Capítulo 1.- Regresando

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Siendo ya primero de Agosto, Emmanuel vagamente recuerda los pocos conocimientos adquiridos durante su curso escolar a lo largo del año.

—¿Seguro que quieres hacerlo?— explicó su padre con firmeza.

—Bastante seguro— reafirmó Emmanuel abriendo la puerta frontal del automóvil de su padre.

El no estaba seguro de lo que hacía, quería regresar, quería volver a sentirse cómodo. Pero el sabía que tenía que hacerlo, por más duro que fuera, el tenía que terminar.

—Te recogeré a las 3:00 p.m. a más tardar ¿De acuerdo?—
—Si papá, gracias—

Cerrando débilmente la puerta, el se dirigió a lo que parecía ser su aula.
Se sorprendió, al llegar, se encontró con la sonrisa de aquella que fue su mejor amiga. El la recordaba, puesto que estuvo enamorado de ella hace algunos años, su temor era que ella no lo recordara a el.

—Mar.. ¿Mariana?— Musitó Emmanuel con una frágil, pero grave voz.

En ese momento ella lo miró, lucia decaído, sin fuerzas, sin voluntad, pero ella sabía que el definitivamente era su mejor amigo.

—¡Emmanuel!— exclamó Mariana con fuerza, corriendo para abrazar a su mejor amigo.

En ese momento eran ellos solos, ella lo había extrañado, se notaba en las lágrimas que recorrían sus mejillas.

—Te extrañé, no sabes cuánto, idiota— Dijo ella con un hilo de voz apenas audible para los demás, pero que el logró captar.

—Yo también te extrañé—

No tardó en sonar el timbre indicando que las clases habían comenzado, ellos se separaron y caminaron conversando alegremente a su salón.

—¿Como fueron las vacaciones para ti?— preguntó él

—Bastante aburridas, trate de llamarte para quedar, pero no logré contactarte, ¿En donde te habías metido?—

Él no podía decirlo, aun era muy difícil y doloroso poder aceptar eso, aunque él había dicho haberlo superado, esto no era del todo cierto.

—Estuve lejos, ayudando a la familia en algunas cosas, estuve bastante desconectado — Mintió

—Más te vale aceptar mi invitación y salir juntos un día de estos—

—Lo haré con una condición —

—¿Y esa es?—

"Un beso tuyo" pensó él, pero analizó la posible reacción de ella y se abstuvo de decirlo.

—Iremos al cine y tu invitas las palomitas— Le mintió de nuevo

—Con tal de que salgas conmigo lo haré —

Después de esto se sentaron en sus respectivos pupitres y ella le giñó él ojo. Después de todo probablemente seguía sintiendo algo por ella.
Él día transcurrió bastante lento, entre pláticas de parte de los maestros explicando que tenían que volver a adaptarse al ritmo de estudio, y conversaciones entretenidas entre los dos.

—Cuentame, ¿como vas con Pamela?— Mariana le preguntó a Emmanuel

Pamela era su novia, él en realidad la quería, pero definitivamente no tanto como a Mariana.

—Bastante mal, quiero decir, la quiero y todo, pero no creo poder seguir—

—Ella te hizo sufrir, ¿no es así?

En ese momento él recordó lo que Pamela le había hecho.

*Flashback"

Estaban los dos en una fiesta, era cumpleaños de un amigo de él, Alan, y ellos estaban juntos

—Tengo que salir por algo urgentemente, regreso en dos minutos— dijo seguido de un beso

—Está bien, te espero—

2 minutos, "de seguro no lo encuentra".
15 minutos, "seguramente tuvo que ir al baño".
30 minutos, "ya está, tengo que buscarla"

Él salió y la buscó, en todos lados, al subir al segundo piso de la cada en donde se encontraban, vio algo que no debía ver.
Él no quería creerlo, él no podía creerlo, el la quería, y tuvo que hacer como si él no hubiera visto nada.

*Fin de Flashback*

—Tendré que dejarla, no podemos seguir así —

—Aún así sabes que te apoyo en cualquier desicion que tomes, ya sea la más sensata o incluso la más estúpida que hayas hecho—

—Gracias Mariana, en serio necesitaba el apoyo de alguien cercano —

Y así terminó su día en la escuela, era hora de la terapia.

—Hola Emmanuel, soy tu nueva psicóloga Daniela, pero puedes decirme Dani—

—Daniela está bien, gracias — Dijo él serio

Él quería que ese infierno acabara lo más pronto posible, él quería olvidar lo sucedido, sin embargo, así no lo iba a lograr.

—Vayamos al grano, ¿como me piensa ayudar?— Dijo él un poco molesto

—Empezaremos por preguntas básicas y usaremos un método que consiste no en el olvido, si no en la superación del problema, ¿Te parece bien?—

—Adelante—

—¿Miedos más profundos?—

—La posibilidad de ser reemplazado por alguien igual, o incluso mucho mejor que yo—

—¿Como te consideras?—

—Extrovertido, leal, noble, Alpha—

—¿Podrías contarme lo que pasó? —

—La persona a la que le tenía mayor aprecio dejó su cuerpo físico hace unas semanas—

—En resumen... — la interrumpió

—Exactamente, murió —

—¿Puedes hablarme un poco acerca de ella?—

—Ella era la persona más dulce de todas, era esa persona a la cual le podías pedir un consejo tras otro, ella fue mi madre bastante tiempo, y en verdad le tengo mucho afecto, me ha enseñado tantas cosas, y no se como pudo haber fallecido con tan buena salud. Hay veces en las que pienso que dios es demasiado injusto con nosotros— Dijo esto ultimo llorando

—¿Esa persona es? —

—Mi abuela—

Después de las demás preguntas, Daniela se despidió, llevó a Emmanuel a la salida y le dió un fuerte abrazo.

Al llegar a casa él sabía que esto iba a ser difícil, pero estaba convencido de que él podía superar la muerte de su amada abuela, solo quedaba esperar un poco y poner una cantidad impresionante de esfuerzo para aceptar de una vez por todas que este ya era su regreso.

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⏰ Última actualización: Feb 15, 2017 ⏰

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