Ahí me encontraba yo, frente a frente a lo que parecía un Ángel, sin saber que hacer o que pensar. De repente se levantó y acercándose lentamente a mí pronunció unas palabras que no logré entender, supongo eran de otro idioma.
_ ¿Cómo sabes mi nombre? -dije extrañado.
_ No te preocupes, ya lo entenderás, sólo tienes que tener paciencia y vas a ver que todo se aclarará. Debes confiar en mí.
La puerta comenzó a cerrarse lentamente mientras ella acariciaba mi mejilla y avanzaba lentamente en círculo por a mi alrededor. Se me puso la piel de gallina, era una chica hermosa y muy amable.
_ ¿C... Cómo sabías que yo vendría? -dije tartamudeando y temblando.
_ Yo lo sé todo, hasta lo que piensas -dijo mirándome a los ojos.
A todo esto yo seguía en shock sin saber que hacer, seguía pensando en cómo este ser sabía tanto sin nunca antes haberme visto.
_ Deberías irte, tu padre despertará dentro de poco -dijo dirigiendo la mirada hacia la puerta, la cual se abría lentamente.
Miré la hora en mi reloj y era tardísimo, ya casi amanecía y yo no estaba en mi cama como de costumbre. Pero ¿cómo hacerlo sabiendo que abajo de mi casa habían ocultos muchos misterios por descubrir?
Subí corriendo las escaleras para llegar a tiempo y que mi padre no se diera cuenta de que había estado en su laboratorio. Al salir tan rápido no tuve cuidado en asegurarme de que la compuerta quede cerrada correctamente. Así es, ocurrió lo que se imaginan, la chica vio oportunidad y escapó.
Sólo dormí dos horas, y al despertar, a todo lo sucedido lo tenía presente como si fuese un sueño, confuso y distante.
Era como si nunca pasara, pero al mismo tiempo algo me decía que tenía que bajar a ver que había en esa habitación. Al bajar vi a padre frente a la puerta blanca con los ojos abiertos de par en par, mirando para todos lados y caminando en círculos.
_ ¡Esto está muy mal, muy mal, no sé cómo pudo pasar, no sé que es lo que sucedió! -dijo mientras le corria una gota de sudor por la frente.
_ ¿Qué sucede padre? -dije poniendo tono de interés.
Me hacía el desentendido, pero sabía que yo tenía que ver con lo sucedido, me acerqué a padre y poniendole la mano en el hombro le dije que sea lo que sea que pasara, se iva a solucionar.
No terminé de decirle esas palabras de apoyo y sentimos un ruido muy fuerte en el exterior de la casa, lo que hizo que padre y yo nos miraramos y salieramos corriendo a ver que rayos sucedía.
Al salir vimos mucho humo y un montón de escombros tirados por todo el suelo, y a lo lejos se veía una figura de ¿un Ángel? O algo por el estilo, se encontraba a unos 20 metros del suelo y sus cabellos flotaban con lentitud. Ahí estaba ella, frente a nosotros, destruyendo con los ojos el gran muro que había construido padre.
_ Han tomado una mala decisión, yo los guiaré por el camimo correcto, sólo siganme y veran todo lo que necesiten ver -dijo mientras extendía la mano y el muro que rodeaba la casa volaba a pedazos.
_ ¡No le hagan caso, no se dejen llevar por su encanto! -gritó padre frenandonos a Mey y a mí.
_ Ann, baja de Ahí, por favor te pido, no nos hagas daño -dijo mi madre acercándose lentamente a la chica.
Me quedé quieto unos segundos y pensé ¿Ann? ¿Porqué madre la llamaría así?.
Una vez Ann, la chica que parecía un Ángel, un ser superior o lo que se les ocurra, bajó y se acercó a madre todos nos quedamos atónitos e inquietos. Esta chica ya me estaba dando miedo, pero extrañamente eso me gustaba.
Curiosamente esta criatura no era mala, sólo que había leído mis pensamientos sobre el muro que había elevado padre y decidió darme una mano con eso, o eso creía.
Ya era hora de que padre nos contara todo lo que no sabíamos, teníamos que saber a que cosas nos enfrentabamos, debíamos estar preparados para todo.
_ ¡Padre! Ya es hora de que digas toda la verdad -dije mientras miraba los ojos de Ann.
Y esa fue la clave para empezar con todos los entrenamientos, los estudios, las investigaciones. Pero más que nada la preparación para la catástrofe que nos alcanzaría poco más adelante.
ESTÁS LEYENDO
"Experimento Letal"
Bilim KurguCorren los años 2150, la tierra es un lugar solitario y desierto, ya no se escuchan las risas de antes... ya no hay paz... ya no hay naturaleza... ni rastro de vida. Pero... ¿Cómo llegamos a esta situación? Descúbrelo de la mano de Matthew y Mey Joh...