La misma persona.

62 6 0
                                    

Me costó como media hora pensar una excusa para decirle a Michael que no iba a ir a la uni y que se quedara mi coche y otra media que se lo tragara. Era obvio que si le decía que había quedado no me dejaría faltar a clase, e incluso habría venido a dormir conmigo para asegurarse de ello, y mucho más si le decía que sólo quedaba con Liam para preguntarle por la canción, así que decidí decirle que no me encontraba nada bien y que al día siguiente no iría a clase con la excusa de que no quería estar mala para el día de su concurso. Tuve que repetirle varias veces que estaba bien y que no necesitaba que se quedara conmigo, y, tras insistir durante un rato renegó de su intento de quedarse a cuidarme. Es realmente adorable.

Ahora eran las ocho de la mañana, había quedado con Liam a las diez y mi alarma no tenía previsto sonar hasta las nueve, pero un nuevo sueño con Bradley y Liam que ya se había convertido en rutina me había despertado antes de lo previsto.

Me había acabado de vestir, y ahora estaba desayunando. Me había puesto un vestido bastante mono que me gustaba mucho color salmón claro, con la parte de atrás más larga que la de alante, pero me pareció demasiado arreglado para ver a Liam, o a cualquier amigo. No se por qué estaba nerviosa, y por un momento me pregunté si sentía algo por Liam, pero esquivé yo sola mi propia pregunta,no estaba dispuesta a dejarme sentir nada por ningún chico, y si así era no estaba dispuesta a reconocerlo ante mi misma, esquivaria mís sentimientos hasta que mi mente se hiciera a ello y así lo olvidaría. Era un buen plan, nunca había funcionado, pero era lo único que tenía por ahora. Cambié totalmente el look, cogí unos baqueros, una camiseta con la propia bandera de inglaterra y unas cuñas color marrón bien monas. Me hice una trenza a un lado y le añadí una pinza en forma de lazo. Eran las nueve y ya no tenía nada que hacer. Recibí un mensaje y lo miré.

Aún estás a tiempo de que vaya para allá, estoy en la puerta de la uni, pero no he entrado.

Este Michael era de lo más insistente, pero no hace otra cosa que preocuparse por los demás. Le quiero demasiado.

Estoy bien bobo, pasarlo bien anda.

Contesté.

Uy si, creo que te lo vas a pasar tú mejor que nosotrosy todo.

Respondió, y yo reí sola, pero no contesté.

Hice un poco de tiempo hasta que dieron las diez menos cuarto, entonces bajé del apartamento y me dirigí al parque donde corría con Nat, el lugar donde había quedado con Liam.

Esperé unos cuantos minutos hasta que apareció.

-Hola- le dije dándole dos besos, y él me respondió de la misma forma.

-Creo que es hora de que sepas ciertas cosas- aquello me dejó un tanto atolondrada, parecía un actor sobreactuando en una película, ¿qué se supone que debía saber?

-¿Sobre qué?- me atreví a preguntar.

-Sobre lo que se te ha olvidado.-No lo entiendo, ¿íbamos a hablar drl otro día en la discoteca?

Nos sentamos en el mismo banco del parque en el que habíamos estado sentados junto con Harry hace unos cuantos días y decidí hacerle mi pregunta.

-¿Por qué tengo la sensación de que tú sabes el título de esa canción?

-Es porque lo sé, y tu también lo sabes, sólo que no lo recuerdas.-Todo esto era muy raro, que me dijera las cosas claras por favor.

-¿Y por qué sueño contigo y con... con...- en realidad no quería hablarle de Bradley, no quería hablarle de un chico del que había estado enamorada sin nisiquiera conocer, y por suerte Liam me interrumpió.

Cambio radicalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora