Capítulo 17. Una promesa.

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Cuando estabamos por llegar al apartamento, le dije:

--Creo que deberiamos planear sobre nuestra relación... ¿no crees? --él me miró confundido.

--Si quieres nos podemos casar.

-Nooo, no es eso tontin, sino que en nuestros tiempos libres podemos ser dos enamorados, pero cuando Sarah dependa de nosotros... lo mejor sería que cuando estemos con ella... nos comportemos como lo que somos, guardianes --bajé la mirada, pero él la levantó con sus dedos pulgar e índice.

--Jade, te entiendo perfectamente, también soy un guardián y te amo, prácticamente estamos rompiendo todas las reglas, pero también tienes razón --dijo mientras acunaba mi rostro entre sus manos--. Si debemos comportarnos como guardianes delante de Sarah, lo haremos, no quiero perderte... te amo y lo sabes.

Se inclinó besando dulcemente mis labios, tenía que decirle lo siguiente, así que me separé suavemente de Derek, logrando romper el beso, él puso cara de reproche.

--¿Qué es lo que va mal? --preguntó, mordí mi labio, inhalé aire y le tomé las manos mientras lo miraba a los ojos.

--Si se llegara el momento de escoger entre la vida de Sarah o la mía... júrame que escogerás la de Sarah y la salvarás a ella, pase lo que pase --él soltó mis manos y se giró dándome la espalda, me giré buscando su cara, sus ojos miraban a lo lejos, se le veía pensativo.

--Derek por favor...

Me interrumpió.

--¡Jade!... -su voz se quebró y me miró a los ojos, después simplemente negó con la cabeza.

--¡No hagas esto más difícil, Derek, por favor! --lloriqueé, después de lo que pensé que había sido una eternidad, él dijo:

--Espero que no llegue ese moment...

Le interrumpí.

--Llegará, y lo sabes, en cuanto ataquen los strigoi... ese momento probablemente llegará --su mirada se perdió nuevamente hacia la lejanía.

--B... bien... te lo prometo --titubeó, sus palabras destilaban dolor.

--No me lo prometas a mí, prométetelo a ti.

--Lo haré --susurró, su voz apenas audible.

Me abrazó fuertemente como si su vida dependiera de ello, para pasar el mal rato le dije;

--Hey, no desapareceré en cualquier instante como Harry Potter --sentí su leve sonrisita en mi cabello.

Al día siguiente...

Era domingo, muy de madrugada cuando Josua llamó a todos los guardianes a la sala.

--El tiempo ha empeorado, y saben lo que significa --dijo seriamente--. Según los informes que han monitoreado los sátelites, probablemente habrá caída o tormenta de nieve, por lo qué durará según los medios alrededor de cuatro días... sin sol.

Todos los guardianes que estaban en la sala se removierón incómodos y algunos aguantarón la respiración, ellos sabían lo que esto significaba: una gran ventaja para los strigoi.

--Así que, siendo aún de día, pero sin sol, los strigoi tomarán ventaja.

--Haremos guardia, incluso de día si es necesario --le dije a Josua.

--Y podemos colocar sensores de movimiento --propuso Derek.

--Son buenas ideas... sin embargo hay un problema con los sensores, cuando comience a caer nieve se pueden activar.

Princesa Dhampir. Razas De Sangre. Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora