- ¡En guardia! – anuncia el inicio de la práctica de esgrima el maestro, su alta y delgada figura resalta entre la de su alumno y su ayudante de práctica - cuida tu defensa – indica el maestro - ataca con más fuerza, cuida tus pasos uno tras otro cuando retrocedas, así, bien, no seas tan formal, en una batalla real tendrás que usar todo tu cuerpo en el ataque – dio un pequeño golpe en el vientre de su alumno – que el enemigo no encuentre huecos en tu defensa – señala - bien ¡pero más rápido! Debes ser más veloz que tu oponente y leer sus movimientos antes de que pueda ejecutarlos. Recuerda: analiza, defiende y ¡ataca!
- ¡Si maestro! – responde su alumno.
- Bueno, es todo por hoy, bien hecho Tom.
- Gracias tío, me alegra que nos visites después de tanto tiempo ¿por qué no vienes más seguido?
- Estoy en un negocio – responde su tío.
- Ya veo, aun así, espero que nos visite más seguido.
- ¡Toffee! – irrumpe en la habitación el rey, padre de Tom – así que en verdad estabas aquí.
- Lamento molestarlo su alteza – responde este haciendo una reverencia en medio del salón, que es donde están él y Tom – y lamento que mi presencia sea tan indeseable que se le haya prohibido visitar hasta el palacio que una vez fue su hogar.
- Toffee, sabes que ese no es el problema, hermano – dice el rey dirigiéndose hasta él – pero también sabes que si estás aquí al menos podrías habernos avisado, así te hubiéramos podido ayudado a esconderte.
- Te lo agradezco, pero no te preocupes, que lo que menos me importa es que me encuentren.
- Pero a mi si – responde el rey, dándole un abrazo al llegar hasta él – hermano, no te arriesgues tanto, ni hagas nada que pueda dañarte otra vez.
Tom entendía y a la vez no, pues hace mucho ya había preguntado sobre la apariencia de su tío, que teniendo toda su familia un tercer ojo y dos cuernos además de la forma humana, ¿Por qué su tío en vez de eso tenía más semejanza a un lagarto? Sabía que algo le había sucedido a su tío, pero no sabía que, pues el rey le había negado tal información cuando trato de indagar, no le dijo que le diría algún día, se notaba que no era un tema que quisiera tocar, así que no volvió a preguntarle. Algún día encontraría la respuesta a aquello, eso quería.
- Te mostraré .... – se oyó una voz de repente, Tom no entendió, pero la voz seguía susurrándole – yo te mostrare y podrás ver – era la voz de una mujer – sígueme .... Te mostrare .... Veras la luz .... – entre susurro y susurro.
- ¿Quién está ahí? – volteo a todos lados, pero no vio a nadie alrededor, así que guiado por aquella misteriosa voz caminó entrando a pasillos por los secretos que nunca había sabido que estaban allí. Y en medio de la oscuridad de a pocos empezaba a divisar una esfera de luz que era quien emitía la voz y le estaba guiando. Hasta que por fin llegaron - Esta es la biblioteca, ¿Qué hacemos aquí?
- Las es ... as .... ardan ... el pas ... do ... lo que ... bo y l ... que ...era ...
- ¿Qué? No te entiendo
- Las estrellas ... - parecía perder su voz – el pasado.
- ¿El pasado?
- ... pasado ... - aquella palabra pareció traerle malos recuerdos, y colapsó. Un desgarrador grito devastó la biblioteca, una agonía que nadie más que Tom pudo escuchar.
- Para ... para ....... ¡¡¡PARA!!! – gritó Tom. Y sus cuernos junto a sus ojos se volvieron rojos ... como la luna de sangre.
- Rojo ...
- ¿Qué? – una mujer, una humana, cabello y rojo vestida de color vino. Su mirada perdida reflejaba inocencia y pureza a pesar de su anterior quejido, de hecho, solo daba una lamentable impresión. Su enmarañado cabello y viejas prendas eran evidencia de la mala calidad que tenía su vida. – oiga ... ¿se encuentra bien?
- ¿Eh? – pareció recobrar el conocimiento y en seguida puso su mirada sobre Tom – soy libre – susurró mientras pasaba su mano sobre su mejilla -.
- ¿Disculpa?
- Soy libre – esta vez se oyó y - ¡soy libre! – termino por gritar.
Tom dio un paso atrás con un gesto de "está loca", pero luego pensó - ¿de dónde ha salido?
- Tú – miró a Tom – tienes que ayudarme.
Esto quiere decir que pronto debo publicar algo nuevo e.e ... Espero que disfruten de lo que viene. TZE.