Capitulo 11| Una casita

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Había esperado pacientemente algo así como media hora, esperándome escuchar algún sonido en la casa, harta de esperar se acercó a la puerta principal y giró el pomo, sorpresivamente, la puerta se abrió y María accedió a la vieja casa, la planta de abajo era tal y como había visto, se dirigió silenciosamente a la cocina, si había comida que no fuera en conservas, alguien más estaba en la casa, fue un alivio ver las alacenas vacías, pero a la vez inquietante, tendría que encontrar comida, y no pretendía ir a la ciudad todavía.
Subió las escaleras y miró a su alrededor, 4 habitaciones a cada lado de un largo pasillo, las cortinas estaban cerradas, por lo que la vista del pasillo era ,cuanto menos, dificultosa.
Fue revisando cada habitación, la que más cerca de ella estaba a la derecha era el servicio, en un estado bastante aceptable, justo enfrente una habitación vacía, con la marca de electrodomésticos en las paredes y el suelo, al lado de esta, la segunda puerta a la izquierda contenía una cama y un espejo de cuerpo entero en una esquina de la habitación así como una cómoda de madera,en la última habitación había otra cama, esta parecía mucho más nueva, había un gran armario que ocupaba un cuarto de la pared, así como un pequeño espejo encima de una mesa con su correspondiente silla, estaba decidido, se quedaría, y esta sería su habitación.

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