Always together.

Capítulo 7

Narra Alex
Llevamos más de treinta minutos caminando. Ya estoy cansada, me duelen las piernas y la cabeza. Thomas está estresádo, creo que nos perdimos, prefiero no decirle nada para que no se estrese más, pero tengo mucha hambre así que creo que no podré más.

Me detuve y me senté en una banca que estaba cerca, él no lo notó y no me importó, me duelen demasiado las piernas, no las aguanto. Thomas se detuvo y me miró.

-¿Alex? ¿Qué haces ahí? -Dijo Thomas acercándose a mi y tendiéndome la mano para levantarme, la agarré y me ayudó a levantar.

-Thomas me duelen demasiado las piernas, ya no puedo más.

-Ven, arriba. -Me dijo, se volteó y se agachó para que yo me montara en su espalda.

-¿Es en serio?

-Si. -Dijo riendo.

Tomé impulso y me subí a su espalda.

-¿Ya te subiste? No pesas nada -Dijo riendo -Pesas menos que Mackenzie. -Volvió a reír.

Mackenzie es la hermanita menor de Thomas, pero es de otro padre, sus padres son divorciados y sólo pasa tiempo con su papá los fines de semana, o sea, vive con su madre y a su padre solo lo ve los fines de semana, ¿Ya? Creo que me extendí de más.

-¿Falta mucho? -Pregunté.

-Alex, por octava vez, no lo sé, estamos perdidos. No sé porqué te quejas si soy yo quien te lleva -Dijo irritado. -¿Por qué no haces algo productivo y llamas a Jack o a Becca?

-¿Será porque no tengo batería? -Dije obvia. -Creo que ese cerebro está para usarlo, no para tenerlo de adorno. Eres el ser más idiota de éste planeta, Thomas.

-¿Ah si? -Dijo bajándome y volteándose. -Pues este idiota hará una de sus idioteces y dejará a su mejor amiga varada en el medio de ésta plaza, y el idiota que ves aquí, se irá. -Dijo volteándose y comenzando a caminar con pasos decididos.

3... 2... 1...

-Aghhhh. -Dijo volviendo las manos puños, volteándose y caminando hacia mi. -Arriba, ahora -Dijo cuando estuvo frente a mi. -No puedo molestarme contigo, mocosa.

-Lo sé, idiota. -Dije mientras me subía de nuevo a su espalda.

Narra Thomas

En verdad Alex no pesa nada, más bien pesa menos que nada.

-Alex, recuerdas la vez que fuimos a la fiesta de April Smith... -Dije riendo -Que me lancé en ropa interior a la piscina y luego salí corriendo por toda la calle, solo por un reto -Le dije, pero no conseguí respuesta -¿Alex? -La traté de mirar pero solo le vi medio rostro y noté que se había dormido -Que raro de ti que te hayas dormido. -Dije riendo.

Decidí -por fin- probar ir hacia el otro lado tratando de buscar a Becca y a Jack.

Narra Becca

-Becca, ¡Tengo hambre! -Dijo Jack.

-¿Sabes, aveces me pregunto por qué todos me dicen a mi que tienen hambre? ¡Yo no soy un puesto de comida andante!

-Si lo se, pero te recuerdo que estamos en un país totalmente desconocido para mi y no conozco absolutamente nada, además tu comida es deliciosa, amo cuando cocinas. -Dijo haciendo, o mejor dicho, tratando de hacer un corazón con sus dedos.

-¿Okay...?

-Becca, ¿Por qué es tan lejos? -Dijo mi muy maduro amigo haciendo puchero.

-¿Por qué no te callas, Jack? -Dije ya harta.

-Porque no quiero, ¿Será? -Dijo revoleando los ojos. Yo imité su acto luego de él.

-Becca. -Escuché mi nombre a lo lejos.

Comencé a mirar a todos lados, pero no alcancé ver a nadie. ¿Cuándo se llenó éste lugar de tantas personas?

Después de un rato pude notar a Thomas con alguien en su espalda, esperen ¿Alex?

-¿Thomas?, ¿Qué haces con Alex en tu espald...

-A la niña le dolían las piernas entonces la tuve que cargar, estuve caminando como diez minutos con ella encima y a lo que la fui a ver se había quedado dormida en mi espalda. -Dijo y tomó un respiro ya que había dicho eso muy rápido.

-Wow, cálmate vaquero. -Le dije asombrada por la rapidez en la que dijo eso.

-Lo siento, es que llevo como una hora caminando, no los encontraba y además las personas me miraban raro.

-Pues no eres el único, amigo, aquí todas las personas nos miran como si estuviéramos locos, ¿Por qué, Becca? -Dijo Jack rascándose la nuca.

-No lo sé, Jack, ¿No será porque estamos hablando otro idioma totalmente diferente, y Thomas lleva a una Alex casi muerta en su espalda? No ¿verdad? Eso es totalmente normal.

Amo mi sarcasmo.

-Jaja, que graciosa, Becca. -Dijo con cara de pocos amigos.

Saqué mi móvil y busqué entre mis contactos el número de mamá.

-Hola, Becca. -Dijo apenas atendió la llamada.

-Mamá, llevamos como dos horas caminando y no encontramos nada, ¿Estás segura que nos diste bien la dirección? -Le dije mientras miraba a los lados para ver si podía encontrar algo.

-Al salir del edificio, ¿A dónde fuiste? -Pregunto calmada.

-Bueno, nos dividim...

-¿ESTÁS LOCA O QUÉ? -Dijo alterada, y por el grito que dio me separé el móvil del oído. -¿CÓMO SE TE OCURRE TAL COSA?

-Mamá, no fue mi idea -Dije en manera de defensa. -Fue de Jack.

Jack me miró con cara de trauma y comenzó a negar con la cabeza. Se que quería salir corriendo pero debido a que no conocía nada en este lugar no podía.

-Becca... -Respiró. -¿Podrías pasarme a Jack un momento?

Miré a Jack y le tendí el móvil.

-Quiere hablar contigo.

El respiró y me miró temeroso, pero al final agarró el móvil.

-Hola, Carmen, ¿Cómo está... No, no, no... Si, pero... Lo sé, pero Thomas... Está dormida... No, Thomas la lleva en su espalda... Si, es todo un caballero, ¿No? -Dijo volteando los ojos. -Carmen, Carmen, respira... Estamos todos juntos, eso ya pasó, ahora te paso a tu amada hija.

Dijo eso para finalizar y pasarme el móvil.

-Mamá, solo dime donde queda.

-Al salir del edificio a la derecha, bajas una cuadra, a la izquierda, bajas dos cuadras, a la derecha hay un cartel grande que dice "El rincón del sabor."

-Sabes que anteriormente me habías dado la dirección mala, ¿Verdad?

-Si, estaba distraída, ahora vayan a comer y vengan. -Dijo y colgó la llamada.

Guardé mi móvil y respire mirando el cielo.

-Bueno chicos, mi queridísima madre nos dio la dirección mal, así que andando.

Dicho eso fuimos al puesto de comida. Apenas comamos nos iremos estoy muy cansada, suerte la de Alex que ya se durmió y la llevan cargada.