Nos Volvemos a Encontrar |Jimin, Hoseok Y Tú|

Capitulo 30

*VIERNES* 2/2

Después de 1 hora, llegamos a la cabaña. Me sorprendió el que mi mamá haya querido rentar éste lugar para nosotros dos, pero sólo me quedaba aceptarlo.

Bajamos del auto y Hoseok metió las maletas, yo intentaba quitarle la mía, pero no me lo permitió, era un lindo detalle, aunque me gustaba valerme por mí misma.

Hoseok se metió a la cabaña y yo regresé al auto, me dirigí a la guantera y saqué los condones, los metí a una bolsita que cargaba, no iba a  dejarlos ahí y arriesgarme a que Hoseok los viera. Despues de guardarlos me metí a la cabaña.

-¿Con que aquí era dónde querías traerme?- Dijo mientras se sentaba en el sillón y lo observaba desde la puerta.

-Exacto, aquí estaremos un fin de semana únicamente los dos- Caminé hasta él y me senté en sus piernas.

-Te amo- Dijo mientras ponía una mano en mi nuca y me atraía a él.

-Felices 6 meses- Dije contra sus labios y lo besé.

Pasé mis manos por su cabello y jugaba con éste, mientras que las manos de el sólo se limitaba a agarrar y acariciar mi cintura.

Me acomodé poniendo de tal manera que dejé sus piernas entre las mías, mientras que la intensidad del beso iba en aumento. A pesar de tener medio año juntos, nunca habíamos llegado tan lejos, el era un poco más reservado para el aspecto sexual y eso me agradaba de él.

Hoy era la excepción estábamos solos y el calor en nuestros cuerpos iba en aumento. Comencé a besar y lamer toda la extensión de su cuello y podía sentir su corazón acelerarse al igual que el mío.

-Ah- Solté un gemido entre el hueco que se formaba en su hombro y cuello. Había apretado mis nalgas en ese momento y me encantó.

Corrí de nuevo a sus labios, los cuales son mi perdición, tan suaves y gruesos, que no pude evitar apresionar su labio inferior entre mis dientes y dar un pequeño tirón. En seguida él se levantó del sillón conmigo aún encima de él, tome con rapidez su cuello y enredé mis piernas a sus caderas y así evitar caerme.

Comenzó a repartir besos por mi cuello y mientras lo hacía, tomé su cabeza en mis manos haciendo que se acercara más a mí y a la vez mis manos jugaban con su cabello tan sedoso. La sensación era increíble.

No supe en que momento llegamos al cuarto, pero no es cómo que me interese, yo sólo estoy enfocada en una cosa y es el estar con Hoseok, MI Hoseok.

Me aventó con delicadeza en la cama y se puso encima mío, dejando sus manos a los costados de mi cara. Sus labios buscaron con desesperación los míos hasta que se encontraron.

Mientras nuestras lenguas se enredaban una a la otra, coloqué mis manos en su trasero y lo apreté más a mí hasta el punto de sentir su miembro presionando mi intimidad.

-Ah! Hoseok- Suspiré entre sus labios y él tiro de éste, haciéndome gemir otra vez sobre sus labios.

Le dí un pequeño empujon, haciendo que se separara de mí un poco y el mi miró consternado. Le dediqué una sonrisa de lado y me giré para quedar encima de él.

Besé su cuello, en el proceso succione un poco de su delicada piel y sentí cómo me apretaba el trasero a la vez que gruñó cerca de mi oído.