Dos

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Daira:

Normalmente soy de las que toman lo primero que ven en el ropero, pero esta vez es distinto, desperté con ganas de verme bien o al menos eso creo, eso es algo raro ya que no suelo arreglarme para lucir bien para nadie.

Esta vez mi vestimenta será un pantalón entubado color negro, un suéter/blusa color vino, zapatos estilo vans color vino y una sudadera abierta con caída hasta las rodillas.

Decido planchar mi cabello y después recogerlo todo en una trenza, coloco algo de labial y un delineado discreto.
Antes de salir de la habitación tomo una mochila color gris que tiene un dibujo de una flor de loto hecha por una persona que hace ya un tiempo no veo, tal es el tiempo que ya ni me acuerdo de su nombre ni rostro y no creo que ahora sea capaz de reconocerla ya que tanto ella como yo hemos cambiado...
Apenas salgo de mi cuarto cierro con seguro la puerta.

Por lo regular los martes mis papas suelen irse desde las cinco de la mañana a su trabajo y cada que pasa eso el que tiene que llevarme a la escuela es mi hermano, pero no pretendía despertarlo porque se me haría tarde. Y no pretendo irme con mi hermana por que no la tolero.
Bajo a la cocina, tomo una botella con agua y la pongo dentro de la mochila, al igual que dos manzanas dentro de una bolsa para llevarlas.

Antes de dar un paso a la calle tomo mi celular y busco el camino hacia mi escuela (necesito conocer más por donde paso), una vez lo encuentro salgo de casa.
Me dice que el camino más fácil es en camión ya que me deja enfrente, pero decido tomar mi penny ya que no se me hace lejos o al menos eso quiero creer, aparte que así conozco más el lugar.

Voy avanzando conforme me dice Google Maps hasta que llego a dar con el lugar en el que me dejo Roberto y sus amigos ayer.
Me detengo para sacar un cigarro de mi mochila, apenas lo enciendo guardo el encendedor y empiezo a caminar guardando la penny en mi mochila.
Tengo los audífonos puestos con la música a todo volumen, a lo lejos logro ver a Roberto, solo sonrió mas no corro hacia él.
No se cómo ni por qué pero el volteo de un instante a otro y me vio caminando muy atrás de él.
Se detiene para esperarme y me sonríe, me ve con el cigarro en la mano y aun así no borra la sonrisa, al llegar ahí le ofrezco del cigarro, él lo acepta.
Ahora vamos caminando pero ya fumando, nos acercábamos a la escuela por lo tanto saque mi perfume de la mochila y me coloque un poco.
Llegamos a las canchas y ahí se encontraba un grupo de chicas que van en el salón, me ven con él y me barren con la pura mirada, Roberto se percata y solo se burla pero sigue caminando, imito sus movimientos y continúo mi camino.

Llegamos platicando al salón, de que esta vez no nos perdimos al llegar, reíamos y hasta empezamos a hablar de cosas sin sentido.

Al cruzar la puerta del salón no había nadie todavía, nos sentamos de manera en que Roberto quedo adelante mío, seguíamos platicando hasta que llego ese silencio incomodo entre los dos y todo por mí culpa.

Vi entrar a una chica que la verdad se me hacía familiar, pero no podía recordar si es que ya la conocía y si era así ya que había pasado algo de tiempo desde la última vez que la vi entonces.

Nos miró, sonrió y sentó a un lado de Roberto, por intuición pensé que Roberto la conocía pero el a decir por su mirada no la conocía.

El al notar que me encontraba pérdida en mis pensamientos tomo mi mano y eso hizo que reaccionara de inmediato.
Pasaron tres maestros a darnos clases, dos hora una maestra y una hora un maestro y la ultima hora otra maestra.
Apenas había empezado el receso y ya habían salido corriendo del salón.

Empiezo a guardar mis cosas y de pronto escucho la voz de Roberto, se encontraba hablando con la chica que recién había llegado el día de hoy.

Por lo que pude escuchar se llama Daira y que su hermana se encuentra estudiando tercer año ahí, me quede callada escuchando.
Nos quedaban como cinco minutos de receso y salí al pasillo con mi celular en mano, Roberto no salió tras de mí, el salió pero con Daira, me moleste un poco pero era su decisión.

Apenas veo se acerca un maestro entro al salón para tomar la clase, al acercarme veo que mi mochila está abierta, reviso de inmediato y puedo notar que tengo ahí todas mis cosas, imagino que fue Roberto quien la abrió por lo tanto no me preocupo y me acomodo en la banca.

El maestro empieza la clase y Roberto no vuelve, pido permiso para ir al baño, apenas salgo los veo al fondo del pasillo sentados platicando.
Sigo mi camino haciendo de cuenta que no los vi, salgo del baño y regreso al salón, esta vez decido no ver si están ahí aun, solo sigo mi camino.

Una vez adentro del salón empiezo a escribir en mi libreta.

Daira 7nn7:

No sé por qué pero desde que llegaste esta mañana al salón sabía que nada iría bien y si fue.
¿Qué ocurre contigo?
¿Porque eres así?
Apenas es tu primer día aquí y ya andas consiguiendo novio... ¡Wow! Te mueves rápido para eso mujer...
Sebes... Me molesta...
Me molesta tu presencia.

Me molesta que te le acerques a Roberto.

Me molesta que hayas aparecido esta mañana.
Esto aún que se bien que no lo leerás... Está dirigido a ti.
¿Por qué? Porque realmente no encuentro otra manera de expresar lo que está pasando y porque así es como logro expresar mis emociones.

Apenas dejo de escribir por fin presto atención a la clase y veo que el maestro está hablando sobre lo que es Biología y nos da una introducción al tema.

Trato de concentrar mi mente en la clase pero no puedo...
Apenas termina la clase y trato de distraerme un poco pero no puedo, salgo al pasillo con mi celular y audífonos, me quedo quieta y trato de relajarme, desde el edificio en donde estoy se ve todo... Bueno casi todo y gracias a eso veo que a lo lejos está alguien que se parece demasiado a mi hermana.
Trato de pensar que no es ella... La maestra llega y le pido permiso para ir al baño, apenas me deja salgo corriendo hacia donde estaba esa persona.
Puedo sentir la mirada de Roberto a lo lejos, no presto importancia y sigo adelante, estoy cerca pero mantengo distancia, la veo, es ella, es mi hermana.
¿Qué es lo que hacia ella aquí?

Tomo una foto de ella y regreso corriendo al salón, al subir me encuentro con Daira y Roberto, los paso de largo sin siquiera hablar, llego de nuevo al salón y solo tomo asiento, me quedo callada el resto de la clase y listo.

Escucho el timbre de salida y esta vez tomo mis cosas rápido y salgo corriendo, al salir de la escuela los veo riendo con sus demás amigos de Roberto.
Uno de ellos me ve y grita mi nombre, logro escucharlo pero sigo adelante haciendo de cuenta que los audífonos no me dejan escuchar.

Bajo dos cuadras y saco un cigarro, escucho como alguien grita mi nombre a lo lejos, bajo un poco la velocidad y volteo poco a poco y veo a Daniel, un amigo de Roberto.
Me sonríe y camina a mi lado, él también se encontraba fumando así que no me preocupaba, empezamos a hablar y pregunto si sabía algo de Daira... O si tenía algún problema con ella
Mi única respuesta fue no decir nada y mostrarle mi libreta, apenas él término de leer lo que está escrito en mi libreta me abrazo y dijo:

Daniel:

Yo no te pienso dejar sola ni mucho menos cambiarte, el hizo mal pero te quiero pedir que si a él le dejas de hablar... Espero que conmigo no lo hagas.

Solo sonreí y dije Gracias, Daniel me acompaño hasta casa y al llegar solo me despedí de él y entre, llegue a mi cuarto y me encerré con seguro, realmente no quería ver ni hablar con nadie.
Tome una ducha y al salir solo me cambie y me acosté en mi cama hasta quedar dormida.

De ahí en adelante ni siquiera desperté por la noche.
No supe ni cuantas horas dormí, todo lo que sé es que fue durante bastante tiempo.

SecundariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora