Yo y mis hermanos Akatsuki

Tobi: el menor mentalmente

Tobi, a pesar de ser mayor que yo por un año, lo tenemos como el más pequeño de todos por su actitud. A sus diecisiete años, se comporta como si tuviera seis. Y hay veces que su actitud infantil saca de quicio...

Flashback

En medio de la noche, me levanté de la cama para ir a tomar agua a la cocina. Como mi habitación era una de las últimas del pasillo, tenía que recorrer todo el pasillo superior para bajar las escaleras. Puse los ojos en blanco al escuchar a mis hermanos roncando, y me rasqué la cabeza con gesto cansado. Y al pasar frente a la puerta de Tobi...

- ¿¡PERO QUÉ...!?- chillé. ¡Una cuerda me había apresado el pie derecho por el tobillo y ahora estaba suspendida del techo bocabajo!

Ahora estaba colgando del revés a metro y medio del suelo, en posición de murciélago y retorciéndome histérica. Supe enseguida lo que pasaba.

- ¡¡¡¡¡¡TOBI!!!!!!- grité a pleno pulmón, furiosa. 

- ¿A qué viene tanto alboroto?- protestó Hidan, saliendo de su habitación con los ojos entrecerrados.

- ¡Tobi ha atrapado al troll!- anunció triunfante Tobi al ver a "algo" colgando de su trampa para monstruos. A pesar de ser él, la cuerda estaba muy bien montada.

- Muy bien, Tobi, has atrapado al troll malo- felicitó Itachi, saliendo también de su habitación. Uno a uno todos mis hermanos iban saliendo, fingiendo que les interesaba el tema. Pero en cuanto vieron que realmente había algo colgando de la trampa de Tobi, se apresuraron a encender la luz.

- ¡¡¡BAJADME DE AQUÍ!!!- chillé, histérica, en cuanto la luz alumbró el pasillo. Todos empezaron a reírse.

- ¡En lo del troll estoy de acuerdo!- lloraba Hidan de risa.

- ¡No tiene gracia, idiota!- no parab de gritar, revolviéndome para intentar salir de ahí-. ¡Tobi, los trolls no existen a excepción de Hidan, ¿vale?!

- ¿Hidan es el troll?- se asombró Tobi.

- Hay una cosa que se llama sarcasmo...- resopló Pain. 

- ¿¡A qué vienen tantos gritos a estas horas, chicos!?- se alarmaron nuestros padres, corriendo fuera de su habitación. Al ver lo que pasaba, rompieron a reír.

- ¡Vosotros también no!- protesté-. ¡Que alguien me baje de aquí, por favor!

Itachi, sin previo aviso, lanzó una bola de fuego a la cuerda, quemándola al instante y provocando que yo cayese en picado. Por suerte, mi padre me recogió en brazos. Me dejó de pie, me saqué la cuerda y luego me puse a perseguir a Tobi hasta que lo arrinconé y lo violé.

(¡Que no, bakas, no soy tan mala!)

- ¡Vuelve a poner esa trampa y la próxima vez te corto el cuello!- amenacé tras haberle dado un buen mamporro en la cabeza. 

Fin del flashback

Sin embargo, su actitud de niño pequeño a veces resulta de lo más adorable. Siempre quiere saberlo todo e insiste en ayudar todo el tiempo. Es el niño de mamá y un amor de tierno con sus hermanos. Tobi Akatsuki, el niño pequeño mentalmente.