Quisiera Algo Más Que Sólo Tu Amistad | Yaoi y Yuri Creepypasta|

Capítulo Doce.

¡Hoy hay yaoi confirmado!

[*]

Judge Angels.

Zero abre estrepitosamente la puerta, y yo, en el baño, logro asustarme por el portazo que dio de vuelta.

Esa niña... ¡Tuve que aguantarme de las cortinas y casi echo todo abajo!

-Maldita sea...-digo para mí misma. Al levantarme veo por mi cuerpo desnudo si por alguna parte tengo una herida, y difinitivamente, visualizo un raspón por mi rodilla.

Su risa más la de otro hombre captan mi atención y es que me sonrojo al asimilar de que tal vez, ella crea que no estoy aquí.

Cierro el grifo de la ducha, tratando de hacer el menor ruído posible. Tomo mi toalla, envolviéndola por encima de mí. Me acerco a la puerta, pero me detengo cuando escucho algunas y que otras palabras seguidas de risas, pero mis ojos se ponen en negro cuando empiezo a oír gemidos y susurros. Mis mejillas vuelven a prenderse.

Sólo por curiosidad, traté de verles por uno de los pequeños agujeros de la puerta, pero sólo veía a dos siluetas moviéndose frenéticamente entre sí. Mordí mi labio y bajé mi mirada a mi entrepierna, descubriéndola un poco de la toalla. Volví a mirar a las siluetas poniéndome algo tensa, juntando mis piernas y haciendo algo de presión allí.

Entrecerré mis ojos y volví a morder mi labio. Ahgs...Esto está mal. Dina, tú no...

Empecé a bajar mi mano lentamente por mi abdomen y, justamente al casi tocar mi clítoris, siento cómo alguien se me apega por atras mío y pone sus manos justo sobre las mías, haciendo más presión en mi entrepierna.

-Ya quería verte excitada yo. El plan fue todo un éxcito, mi pequeña ángel.

-¿Zero?- volteo mi rostro y mis labios se juntan con los de ella. Doy un salto y me aparto lo más rápido posible-. Se puede saber-...

-Shh...- me apega contra la pared y agarra de mis muñecas dejándolas arriba de mi cabeza-. Es tan fácil jugar con tu mente, ¿sabes?

¡Ey! ¿Ella no estaba atras mío?

-Agh...- desvío la mirada-. ¡Esto va contra la ley!

-¿Tu ley?- escucho un par de risitas y yo enfurezco cerrando mis manos en un puño.

-Ya vas a ver...

-¿Qué?-arquea una ceja y no hace más que mi rabia crezca-. ¿De qué tamaño tienes el hueco de la vag-.

-¡Cállate!- Siento mis mejillas prenderse al instante-. ¡Ya muévete, pervertida!- Intenté darle una patada en su entrepierna, pero de la nada, había desaparecido de mi vista en un fracción de segundo.

El movimiento fue tan brusco que me hizo caer. Ella obviamente aprovechó la situación, me volteó y de puso encima mío. La toalla que tenía puesta de había desamarrado del nudo que le había hecho. Estaba totalmente desnuda ante ella y ésta no hizo más que sonreír y apretar uno de mis cenos con fuerza.

-¡Ughs...!- Apreté los dientes y me estremecí.

Joder...

-Vaya. Las tienes grandes- esa sonrisa provocativa y sus ojos entrecerrados, fijados sólamente en mí, me hacían avergonzar...

No pude hacer nada mientras que ella ya se encontraba lamiendo y chupando mi pezón. Jadeé ante eso y volví a tratar de quitármela de encima.

-¡B-basta! No conseguirás nada si sigues chupando.

-¿Y qué hay de tus gemidos?-dejó mi pecho y yo suspiré-. No podrás contenerte por siempre, Angels.

-¿Eh?- de acerca más a mi rostro...¡Más a mis labios!