☪ Swingers KangHae FanFic

Capítulo 8

Donghae miró la cama con mucho nerviosismo, Kangin permanecía de pie a su lado, simplemente esperando.

- Si te arrepentiste entonces podemos dejarlo así –

Donghae le miró, sentía miedo pero también había una espinilla de curiosidad y deseos de experimentar. Suspiró profundamente y volvió a mirarlo aunque moviéndose para quedar de frente.

- Esto no es más que sexo y placer ¿cierto? No hay sentimientos ni tampoco tengo por qué decirle o que le digas a Hyuk lo que haremos, ¿verdad? –

- Hae, bebé, esto es simple. Tenemos sexo, lo disfrutamos y ya, luego regresamos a casa como si nada. No hablamos de ello ni contamos chismes, ¿entiendes eso? –

Donghae le miró fijamente, no parecía muy convencido pero la mano de Kangin en su cintura le hizo reaccionar.

- Solo disfrutemos el momento, no haré nada que no te guste o me pidas. Solo gocemos del sexo –

Donghae estuvo a punto de hablar cuando Kangin atrapó sus labios, se tensó pero aquel movimiento suave poco a poco lo fue relajando pudiendo corresponder. El beso fue lento, tranquilo, gimió levemente cuando fue presionado contra el cuerpo más grande y el calor del propio aumentó.

Kangin llevó sus manos hacia arriba, tocando su espalda y luego las bajó hacia su trasero, apretando sus glúteos entre manos.

- Ahm –Gimió y como acto reflejo tiró el cuello hacia atrás, Kangin aprovechó ese acceso y besó.

Donghae sintió su cuerpo derretirse. Sabía perfectamente que estaba siendo tocado por otro hombre y eso lo calentó. Su polla se apretó contra sus pantalones y las movió hacia delante para que Kangin la notara.

Este sonrió complacido, no era del tipo que dijera cosas amorosas al oído o en algún momento, él era directo y en este momento quería sexo así que lo tendría.

Con facilidad, Kangin tomó a Donghae por la cintura y le hizo levantarse del suelo, Hae enrolló las piernas a la cintura del contrario y ahora él buscó más tacto de sus labios, sujetando el rostro de Kangin y besándolo de nuevo aunque más demandante.

Donghae metió la lengua a aquella boca encontrando la contraria, chupándola y mordiéndola.

- Fóllame, quiero que me folles –Ordenó.

- Será un placer –

No acordaron si lo harían de manera suave o ruda pero al parecer ambos pensaban lo mismo, Kangin se movió hasta acercarse a la cama donde dejó caer a Donghae, seguidamente colocándose encima, sacándole la ropa con rapidez.

Kangin era más centrado a lo que quería por lo que no era primordial para él observar a Donghae, en cambio este, observó a detalle el cuerpo de Kangin, sus músculos marcados, la espalda ancha, sus caderas masculinas y los vellos de sus piernas.

Pero donde deliró fue al ver esa polla, gruesa y larga, ¿cabría en él? Al diablo, aunque lo partiera, Hae la quería dentro.

Por el momento, Kangin solo buscaba eso, sexo, si Donghae lo aceptaba bien, en su siguiente encuentro intentaría algo más. Por ahora se limitó a besar cada parte de Donghae.

Mamó de sus pezones hasta dejarlos rojos e hinchados, masajeó su polla e hizo que se la coman sujetándole del cabello, marcando su propio ritmo, en todo momento dejando en claro quien mandaba.

- Cómetela toda –Ordenó, Hae obedeció engullendo todo ese eje hasta llegar a su garganta y luego tragando todo.

Kangin tenía mucho aguante por lo que aun al correrse su polla se mantuvo dura, volvió a besar a Hae y le dio una nalgada.

- ¡Ah! –El hormigueó en su piel era exquisito y su vientre se contrajo cuando Kangin habló.

- Te trataré como una perra –

Estalló internamente, ¡Dios! Quería escuchar eso de nuevo.

- ¿Qué me dijiste? –

- Que eres una perra –

Nunca le habían hablado de esa manera pero solo hizo que su lívido aumentara, tanto tiempo sin saber que le gustaba que le hablaran sucio, necesito más de ello y dejó sus palabras salir tan fácilmente.

- Si, soy tu perra Kang, fóllame que estoy en celo –

Kangin sonrió, justo como imaginaba, Donghae podía parecer tierno pero tenía lo suyo. Reclamó sus labios una vez más, estrujando su cuerpo y obligándole a girarse.

Se hundió en él hasta las bolas, con agarre fuerte y rápidamente, Donghae apretó las sabanas, demonios, era enorme y podía sentir su interior demasiado lleno, apretando sus intestinos y vejiga.

- ¡Maldita sea! –Gruñó.

- Tómalo todo –

- Dámelo todo –Gimió- Fóllame ya –

Kangin comenzó a embestirlo con fuerza, Donghae deliró, aquellas sensaciones eran nuevas y placenteras, ¿cómo había vivido todo este tiempo sin descubrirlas? Se apoyó en manos y apretó sus músculos anales.

- Joder –Kangin jadeó- Aprieta más bebé, vamos –

Donghae obedeció recibiendo un masaje a su polla y golpes frenéticos a su próstata. Gritó y gimió como nunca lo había hecho, dejando de pensar en Eunhyuk o quien sea, simplemente concentrándose en ese des moral encuentro.

Sintiéndose muerto y revivido al correrse y sentir la corrida de Kangin en su interior.

Si esto iba a ser así de ahora en adelante, entonces disfrutaría al máximo cada encuentro. Bendita la hora que había aceptado entrar al club Swinger.