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Vos te pusiste tu mochila en tus hombros y suspiraste. Aliviada de que el día escolar había terminado, estresada porque tenías un montón de tarea que hacer de todas las clases que tuviste hoy.

Vos gruñiste mientras salías del colegio y caminabas hacia tu auto. Tu mochila probablemente pesaba más que vos en ese momento, y eso era terrible.

Ponía mucho peso en tus hombros. Físicamente y mentalmente.

El trayecto a casa fue silencioso, dejándote sola con tus estresados pensamientos. No podías perderte ningún trabajo a este punto, ya que apenas estás pasando las clases.

Vos suspiraste fuertemente cuando viste que tu novio, Josh, ya se encontraba en casa. El era genial y todo, y lo querías un montón, pero también a veces era un poco molesto cuando vos tratabas de hacer cosas.

Vos caminaste dentro de tu casa, preparada para las horas de estudio y tarea que tenias por delante. Apestaba saber que vos ibas a tener que estar en tu cuarto por unas buenas tres horas o más haciendo nada pero trabajos, trabajos, y más trabajos.

"¡Hey T/N! Bienvenida a casa." Josh dijo mientras vos entrabas, levantándose de donde él estaba sentado en el sofá para ir a abrazarte.

Vos lo abrazaste de vuelta, y te alejaste un segundo después.

"Hey Josh." vos dijiste con una sonrisa, y después te apuraste arriba hacia tu cuarto, para terminar con las odiosas horas de estudio.

Poco vos sabías, que Josh estaba parado en la punta de la escalera en el apartamento que ustedes compartían, ceñudo y confundido. Usualmente, vos le dabas un beso cuando llegabas a casa.

El decidió que vos estabas enojada con él y quizo esperar a que vos te calmaras antes de ir y tratar de hablar con vos, pidiendo disculpas por lo que el había hecho.

Mientras tanto, vos estabas arriba, aliviada de que ya casi estabas terminando con las primeras hojas que tenías que completar. Quizás esto iba a ir rápido.

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Finalmente. Después de dos horas vos habías terminado.

Ahora era tiempo de estudiar.

Vos alcanzaste tus libros cuando tu novio, Josh, entró a la habitación. El sonrió mientras estaba parado cerca de la puerta.

"Hey bebé." él dijo suavemente, como si estuviera nervioso. Vos odiabas verlo nervioso o triste y él se veía un poco de los dos en este momento.

Vos caminaste hacia él y apoyaste tus manos en su pecho.

"¿Qué pasa bebé?" vos preguntaste simpáticamente.

"¿Podes por favor perdonarme?" fue todo lo que él dijo en respuesta.

Vos ladeaste tu cabeza cuando él dijo eso y dijiste "¿Perdonarte por qué?"

Josh te miró confundido también en ese punto.

"Por hacer lo que sea que yo hice para hacer que estés enojada." él dijo suavemente, como antes.

Vos solamente te reíste levemente y besaste sus labios rosas, él te beso de vuelta inmediatamente y deslizó sus brazos alrededor de tu cintura.

Vos te alejaste y presionaste tu frente contra la de él.

"Bebé, no estoy enojada con vos. ¿Por qué habrías de pensar eso?" vos susurraste.

"Solo pensé que porque no me estabas hablando vos estabas enojada." él susurró de vuelta.

Vos lo besaste suavemente de nuevo y te alejaste del todo.

"Bebé, no dije mucho cuando entré a casa porque tenía que hacer un montón de tarea, vos sabes." vos le dijiste, riéndote levemente viendo lo lindo que era.

"Oh. Perdón." él respondió mientras se sonrojaba, avergonzado. Vos sólo besaste su sien y te reíste.

"¿Sabes qué, Josh? Puedo estudiar más tarde. Vamos a acurrucarnos, ¿sí?" los ojos de Josh se iluminaron al escuchar eso y asintió vigorosamente.

"¡Sí!"

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No sabía como terminarlo así que ahí esta :)

Gracias por su apoyo.

Que tengan un lindo día.

Besos,

Jazz.

Josh Dun ImaginesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora