Amor Secreto [Pinecest] #1 (EN EDICIÓN)

09

Tan sólo unas horas y se irían, escaparían. Estaban listos, solo era cuestión de esperar.

Estaban en la sala, con sus padres. El castaño se levantó y fue hacia la cocina. Tomo el teléfono y marco a sus Tíos.

—Por favor, contesten...

La llamada entró, y se oía bastante viento.

—¿Tíos?—pregunto preocupado.
—Dipper, ahora no podemos atender, estamos en medio de una ventisca. Tu tío Ford esta algo ocupado anotando cosas, y yo estoy esperando a que acabe. Lo siento.

Y colgó, dejando al castaño con un pequeño remordimiento, con la esperanza en el suelo.

Cuando este salió de la cocina, noto que su hermana ya no estaba, y como sus padres estaban dormidos, decidió ir con ella.

Al entrar a su habitación, la vio en la cama sentada, mensajeando por su teléfono.

—¿Mabel?
—¿Si, Dip?—contesto sin dejar de mirar su teléfono.
—¿Ya estas lista? Recuerda que nos iremos a la 1 de la madrugada.
—Si, si, pero aún falta mucho.
—Mabel, son las 11.

La castaña miro algo confundida a su hermano.

—¿Enserio? Wow... El tiempo se me fue.
—¿Niños?

Ambos, al escuchar la voz de su madre, se asustaron y Dipper corrió a su habitación.

Pero a medio camino, se encontró con su madre.

—¿Dipper? ¿Que hacías en la habitación de tu hermana?
—Tratando de hacerla un poco feliz, es que esta decaída por un chico, y la verdad no me gusta verla así.
—No te creo, pero bien.
—¡Dipper, Dipper!—la castaña salió de su habitación y miró a ambos—Ammm... Hola mamá.
—Mabel, a tu habitación, ahora.
—P-Pero, quería enseñarle algo a Dip...
—¡No y ya!

Triste, la castaña volvió a su habitación. Mientras que su padre venía subiendo las escaleras.

—¿Pasa algo caramelito?
—Si, tus hijos estaban juntos, solos.

El castaño miro asustado a sus padres. Estos, le señalaron su habitación, dándole a entender que se fuera a esta.

—Esta bien...—con la mirada en el suelo, el castaño se fue a su habitación y cerró la puerta.

La castaña desde el otro lado de su puerta, pudo escuchar como la cerraban con llave.

—¿Que? ¡Mamá, papá! ¡Abran la puerta!—el castaño al escucharla corrió otra vez a su puerta.
—Mamá, no, ¡no nos encierres!—del otro lado de su puerta también se oyó como la cerraban con llave.
—Lo sentimos, pero es por su bien, de ustedes y nosotros.
—Su padre tiene razón, es por su bien.

Y ambos se retiraron, dejando a los gemelos cautiverios en su habitación.

Mabel le envió un mensaje a Dipper.

»¿Y ahora que? Yo no quiero vivir así, ¿que hacemos?

Bueno, tengo una idea, pero no se si quieras...«

»Tu di, yo por ti, TODO

Bien, pues podríamos salir por la ventana. Pero, para que sea menos sospechoso, yo puedo salir por la ventana y tu pedir a nuestros padres que necesitas ir al baño«

»Si, y podría decir que estoy en días rojos... ¡Esta bien Dip!

Bien, hazlo. Pero... ¿tu ropa?«

»La aventaré desde la ventana, ya luego tu la recoges. ¿Nos vemos en el parque?

Si, si. Nos vemos, te amo.«

»Y yo a ti, Dip

(...)

El plan estaba en marcha. El castaño ya estaba camino al parque, mientras que su hermana estaba por salir.

—Demonios, necesito que mi padre se duerma...

La castaña miraba su teléfono, se estaba desesperando. Así que saldría con mucho cuidado.

Al salir de su casa, corrió hacia el parque, sin mirar hacia atrás.

—¡Mabel! ¡Vuelve!

Al escuchar la voz de su padre, simplemente corrió mas rápido y estaba por llegar, pero tropezó y cayó.

Su gemelo la vió, corrió hacia ella, la cargo y se fue corriendo por sus maletas. Luego corrió sin sentido alguno.

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Espero que hayan disfrutado el penúltimo Capítulo, y he de decir que me gustaría ver mas comentarios, es bonito leerlos a ustedes.