Diciéndole Adiós Al Amor|| EDITANDO

Forever Young

Jon

Ya pasaron dos semanas y media después del accidente de las chicas, el papá de Al aun me ve como una gran amenaza a su hija. Con respecto a la enfermera desquiciada, Ethan me hizo el favor de mi vida y el la alejo de mi. Me siento algo culpable porque días antes de que nos anunciaran que las chicas están casi listas para darlas de alta el me había dicho que quería llevar a Anne al baile de la graduación y ahora no podrá ir porwue esa misma noche tiene una cita con la lunática.

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- Ya no soporto a esa tipa... ¿Qué estas haciendo?

- Pienso en una manera de invitar a Anne al baile, pero que tal que aun no salen... El concurso, lo había olvidado, con las dos en el hospital no será posible.

- Tranquilo, ustedes son la única banda de todas que vale la pena ver, y lo digo en serio. Quisiera poder decirle a Al que sea yo con quien vaya, pero no puedo

- ¿por que? ambos se agradan mutuamente, sinceramente no veo el problema

- No hay uno, sino dos problemas 1-. Mi suegrito me odia y me culpa por el accidente, cuando creo que ni el sabia que demonios había pasado. 2-. Hay una enfermera loca que no para de acosarme por todo el maldito hospital 3-. Ninguno de los dos me dejan acercarme, el papa de Al parece guardia de alta seguridad que podría romperme las costillas apenas respire cerca de la puerta. Después tenemos a la enfermera copia barata de Harley Quinn que me acosa todo el tiempo y amenaza con gritar otra vez si no salgo con ella.

-Jon, esos son tres problemas, no dos como tu dijiste...

- Si bueno, sabes que soy pésimo para el calculo avanzado. Como sea, no puedo decirle si ambos me lo prohíben...

- Descuida, tu quédate tranquilo que si te van a dejar acercarte a ella

- Ojala sea cierto.- Y me marche de ahí, su voz se tornó claramente melancólica pero imagino que es por todo lo que estamos pasando, es lógico.

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Después de eso el padre de Al me invitó a un café-bar cerca de ahí, creí que no seria buena idea pedir una cerveza, después de todo el me pidió que habláramos y no podía dar la impresión de un ebrio. El si se pidió una cerveza, yo solo me pedí una naranjada, hacia bastante calor como para pedir un café a esta hora.

-Bueno, ese chico... Nathan, Ethan... da igual como se llame...

- Ethan...

- Como sea, el me contó todo lo que pasó, lamento haber creído que habías sido el responsable del accidente cuando en realidad no tenias nada que ver... es solo que, solo hacia lo que cualquier padre con su hijita. Además tu le gustas a ella y no puedo evitarlo, son sus gustos... algún día tenia que pasar

- Le aseguro que no tengo ninguna intensión de lastimar a Al o hacer algo que lo haga... además, usted es su padre, no puedo robar ese amor.

-Bueno, tu sabes como es esto de ser padre, ningún tipo es lo suficientemente bueno para ellas... pero supongo que lo sabrás cuando sea tu turno.

- Supongo... supongo que si, así será.

-Y te advierto algo, el día que pretendan hacer algo, TU tendrás que comprar los condones, no quiero saber las cosas intimas de mi hija... que bueno igual y ya lo hicieron y yo ni en cuenta.- Ok, eso fue SUPER raro, acaso ¿me estaba dando permiso de estar con Al... de esa manera?- Y si por alguna razón ambos procrean, no vengan a mi casa a pedir asilo, porque se que nunca se irán, además fue resbalón de ustedes no mío como para tenerlos en mi casa.- Estaba muy asombrado con todo lo que me estaba diciendo, en realidad no era un tipo malo, solo alguien preocupado por el bienestar de su hija. Pero en verdad, creo que mi cara fue tal que se dio cuenta.- Porque si, se que es lo que dirían si Alana sale preñada antes de que acabe o siquiera inicie la Universidad y mas en su dichoso baile de Graduación. Esas cosas suelen pasar.

-Bueno, le aseguro señor Rovia que nada de eso pasara.

-Muchacho, se que va a pasar, ninguno de los dos lo dirá, pero apenas estén tan ebrios en esa fiesta se irán a algún lado y se harán tantas cosas que creyeron que jamás se podrían llegar a hacer. Así de fácil, yo también fui joven y descontrolado. Era el tipo mas rudo, mis amigos y yo siempre fuimos el desastre escolar.

- Yo... yo trato de ser un chico bueno.

- Naaah, tu eres el típico niño al que todas quieren, con circulo social amplio y uno de amigos bastante reservado. Pero te diré algo, cada estupidez que hagas, sin importar que sea, si ha valido la pena recuérdala, solo así te mantienes joven, con todos tus recuerdos en pie.- Hablar con el era genial, no creí que fuera de los que piensan así.- Te contare algo, casi no lo cuento pero me agradas, Al hizo una buena elección contigo. Una vez escapé del kínder con mis amigos para ir a ver una película animada al cine.- No sabia que hacer, si reír o seguir la conversación. Digo si es algo que casi no cuenta no debería reírme, eso me quitaría puntos con el, pero que difícil es cuando el tipo que creías el mas rudo de la vida y la creación te confiesa que se escapó del kínder para ir al cine.

El día entero se fue mas rápido, de hecho ni siqueire me percaté de la hora, me la había pasado muy bien charlando con el padre de Al, intercambiando historias el uno del otro, creo que finalmente llegamos a un nivel de simpatía mas alto del que yo mismo esperaba. Gracias a Ethan esto es ahora posible.