Hana; hacia la libertad.

CAPITULO 11 ESTA MAS CERCA DE LO QUE CREES

Al día siguiente una chica de cabellos rubios y una amplia sonrisa irrumpió sin previo aviso en la oficina de Hana.

- Eres la chica que trae a mi hermanito de cabeza- dijo de manera directa la joven

Hana la miro desconcertada, ¿quién era? acaso otra ex novia de Vincent.

- Hola soy Anabel, la hermana de Vincent- le ofreció su mano y ella correspondió al saludo

- Un placer- musito feliz de saber que no se trataba de una ex novia

- Vamos a comer, yo invito- le dijo sin más.

Cielos esta joven era de armas tomar, directa

- Yo tengo trabajo.....

Pero Anabel era el tipo de personas sumamente persistente

- No acepto negativas, quiero conocerte y quizás lleguemos a ser amigas, ¿no te gustaría?

Ella asintió, le agradaba esa joven con su espontaneidad y alegría inusual, así que tomo su cartera y acepto la invitación.

Fueron al centro comercial donde comieron Rissotto en un restaurante italiano, luego Anabel insistió en que la acompañara para realizar unas compras demostrando ser sin duda una compradora compulsiva, compraba de todo: carteras, ropa, sombreros, bisutería y también le compro a ella un vestido que ella se negó a recibir por lo costoso del mismo.

- Recibe mi regalo-insistió-espero puedas usarlo en el cumpleaños de mi madre al que está invitada claro está.

- ¿Cuándo es?- pregunto sin desear comprometerse, pero sabía que no podría librarse de esta.

- En 2 semanas mi mama cumplirá 50 años y lo celebraremos en un Salón, Solo seremos unos 150 invitados, familia, amigos, socios de la empresa, y por supuesto tú mi futura cuñada

- Anabel- le reprocho- yo no....

Callo cuando la vendedora regreso al mostrado para devolverle la tarjeta de crédito a Anabel y entregarle sus compras

Al salir de la tienda le cedió la bolsa con el vestido que era su regalo y Hana término aceptando agradecida con la joven por este hermoso gesto.

Volvieron a las empresas Macallister pero antes de bajarse del auto de Anabel esta decidió darle un consejo muy particular:

- Hana, no sé qué sea que te impide aceptar a mi hermano, tu religión, tal vez un amor del pasado, el status social, lo que sea no puede ser impedimento para buscar la felicidad y el amor. La libertad se trata de hacer lo que tu corazón te indique.

Hana entro al edificio y se topó en recepción con Vincent quien de inmediato la abordo.

- ¿De compras con mi hermana?-indico detallando la bolsa.

- Si, es un regalo de tu hermana.

- Así que también te ganaste a mi hermanita.

Hana no quiso seguir la conversación y tras un "debo ir a la oficina" se escurrió al elevador dejando atrás a Vincent para que no percibiera como su corazón latía de manera desbocada.

En la soledad del elevador llevo su mano a su corazón y cerró los ojos tratando de controlar los latidos presurosos de su corazón.

Pero una sentencia dada el día de su boda vino a su mente para destruir toda posible felicidad que estuviera a puerta:

"Eres mía y eso nada, ni nadie lo va a poder cambiar"

Esa noche Hana meditaba sobre las palabras de Anabel y sabía que tenía razón, La libertad se trataba de hacer lo que nuestro corazón nos indica. "Donde está tu tesoro allí está tu corazón"