➳Jihonnie💘 ◂JiCheol▸

Parte Única

I💘

¿Cómo se supone que iba a estar celoso? Celoso estás cuando la persona que amas está con alguien que no lo merece, o que crees que tú lo mereces más... No puedes sentirte celoso cuando es obvio que la otra persona es mucho mejor que tú en todo sentido. Eres egoísta si quieres que, quien amas, esté contigo y no con esa perfecta persona.

Por eso Jihoon siempre negaba estar celoso cuando veía a la parejita estrella de la escuela ir por los pasillos. Aun si Soonyoung y Seungkwan insistían en que estar celoso no era un delito. Él no deseaba que Seungcheol estuviera a su lado, prefería que se quedara con su perfecto novio, que parecía salido de un manga shõjo. Era mejor así.

Se desplomó en su banco. Lo peor de su situación era que la parejita estaba en el mismo salón que Soonyoung y él. Una tortura constante.

Hacía tiempo era capaz de ver a Seungcheol de lejos, se conformaba con saber que estaba bien y que Jeonghan era la mejor persona para estar a su lado. Seungcheol era el mejor deportista de la escuela, habiendo ganado decenas de medallas y trofeos en cualquier campeonato de Taekwondo. Mientras tanto, Jeonghan era la pequeña estrella, siempre actuaba en los musicales, tenía apariencia de ángel y una voz hermosa. Podría haber sido idol si hubiera querido. Eran perfectos.

Y luego estaba él. Un chico que parecía haberse quedado con catorce años, que vivía tapado por sweaters dos tallas más grandes y se escondía en sus cuadernos violetas.

Pero aun así, los últimos días habían sido una tortura. Seungcheol parecía recordar que en algún momento del kínder fueron amigos y que debían volver a serlo.

Jihoon era feliz siendo ignorado. ¿Por qué ahora ocurría esto?

-Hey, Jihoonnie, ¿todo bien?

Seungcheol, con su reciente pelo platinado, se sentó en su mesa y le quitó el cuaderno en el que estaba escribiendo. Agradecía que al menos no quisiera leerlo.

-¿Qué quieres, Seungcheol?

Se rehusaba a tratarlo bien o siquiera llamarlo hyung. No. Eso significaría tener una relación de amistad y él no estaba dispuesto a tal locura. Prefería quedarse en el anonimato, con su humor de mierda -como decía el novio de Seungkwan- y seguir escribiendo canciones sobre amores no correspondidos.

-Pensé que podríamos salir en la tarde.

-Piérdete por ahí, Choi -gruño. Luego le quitó su cuaderno y se fue detrás de Soonyoung, que acababa de salir del salón.

Vaya a saber uno por qué, pero a pesar de ser la cosa menos aterradora de toda la secundaria, Seungcheol siempre había soportado su mal humor. Siempre. Incluso ayer que Jihoon le tiro su libro de historia mundial en la cara.

(Claro que el que no lo soportó fue Jeonghan, que se levantó de su banco y le dio un bofetón que se oyó en todo el ala sur del colegio. Tal vez Seungcheol había querido disculparse por ello.)

Cuanto más violento se ponía, mas comprendía que estaba siendo un egoísta. Sentía celos, aun si contradecían su propia filosofía de no celos. Ya no quería seguir viendo como Jeonghan se acurrucaba en los brazos de Seungcheol o se daban la mano por debajo de la mesa durante la clase.

-¿Qué ocurre? -preguntó Soonyoung cuando llegaron a sus casilleros. Estaban allí porque sí, ninguno debía sacar libros extras.

-Nada.

-Mira Jihoon, yo no soy Seokmin, el imbécil admirador tuyo. A mí me tratas bien porque me tratas bien, ¿entendido? -se quejó Soonyoung para luego volver a sonreír-. ¿Qué ocurre?