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Toco el timbre de casa de ____. Me quedo unos segundos mirando el piso, pero ella no tarda mucho en abrir la puerta. En cuanto me ve, sus ojos se llenan de preocupación.
-Pasa... Hace mucho frío afuera...- Me toma del brazo y hace que entre a su casa.
-Gracias...-
-¿Estás bien?-
-No, la verdad no...- Un sollozo sale de mi boca.
-Ven aquí Steven...- ____ me abraza con fuerza, y no hago más que acurrucar mi cabeza en su cuello y ponerme a llorar desconsoladamente. Ella hace soniditos con la boca para que me tranquilice y acaricia delicadamente mi cabello. Me lleva al sillón, nos sentamos juntos y con su mano quita algunas lágrimas de mi rostro.
-Odio que la gente me vea llorar...- Digo tallando mis ojos.
-No tiene nada de malo... Además, puedes confiar en mí...- Me sonríe.
-¿Qué te hace ser tan buena conmigo?-
-Ya te dije...-
-Ya lo sé pero... No entiendo...-
-Si entiendes Steven, sólo no confías en mí... Después de todo lo que te pasó es normal que tengas miedo en confiar en una desconocida.-
-No quiero volver a ver a los chicos.-
-¿Y qué vas a hacer?-
-Empaqué algo de ropa y mi cobija favorita... Con eso es suficiente para poder dormir en cualquier lado.-
-Puedes quedarte aquí el tiempo que quieras...-
-¿De verdad? Ya sabes, mis amigos dicen que soy un estorbo...-
-No lo serás para mí. Anda, ve al cuarto de invitados y piensa que esta es tu casa.- ____ me da un beso en la mejilla y me señala el cuarto de invitados. Voy a este, y una vez allí, cierro la puerta. Lo único que hay en el cuarto es una cama grande con cobijas azules. A un lado hay una ventana, y en una de las esquinas del cuarto hay un pequeño mueble que lo único que tiene es una fotografía de ____ con los que creo que son su familia. Dejo mi mochila a un lado y me acuesto en la cama. Mi vida es como un huracán en este momento. Necesito distraerme, o voy a acabar volviéndome loco. Después de unos minutos pensando, me levanto y voy a la habitación de ____. Toco la puerta, y unos segundos después me abre. ____ tiene puesta ya su pijama, y se ve muy tierna. Me hace una seña para que entre a la habitación, y los dos nos sentamos en su cama.
-Tengo una idea...- Digo mirándola.
-¿Cuál?-
-Tenemos que escaparnos. Sólo tú y yo, nos podemos ir muy muy lejos y hacer las cosas que siempre hemos querido. Podríamos ir a Disneylandia, o a SeaWorld y todos los días comer chocolates y helado.- ____ me sonríe, pero niega.
-No es una buena idea...-
-¿Qué?-
-Steven, tu sueño es ser baterista. Eso es lo que tienes que hacer.-
-Pero podría olvidarlo si nos escapamos...-
-Tienes que cumplir tu sueño, Steven.-
-Estoy harto de los chicos.-
-Vale... Tengo una mejor idea.-
-¿Cuál?-
-Pasa unos días aquí. Hasta que estés más tranquilo y hayas olvidado un poco las cosas. Cuando te sientas preparado, regresa a la casa y habla tranquilamente con ellos. Quizás puedas resolver las cosas.-
-¿Y Emma?- ____ suspira, y su expresión cambia. Como si hubiera herido sus sentimientos.
-¿Qué pasa con ella?- Pregunta suspirando.
-¿Qué se supone que debo hacer con ella?-
-Esa es tu decisión...-
-Pero ayúdame... Eres buena dando consejos...- Digo tomando sus manos. Sus mejillas se sonrojan un poco y una pequeña sonrisa se asoma en sus labios.
-Bueno... Si yo fuera tú haría todo lo posible por olvidarme de ella.-
-¿Tengo que hablar con ella?-
-No Steven, simplemente... Joder no lo sé. Simplemente ignórala, tienes que actuar como si nunca la hubieras conocido.-
-Va a ser difícil...-
-Si, pero a veces tienes que hacer sacrificios para ser feliz...-
-Gracias... Gracias, gracias, gracias.- Le doy un corto abrazo, y voy corriendo a mi nueva habitación. ____ tiene razón. Quizás estoy enamorado de Emma, pero tengo que aceptar que es la persona más hiriente que he conocido en la vida. Quizás estoy dolido con Duff, pero eso no quita el echo de que sea mi mejor amigo. El ha hecho muchas cosas por mi. Siempre me apoya, y antes solía escucharme. No sé porque las cosas han cambiado tanto con el últimamente. Puedo perdonar a todos, incluso a Emma, que es la que más daño me ha hecho. Pero me cuesta mucho perdonar a Axl. No es la primera vez que me hace algo así. Desde que nos conocimos se ha dedicado a joderme la vida, a herir mis sentimientos y a bajar mi autoestima. Quiero mucho a Axl. Lo considero uno de mis mejores amigos, pero simplemente no lo soporto.
Me cambio la ropa y me pongo prendas limpias. La verdad es que desde hace unos días huelo un poco mal, pero la ropa limpia lo disimula bastante bien. Me arreglo en cabello con las manos y una vez más, voy a la habitación de ____. Esta vez, no toco la puerta, simplemente entro, y me la encuentro viendo la televisión desde su cama.
-Necesito tu ayuda...- Digo sonriendo.
-¿Qué pasa?-
-Voy a ir a hablar ahora con los chicos. Pero necesito que vengas a mi lado.-
-¿Para qué?-
-Necesito que me aconsejes que tengo que hacer...-
-Pero es muy tarde Steve, mañana tengo que levantarme temprano.-
-Anda... Solo será por hoy...-
-Está bien, está bien...- ____ se pone unos zapatos y es todo. Los dos salimos juntos de la casa y caminamos en silencio hasta la casa de los chicos. Quizás sea el día donde mi destino va a decidir entre que sea el baterista más famoso de mi época, o un simple chico que se escapó de casa para ir con una amiga a Disneylandia...

One in a million. (Steven Adler) TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora