Capítulo uno

2K 74 7
                                    

Jenna
23 de octubre, 2018.

Mi cuerpo tiemblas mientras los veo, mis manos apretan fuertemente el volante y me reprocho una y otra vez haberle creído, maldito bastardo.

A mi mente vienen las advertencias de mi mamá y mis tías e incluso las de mi tío, pero no les creí, les dije que él iba a cambiar y ahora me arrepiento de haberlo dicho porque 3 horas después estoy viendo como ese maldito me es infiel después de nuestra reconciliación.

—Me las vas a pagar, Taylor —susurro para mí misma.

Cuando Taylor despega su boca de ella puedo verla claramente es alta, rubia y irradia seguridad por todos lados. Me siento insignificante al lado de ella. Un pito me obliga a alejar mi vista de la escena llevo mi vista al espejo retrovisor y puedo observar como de un Ferrari bajo una persona.

Genial, lo que me faltaba. Mi cuerpo se tensa cuando alguien golpea la ventana del piloto lentamente la bajo y como si fuera una película observo lentamente como un hombre se pone en mi campo de visión. Sus ojos me dejan sin habla, son los grises más claros que he visto pero me sorprender la frialdad qué hay en ellos. Su perfume llega a mis fosas nasales y tengo que tomar un respiro profundo.

—Señorita, le recomiendo que vuelva a tomar las clases de conducción —dice con tono frío.

—Lo siento, me distraje por un momento —digo frunciendo el ceño.

—Bueno ese momento fueron 20 minutos, por favor sería más amable de quitarse del camino —dice y se aleja de mi ventana para caminar a su auto.

Suelto el aire que no sabía que estaba conteniendo y pongo el marco el auto, apenas he avanzado un poco un el Ferrari pasa a mi lado a toda velocidad.

Suspiro viendo el auto del témpano de hielo que acabo de conocer de un momento a otro su rostro se me viene a la mente y recuerdo que lo he visto varias veces. Que idiota he sido él es uno de los mejores abogados de todo Londres, con tan solo 23 años está dirigiendo uno de los bufetes más importantes nacional como internacional.

════ ⋆★⋆ ════

—Te lo dije, te dije que ese idiota te lo iba a volver a hacer —sus manos agarran un vaso para estrellarlo en la pared—. Lo voy matar, Jenna.

—No vas a hacer absolutamente, eres mi hermano mayor no un asesino —mi cara se arruga—. Ya iré pensando cómo me las va a pagar.

El primer lugar al que me dirigí después de ver como el bastardo de mi prometido me era infiel 2 semanas después de pedir mi mano fue la casa de mi hermano Max. Max tiene 4 años más que yo, y es el mayor de 4 hermanos, después de él va Eva mi melliza, después yo y por último mi hermana Lizzie que con sus 11 años es la niña más hermosa del mundo.

—¿Tu conoces a Richard Di Blackson, cierto? —le preguntó sirviendo un poco de té.

—Claro, nuestras familias han sido cercanas incluso antes de que tú nacieras —me dice viendo su computadora—. Recuerdo que cuando eras un bebé tenías una fascinación por él.

Levantó mi mirada de la taza de té y observo a mi hermano fruncir el ceño, maldita sea no puede ser posible. No me acuerdo nada que tenga que ver con ese hombre.

—Está soltero, ¿no?

—Desde cuando tienes tanto interés por él —levantó su mirada para observarme y puedo ver que sabe a dónde voy—. Ni en tus sueños, Jenna.

—Solo quería saber si puedes hablar con él para ayudarme con un trabajo en su bufete —me encojo de hombros.

—Claro, si quieres vengarte de Taylor no lo vas a hacer así —levanta su dedo y me señala—. Tu eres mejor que eso.

—¿Está soltero o no? —suelto irritada.

—Hace poco terminó con su novia porque al parecer no puede tener su polla guardada en los pantalones —suspira—. Esa es la versión de la prensa.

—¿Y su versión? —digo con curiosidad.

—Su novia le fue infiel con uno de sus socios.

Vaya, parece que los dos estamos en el camino de que nos sean infieles, bueno Richard tenemos más en común de lo que pensaba. El teléfono de Max suena y me vuelve a ver.

—Parece que estás de suerte, Richard está llamando —dice antes de contestar.

—Max, te juro que esta inútil que contrataste para ser mi ayudante es una mierda —suelta con un gruñido.

Me congelo cuando escucho esa voz que no hasta hace menos 3 horas escuche por primera vez. Maldita sea.

—No me diste mucho tiempo, imbécil —suelta Max irritado.

—¡Estás despedida! ¡Largo de aquí! —suelta más gritos se escucha un llanto para después escuchar una puerta ser cerrada de golpe.

—Hermano, debería tratar mejor a tus ayudantes.

—Y tú deberías estar buscando a otra ayudante —dice bufando.

Mi hermano me vuelve a ver cuándo lo golpeo por debajo de la mena y junto mis manos haciendo un pequeño puchero.

—Creo que te acabo de encontrar a alguien —dice masajeando su cien.

—¿Quien? Y espero que no sean una de las tantas con las que has follado —suelta repulsivo.

Creo que a mi mejor amiga Sophie no le gustaría mucho escuchar eso.

—Claro que no, es mi hermana Jenna. Justo me estaba comentado que ocupa un trabajo y fuiste como un milagro —dice alegre pero su expresión no lo es.

—Así que la pequeña Jenna quiere trabajar, pensé que le iba bien siendo niña de mami y papi —suelta con una risa arrogante

—Richard, la última vez que la vistes tenía 7 años.

—Si, tenía 7 años imbécil —suelto irritada.

La línea se queda en silencio unos segundos hasta que una risa ronca se escucha.

—Mañana a las 8 de la mañana en mi despacho, pequeña Jones.

Cuelga antes de que le llegue a decir lo idiota que es. Lo de pequeña Jones era dirigido a mi antes de que mi hermana naciera ahora ese título le toca a ella. Ya verás que de pequeña no tengo nada.

════ ⋆★⋆ ════

Primer capítulo publicado!!!

Destinos Cruzados - [BORRADOR] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora