Promesas y decisiones

"Para vivir... sólo el"

Pov Emma

Me encontraba en total silencio, mirando el techo, al cual ya me acostumbre, ¡Estoy harta! Me quiero ir a mi casa, quiero estar en mi cama, dormir 100 años y estar con León.
Estaba a punto de levantarme y dar una vuelta en el hospital, como siempre, esa es mi rutina diaria pero fui interrumpida por una muy conocida voz.

-¿Que pasa niña? -Dijo Lucía con una alegría indescriptible.

-Nada, estaba a punto de salir a pasear para distraerme, pero afortunadamente llegó mi payaso favorito.- Dije riendo, cuando su sonrisa se desvaneció y fruncio su ceño.

-¿Disculpa? ¿Desde cuando soy tu "payaso personal"? -Me dijo haciéndose la ofendida.

-Bien... veamos, ummm creo que fue la vez en que apostamos con Luke, ¿lo recuerdas? - Sonreí con autoeficiencia, sabía que lo recordaba exactamente.

-Eres una...

-Si, lo sé, se que soy una hermosa chica y además tu mejor amiga.- La interrumpí y le dí un beso en su mejilla.

-Lo que digas.- Rodó sus ojos y se separó de mí, camino hacia el ramo de flores que me dio León y volteó a verme muy raro.

-¿Enserio? Estoy cien por ciento segura de que esto pro viene de León.- Yo sólo asentí.

-No parece un ramo, parece como si alguien hubiera vomitado flores.- Dijo divertida.

-¡Oye! Son raras, si, lo acepto, pero con esto León demostró que si me conoce.-
Sonreí cómo tonta enamorada.

-¿Como? ¿Acaso te gustan los vómitos florales? -Dijo en tono gracioso.

-No, pero no tengo una flor favorita y al parecer León lo sabe, es por eso que me dio muchas y diferentes.- Aclare oliendo mi "vómito floral"... okey eso sonó raro.

-Bueno en eso sí tienes razón pero León sigue siendo un tonto.- Reímos.

-El no es un... bueno si, peor lo amo.-

-Hablando de León ¿ha venido a verte? -Me pregunto mientras nos entrábamos en mi cama.

-¿Hoy? Mmm no, ayer que vino con las flores en la tarde fue la última vez que lo vi.

-¿Y como esta tomando todo esto? -Dijo recorriendo el lugar con la mirada.
Esa pregunta me tomó por sorpresa. Hablo de que... yo, bueno, no es como si mi enfermedad fuera la mejor noticia del mundo pero... ¿Como lo esta llevando León? -No lo sé.- Balbusee apenas.- Yo, no lo sé.- ¡Woow! Soy la peor novia del mundo, ni siquiera le pregunté como se sentía.

-Bueno, entonces me supongo que la sesión de besos estuvo buena.- Dijo Luu con una sonrisa pícara que yo tanto odiaba.

-¡Luu! -A pesar de todo no pude evitar ponerme roja, porque en parte era verdad. Ella sólo estaba ahí riéndose de mí.

-Ay Em- soltó otra risa.            -Linda e inocente Em.

-Uy sí, la experta en.- dije yo levantando las manos.

-¡Hay Claro! -Dijo haciendo una pose diva.- ¡Ja! Claro, era mentira, Luu sólo había tenido como máximo 3 novios, y no es como si algo haya sido nada serio.

-¡Vamos experta! -Dije con sarcasmo.

-Ni siquiera sabes lo que es tener un corazón roto.

-¿Y tu si? -¡Auch! Se que Lucía no lo dijo con mala intención, pero me dolió. Mis ojos se llenaron de lágrimas.

-¡Wow! Em... jamás creí que lo de Israel aún te afectará.

-¿¡Que!? -Pregunté totalmente descolocada. -¡No Luu! -Dije riendo un poco.     -Por supuesto que no, yo no estaba pensando en el.- Mi cara era una gran expresión de disgusto, pero pronto se transformó en la de una loca enamorada.