Caí al fondo del precipicio y junto conmigo mi corazón, mi armadura se rompió al igual que mi corazón.
Atrapada en el fondo obscuro y tenebroso la espada con la cual evadía el sentimiento del amor estaba intacta, con fuerza que debí usar para respirar la tome y con ella me levante de un manera incapaz de recordar escale y la luz del sol vacía estaba pues la luna era lo único que quedaba y así mi corazón vacío estaba, emprendí mi camino hacia la obscuridad para enamorarme de luna que celestial estaba pues su luz era lo que iluminaba los corazones rotos los cuales caminaban con armaduras celestiales para proteger las duras adversidades de la vida que continua....
A.J
