Epístolas a mi Mariafé

Epístola 16 - LA INICIATIVA

Mi querida Mariafé, otra vez, perdón por haber dejado de escribirte hace buen tiempo. Sé además que estas misivas son de ayuda no solo para ti pues hay personas que la siguen, por lo tanto esto no solo me reanima sino me hacer ver que hay mayor responsabilidad en hacerlo.

Siempre te dije que tú no eres una niña como las demás, sino que debes de diferenciarte, ser extraordinaria y te he dado razones para ello no se trata de una obligación, solamente deja fluir tu peculiaridad.

Hoy te quiero plantear un valor no muy apreciado pero que finalmente te hace destacar de entre los demás para dejar de ser ordinaria, esta es la INICIATIVA.

Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio; La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor, Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento.
Proverbios 6:6-8

Más que un valor es una cualidad que espero la desarrolles tiene que ver con la misma palabra es decir es tener la capacidad de idear, proponer o iniciar un proyecto o solución de un problema que se haya detectado, sin embargo no es tan simple ya que está debe surgir en ti, sin que nadie nos lo diga o persuada para hacerlo.

Esto también fortalece nuestra autonomía y va forjando nuestra responsabilidad para tomar decisiones propias, asumiendo el riesgo al fracaso.

Emprender algo nuevo es tener la osadía de enfrentar el prejuicio al principio puede que no recibas el apoyo ni la credibilidad sin embargo si te propones algo esfuérzate al máximo y mantente perseverante pase lo que pase.

Podría comenzar aplicando esta cualidad a tu casa, a veces solemos esperar que mamá nos diga lo que tenemos que hacer y si no nos lo dice no lo hacemos. Te darás cuenta que una de las frases de mamá en sus reprimendas se relaciona con esta carencia e incluso cuando nos increpa el porqué de nuestra pasividad aseveramos muy frescos : "es que tú no nos dijiste que lo hagamos".

Estamos acostumbrados a hacer solo lo que nos mandaron y deberíamos cambiar nuestra forma de ver las cosas.

Por ejemplo si ves que tu sala no está limpia no esperarás a que tu mamá te diga que lo hagas, lo tienes que hacer porque necesita limpieza, ahí debe fluir tu iniciativa propia. De esa manera te involucras y eres de ayuda porque es el lugar donde tú vives, es parte de tu vida.

Ese es solo un ejemplo pequeño ya que podemos ilustrar está virtud de muchas maneras, incluso actualmente muchas empresas consideran este aspecto como fundamental en el mantenimiento y ascensión de cargos.

Donde quiera que vayas o estés, tienes que estar atenta a lo que falta hacer o solucionar sin esperar que alguien te lo diga.

Poco a poco esto será natural en ti y lo aplicarás en todos los ámbitos de tu vida ya sea en el estudio o trabajo.

Que Dios siga iluminando tu vida , te dé sabiduría para que fluyan kas ideas e iniciativas y sobre todo para que tomes decisiones correctas con autonomía. Recuerda una frase que siempre yo se los respetía cuando emprendíamos algo en el colegio: "Yo no quiero problemas, sino soluciones"

Bendiciones mi niña.

Tu papito que siempre te ama en el amor de Dios.