aquella chica que tenía miedo de enamorarse pero aun así radiabas de felicidad, destrozando así la poca estabilidad que tenia, yo no buscaba a nadie y sin embargo apareciste tu.

Aquella mujer que todo hombre desea la tenía yo, que ironía, miraste a tu alrededor y entre tantos me elegiste a mí para amarnos, nuestras imperfecciones se unieron para complementar al otro, ¿puedes creerlo?, llegue a pensar que era feliz contigo, que sin ti no necesitaba a nadie más, pero ¿y tú?, no fue lo mismo, entre yo más te amaba tu desapareciste entre la gente como si jamás te hubiera importado, como si para ti esto nunca hubiera sido especial, como si el amor que yo te daba te lo pudiera dar cualquiera, como si los sacrificios que hice por ti no hubiera sido nada.

Te extraño, extraño a la chica de la que me enamore, aquella que me complementaba, a la actual no la conozco y no quisiera ni hacerlo nunca, jamás saldrás de mi alma, aunque quisiera no haberte conocido, no te olvidare nunca. Me atrevería a preguntarte ¿a dónde se va el amor cuando se olvida?, pero ya tengo la respuesta y me la diste hace tiempo, no fue aquella ves que tú dignidad se fue con el inodoro, fue aquella vez que desconociste nuestra promesa y te volviste completamente de él.