one shot

264 4 0
                                    

- firmemente creo que no debería ir a la fiesta de Natal, y menos contigo Hilary.

- ¿por no no Johana? ¿que tiene de malo ir con tu mejor amiga?

- por que cada vez que vas a una fiesta tomas de mas y quiero llegar a casa sin nada roto.

- Joe ¡vamos no voy a tomar! Lo juro.

alzo su dedo meñique, dude un poco, para Hilar y el alcohol era su combustible, finalmente termine entrelazando nuestros pequeños dedos.

¿pero...que diablos usaría esta noche? ¿como debía ir? Natal organizaba muchas fiestas, todas con un diferente tema.

- el tema de esta noche son disfraces , tu iras vestida de Cenicienta, y yo de bailarina.

Sonrió, ha veces me sorprendía la ingenuidad que ella podía llegar a tener.

- ¿que tal si alguien va vestida hací?

-¡ hoy a la noche usare un disfraz de Cenicienta bastardas, no quiero que ninguna llegue igual, si ya lo tienen tiren lo !

Sus cuerdas bocales resistían ¿como era eso posible? ¿como todos con un simple grito de ella se callaban y obedecían? Tenia las cuerdas vocales fuertes, tanto que hasta a Tarzan les sangraría la orejas.

- tengo los disfraces en el auto.

- bien, vamos a la siguiente clase que termino el receso.

Hilary me tomo de la muñeca y nos quedamos quietas mientras todos entraban a sus respectivas aulas, mientras yo forcejeaba con Hilary.

-¿que haces?

- escapamos de la ultima clase.

- ¿acaso perdiste la cordura?

- no, corramos.

Corrimos hasta el estacionamiento y Hil arranco el auto.

- ¿por que diablos hiciste eso?

- solo quedan un par de horas para la fiesta, no tendré tiempo para maquillarme si nos quedábamos.

- no vuelvas a agarrarme la muñeca así.

Grite mientras me frotaba esta, me había hecho daño.

- lo siento.

Pasamos por mi casa, creí que me dejaría ahí pero no lo hizo, la paso de largo.

- Hil...

- iremos a mi casa Johana.

No era una pregunta.

- ¡vamos animate! Obvio no iba a dejar que te maquillaras sola, y menos dejar un precioso vestido como el que te prestare en tu casa con tus madrastra  y tus hermanastra Cenicienta.

Bromeo.

- jaja que chistosa.

- ellas te odian.

Río.

Por fin estábamos listas para irnos a la fiesta, yo esperaba a Hilary que no salia del baño. Yo la estaba esperando con un vestido rosa pastel, con detalles brillosos que decoraban toda la parte del corset y la parte de abajo se sentía tan suave como si fuera seda, mi cabello recogido con una pinza blanca agarrando dos mechones del costado, y zapatos cristalinos, si que Hilary pensó en todo, hasta los zapatos, de cristal, como los de Cenicienta.

- ya estoy. Mirate Johana, estas como la verdadera Cenicienta, Solange y Camila se querrán morir cuando te vea.

-¿estarán ahí? No voy...no voy.

me saque los zapatos, no iría.

- ¡si lo harás!

Me puso obligadamente. Los zapatos y me arrastro al auto.

Al fin habíamos llegado, treinta minutos de viaje, Natal vivía lejos, un minuto para las nueve.

- recuerda que...

- tienes que esta en tu casa a las doce o tu madrastra te castigara, lo se.

Apenas entramos la intención se enfoco en Hilar y, o eso quería pensar.

- te miran a ti Johana.

Susurro.

- ¿quieres bailar?

- claro...

El chico era lindo, morocho, con pelo que brillaba.

- me llamo Julian, Julian Serrano.

Me beso la mano, y sonrió.

- Cenicienta.

Sonreí.

No quería decirle quien era, y no lo sabría, aun que quisiera, tenia una mascara pata que mis hermanastras no me vean.

one shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora