Capítulo 26

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¡Viernes! ¡Viernes! ¡Por fin! Por fin el bendito viernes había llegado. El humor de Kuon, perdón, el humor de Ren había mejorado considerablemente. La semana había sido larga, no, más bien... ¡Interminable!

Ya estaban en un taxi para el aeropuerto de Seúl, solo eran dos horas y veinte minutos de vuelo, pero ya no podían esperar por aterrizar en su hogar, dulce hogar... No, no era el lugar, era por ser donde se encontraba ella.

"Kyoko..."

Él estaba demasiado feliz... Y tenía sus motivos, rememoraba cada palabra de ella, en esa llamada, la noche del Martes.

Al principio esa charla no fue muy agradable, ¿Por qué? Kyoko, lo hizo, le contó todo, absolutamente todo sobre la descabellada "travesura" del presidente. ¡Tenía que estar loco! ¡Meter a Fuwa a L.M.E.! A Kuon ya le enfermaba tener que respirar su mismo aire en el estudio de Demonds Heaven Le dejaba un amargo sabor en la boca saber que ella y él compartían el mismo ambiente, si aun cuando él estaba ahí para controlar la distancia entre ellos ya estaba irritado... ¡¿Cómo se supone que debería de estar cuando su "querido" jefe, a quien creyó alguna vez una especie de "aliado", mete a ese sujeto en la compañía?! ¡Y no! ¡No! ¡No solo eso! ¡¿Cómo se le ocurría hacer tal estratagema para que el oxigenado y Kyoko trabajen juntos?! ¡Y mientras él no estaba! ¡Y para colmo le prohibió a ella contárselo!

Kuon tenía ganas de tener de inmediato una "seria charla" con Lory, pero antes de meditarlo más escuchó un nervioso silencio, y lo sabía... ¡Lo sabía! La asustó con su oscuridad, otra vez lo hizo. Intentó relajarla, al mismo tiempo que él intentaba hacerlo,iintentaba controlarse... Después de todo, ella se estaba abriendo... ¡Se estaba abriendo!

«Kuon, sé que esto es muy fácil de decir y muy difícil de hacer pero... Confía... Confía en ella... ¡Mírate! Ni si quiera están saliendo y ya estás así solo por una aparición en televisión... Kuon, ¿Sabes cuantas veces he tenido que aguantar que tu madre trabaje con sus exparejas, pretendientes y amigos que quieren ser más que amigos? —mientras iba diciendo parecía que iba recordando pues su expresión se tensaba cada vez más— ¡Incluso hizo escenas de cama cuando apareció en una de las películas de James Bond! —le dio un golpe a la mesa con ambos puños— ¡Y el actor protagonista era su novio de la secundaria! —le dio otro golpe a la mesa, pero miró a su hijo que estaba inexpresivo, tal vez un poco sorprendido y asustado, por lo cuál suspiró y volvió a concentrarse y a relajarse para así seguir aconsejando a su Kuon— Pero... Pero, confío en sus decisiones, confío en sus principios, en su fortaleza, en lo cuanto que la conozco, confío en ella y en su amor... —Kuu miraba con anhelo al paisaje, seguro pensando en la mujer de su vida, su esposa, Kuon se imaginó lo maravilloso que sería que lograse tener con Kyoko la suerte de sus padres, entonces Kuu regresó a lo que iba— Ahora, sé que no puedes tener esa confianza porque no tienen nada y es que esa chica evade el amor, pero confía en lo que has logrado hasta ahora... —suspira— Es como una evaluación de lo que has ganado hasta ahora, tómalo como eso... Además, uno en el amor puede hacer de todo... Uno puede hacer todo lo posible, pero sin importar eso hay cosas que ya no dependen de lo que uno haga.... Lamento decírtelo, hijo, pero si es que con solo esa pequeña cercanía algo vuelve a nacer entre ellos, entonces eso ya no depende de ti... Kuon, no siempre tienes que ser tú el que lo dé todo, porque el amor es de dos, hijo, y aunque no esté enamorada de ti, con esto veremos si al menos te has ganado un espacio en su corazón el cual, por lo que me cuentas y por otras cosas, estoy seguro que es grande... Ahora solo haz lo que tengas que hacer, todo lo que puedas hacer para entrar a su corazón, y por lo demás no tienes que preocuparte, tan solo confía, Kuon. Ella te contará todo, es lo que creo que al menos hará, y si sucede... Es porque tengo razón. Y en realidad, si eso sucede, no te prometo que se esté enamorando de ti, pero sí que eres importante para ella, lo suficiente como para querer darte explicaciones y no quejarse cuando las pides... ¿Al menos por el momento eso es suficiente para ti, no?»

Skip Beat: Luces, cámara y... ¡Amor!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora