Entre besos y caricias tiernas, Janet se acerca a la sala hacerle compañía a mi amiga Sofía, mientras que Michael se levanta del suelo y me ayuda a levantarme a mí. Me miraba con amor y mucho cariño, me abrazaba y la sonrisa de su rostro, no se iba por ningún motivo. Yo tenía mi cabeza, apoyada sobre su hombro y él me abrazaba por la cintura, sentía el tacto de sus dedos, su temperatura era fría, seguro estaba algo nervioso, como lo estaba yo también. Entonces tomé una de sus manos y deposité un pequeño beso sobre sus nudillos. Él deposita un beso sobre mi cabeza, absorbiéndose completamente.
—Que bueno que regresaste —Susurró y entrelazo sus manos con las mías, era como un sueño, hecho realidad.
—Lo sé —Pensé dentro de mí, que era lo mejor que pude haber hecho.
—¿Y mis padres? —Me soltó del agarre y me miró con los ojos abiertos como dos platos grandes.
—Ya hablé con ellos, Michael —Posé una de mis manos sobre su rostro y lo acaricié— Por ellos, no hay ningún problema. Sólo falta Lisa.
—Yo me encargo de ella —Me abraza fuerte y yo me separo de él.
—No —Lo miro fijamente— Hay que pensar una estrategia, podemos hablar con tus padres para que nos ayuden con una buena cantidad de dinero, y así separar a Lisa de ti.
—Para serte franco —Me mira con ternura— No quiero llegar hasta ese extremo, ella tiene que aceptar que te amo a ti y no a ella.
—Bueno, tienes razón... —Dije y luego lo miré, me acerqué un poco y lo abracé una vez más por cintura, refugiándome en su cuerpo para protegerme.
Nos sentamos en el sofá, aún abrazados y de un momento a otro llegó Elizabeth. Muy emocionada, se acerca hacía a mí y me abraza, depositando un beso sobre mis mejillas, me dedica una sonrisa y se sienta en uno de los sofás que había individuales. Se escuchó un estruendo, todos giramos a ver que sucedía, era Karla quién se le había caído la bandeja de galletas y té que traía en manos. Esta blanca como un papel, parece que mi presencia la anonadado un poco. Me levanto disparatada y le ayudo a recoger, pero Michael interviene.
—No quiero que te lastimes, recogiendo eso.—Sugirió y me hizo levantar del suelo.
—No me lastimaré, Michael —Lo miro y también le jalo, para que intervenga— Es más, deberías ayudar tu también.
Elizabeth y Janet se sorprenden al ver como Michael, obedece las ordenes que yo le impongo, tanto así, que ambas también se ponen en cuclillas y ayudamos a Karla a limpiar y recoger todo el desastre. Cuando me quedo en la cocina, lavándome la manos, Karlota me dice.
—No pensé que tendrías las agallas de volver.
—Para que veas —Respondí indiferente— Michael sufrió mucho y no permitiré que nadie más le haga daño.
—¿Entonces pelearás contra Lisa?
—No. Haré todo justo. Ella tiene que aceptar que Michael no la quiere, eso es todo.
Mientras observaba a Michael corriendo por todo el jardín con algunos niños, quiénes visitaban Neverland. Me veía satisfecha, ya que sentía a Michael más tranquilo. Por otro lado, pensaba, que burlar a Lisa, no iba ser una tarea fácil. Michael más que todo estaba ilusionado y convencido de que Lisa iba a entender, porque a pesar de su indiferencia con ella, también tenía algo de compasión, así que ambos esperamos, a que ella llegara de donde estuviera para anunciar lo que estaba pasando finalmente.
~***~
Ya todos reunidos en la mesa para cenar, Michael y yo nos sentamos juntos. Nos acompaña Sofía, Elizabeth y Janet. Estamos degustando una deliciosa cena, está riquísima. Sólo esperamos que Lisa se hiciera presente, aunque ya era algo tarde.
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Casados a la fuerza © [TERMINADA] #Sakura2019
Romance"No podía verlo, me daba ira máxima, con sólo sentir su presencia". Lo que ella no caía en cuenta, es que del odio al amor, sólo hay un paso. María, la criada mas joven de la mansión Neverland, donde actualmente vive Michael Jackson, el famoso c...