Mi Dulce Sueño

CAPITULO 1 VIGILANCIA

Narra Jeff:

- Gracias.

- De nada – dijo aquella chica - bueno hasta luego, nos vemos.

Se despidió de mí con una cálida sonrisa en su rostro, esome provoco curiosidad pues nunca había visto una sonrisa tan dulce. Desde ese momento quise saber quién era ella, así que la seguí hasta ver a donde vivía. 

Ella no se daba cuenta de mi presencia pero a veces volteaba y yo tenía que parar y esconderme para que no me viera. Vi que su casa estaba totalmente aislada sin vecinos y con el bosque totalmente enfrente, así que no me sería tan difícil observarla.

Pero justo en ese momento recibí un mensaje de mi hermano diciéndome que volviera a casa, pensaba ignorarlo y quedarme un rato más pero al parecer me leyeron la mente y mi móvil comenzó a sonar.

- Bueno.

- Jeff ¿Dónde demonios estás? – Pregunto preocupado.

- Enfrente de una casa ¿por qué? – conteste sin importancia.

- Jeff dijiste que hoy no harías nada. – Suspiro.

- Tsk... ¿Y eso qué?

- Jeff me lo prometiste además estamos en una nueva ciudad, no la conoces del todo bien. – Replico.

- ¡Agh! Detesto que tengas razón, está bien iré para allá. – Detestaba que tuviese razón.

- Más te vale Jeff.

Apague el celular y me dirigí a mi casa, estaba unos metros más allá por el parque al igual que la casa de la chica, lo único que nos separaba era ese parque.

Cuando llegue a casa mi hermano me recibió un poco molesto, pero no le hice mucho caso, me subí directamente a mi habitación, me encerré y me puse a pensar en aquella chica. Desde que ocurrió aquél incidente ninguna mujer me dirige la mirada y mucho menos ahora, ella es la primera que lo ha hecho a excepción de mí madre, sus ojos cafés al parecer muestran algo de tristeza pero su sonrisa es simple y cálida, ha de ser extranjera ya que su color de ojos no es muy común, pero no importa ella es la primera mujer que me ha mirado en años.

<<Tal vez me engañe, puesto que no había mucha luz no pudo mirarme bien, pero quiero verla de nuevo y si me engaño, no hay porque preocuparse, ella simplemente podría morir y asunto arreglado. >> Pensé y así sin más me fui quedando dormido con la imagen de su cara en mi mente.

Narra Annia:

Después de haberle devuelto a ese chico su cartera, me dirigí a casa, pero a medida que iba avanzando comencé a tener esa sensación que no había tenido en años, sentía que alguien me vigilaba y me seguía, cautelosamente volteaba pero no había nada, a veces me parecía ver una sombra detrás de mí pero puede ser que todo sea mi imaginación.

Llegue a mi casa y entre, estaba muy exhausta, así que decidí darme una ducha, mañana comenzaba mi nueva vida, lejos de mi país. Estaría sola, sin nadie para ayudarme, pero sin importar la nostalgia que sentía mi espíritu de aventura fue más grande.

Después de ducharme me acosté en la cama, de mi habitación, puse algo de música, pero no pude dormir en toda la noche, esa sensación no se iba y no se apartaba de mi mente, así que tuve insomnio.

Fue hasta la madrugada que por fin pude pegar el ojo, pero con tan mala suerte que solo dormí cuatro horas, me levante en cuanto sonó el despertador, no podía llegar tarde a mi primer día de escuela. Me arregle lo más rápido que pude y desayune velozmente, salí a toda prisa ya que como estaba casi a las afueras de la ciudad tenía que irme más temprano.