XVII

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–¿Cómo saliste del vórtice del tiempo?– Preguntó Crystal sin rodeos. No tenía ánimos de aplicar sutileza, además quería romper la tensión entre Silver y Pryce.

–¿A qué viene la pregunta? Creo haberles dicho que aprovecharan su juventud.– Pryce acariciaba a su fiel Swinub en su regazo, bastante relajado.

–¿Cómo saliste del vórtice del tiempo?– Silver insistió teniendo en mano una pokeball, lista para abrirse.

–Fue Celebi quién me sacó.– Respondió Pryce, quién sabe porqué quiso decir la verdad.

Un ruido parecido al de una explosión llamó la atención de los tres presentes. En las cámaras se pudo ver como los Pokedex Holders de Hoenn cayeron sobre unas cajas vacías. La causa era un Snorlax y un entrenador de ojos rojos que conocían bastante, pero a la vez, lo desconocían.

–Parece que su amiguito tomó otro camino.– Comentó Pryce divertido, admirando el desastre que causaba Red.

–Volveremos a pelear junto a Gold, ahora debemos ayudar a los otros.– Anunció Silver tras tomar una sabia decisión.

–Yo los espero.– Respondió el villano con una sonrisa que molestaba tan solo mirarla.

Sapphire y Ruby no lo estaban pasando muy bien como se había visto a través de la pantalla. No lograban vencer a Snorlax, y cada vez se sentían más atrapados.

–¡Ruru psico-corte!– Ordenó Ruby a su Gardevoir ya mega-evolucionada.

–¡Toro Patada Ígnea!– Exclamó Sapphire dejándose llevar por la ventaja de tipo para poder ganar.

–Sapphire, no lo lograremos solos.– Mencionó Ruby detrás de Ruru para no ser tocado por algún ataque.

–Llevémoslo arriba.– Respondió la chica señalando lo cerca que se encontraba la escalera para pedir ayuda.

–¡Espeon!– Pareciera que Red oyó el plan pues cambió de Pokémon con leves movimientos para que este si pudiera subir.

Paralelamente, la tensión entre Giovanni y los tres jóvenes de Kanto crecía cada vez más. Los reclutas al ver al líder del equipo Rocket retrocedieron con temor.

–¿Y bien?– Preguntó Green cansado de esperar por una simple respuesta.

–No lo sé.– Respondió Giovanni con una mirada tan neutra que causaba confusión en los espectadores.

–¿Qué hace aquí?– Preguntó Yellow para ver si confiar o más bien, desconfiar.

–Mi hijo está aquí, al igual que el canalla de Pryce.– Respondió Giovanni tranquilamente, a la vez regresaba al Pokémon.– Pero, vine a buscar respuestas.

–¿Respuestas sobre qué?– Preguntó Blue empleando un tono de voz amenazador y brusco.

–¿No les parece extraño que el ex-líder del Neo equipo Rocket esté aliado con el antiguo villano del Alto Mando?– Preguntó Giovanni dando a conocer sus dudas.– Después de todo, ambas organizaciones se contradicen.

–¿Eso qué importa?– Green solo sabía una cosa: debía luchar contra ambos para establecer la paz.

–Tal vez sea algo insignificante, pero yo vine por respuestas.– Indicó Giovanni para luego marcharse lentamente por el largo pasillo de la base.

Así, Giovanni los invitó a reflexionar. Caminaban metidos en sus pensamientos, pero no todos recaían sobre lo recientemente dicho por el líder de la malvada organización.

–Blue.– Yellow llamó la atención de la chica con algo de timidez.– ¿Por qué sigues tan molesta con Red?

–¿Tú tampoco lo sabes Green?– Blue sonreía mientras caminaba un poco más adelante que los otros dos.

–No.– Negó Green con simpleza. Entender a una mujer es un trabajo duro y no quería darse la molestia de intentarlo.

–Digamos que directamente, a mi no me afectaba tanto el hecho que Red no estuviese.– Blue inició su relato mientras caminaba tranquilamente.– Sé perfectamente cómo es ser abandonado por tus seres queridos.

–Blue...– Murmuró Yellow apenándose al pensar en todo lo que sufrió su amiga durante su infancia.

–Pero fueron ustedes los que me afectaron.– Añadió Blue volteando a verlos con melancolía.

–¿No-Nosotros?– Green sintió un dolor punzante en el corazón. Se sentía mal ser el responsable del daño de su chica favorita.

–Si Green.– Asintió Blue con una sonrisa sincera en su rostro.– Ustedes también cambiaron cuando Red se fue. Ya no los reconocía y bueno... me sentía sola.

–¡Cuidado!– Exclamó Sapphire corriendo hacia ellos a la vez que se agachaba para evitar un ataque.

Simultáneamente llegaron Silver y Crystal que por poco fueron recibidos por un psicorayo. Todas las miradas se dirigieron al responsable, al tipo que tenía una fría expresión en el rostro, sin sentimientos.

–No sabemos qué pasó, pero de la nada Lance se fue y Red-sempai empezó a atacarnos.– Explicó Ruby con la respiración agitada. Muchos ataques por parte de un fuerte Pokémon no era algo relajado.

–¿Qué tal si hacemos unos cambios en los grupos?– Preguntó Blue de forma alegre pero cínica.– ¿Chris, vienes conmigo?

–Será un placer.– Respondió la chica comprendiendo que ellas lucharían contra Red. Toda la venganza saldría a flote.

–¿Lograron encontrar a Pryce?– Preguntó Green al dúo de Johto antes de que se separaran.

–Si, pero solo dijo que Celebi lo ayudó a salir.– Respondió Silver con odio puro en sus palabras.

–Yo iré a buscar a Gold.– Indicó Ruby al haberse ya relacionado con el Pokémon guardián del bosque.

–Una cosa más, Silver.– Indicó Blue antes de ir al ataque.– Tu padre está aquí.

Silver abrió bien los ojos. Fue una gran sorpresa para él pero no quiso demostrarlo con palabras. Nuevamente empezaron a dividirse para terminar el gran enredo que tenían.

Sapphire fue con las dos chicas a terminar con Red, quién de forma extraña estaba aguardando a que finalizaran la conversación grupal.

Los dos originarios de Kanto que quedaban, es decir Green y Yellow decidieron por ir a buscar a Lance, pues de seguro él estaba detrás del extraño comportamiento del primer Pokédex Holder.

Ruby salía del lugar con dirección al Encinar. Por su mente se creaban algunas ideas de como sacar al chico que lo sacaba de quicio, pero a la vez fue un gran amigo ayudándole en el evento de Jirachi.

Por último, Silver estaba en el cruce de los pasillos desconcertado. ¿Qué tenía que hacer él? Todos tenían sus ideales en mente y los llevaban a cabo. Todos, menos el. Soltando un suspiro que demostraba la cruel realidad, empezó a caminar en búsqueda de su padre.

La transformación de Red.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora