Sentí su respiración calmada detrás de mi oreja y como seguía jugando con unos de mis largos rulos que caía por mi espalda. La voz ronca de Bill Cipher era reconocible con tan solo escucharla una vez.-¿Necesitas algo?- dije volteándome y apartándome de el tratando de calmar mi respiración, no lo conocía pero era intimidante la manera en la que te miraba a los ojos.
-¿Yo? Nada... a menos que tú si quieras algo.- dijo acercándose a mi y sonriendo travieso.
-¿Qué? no.- dije negando con la cabeza rápidamente y retorciendo dos pasos. Bill cambio su cara a una seria y negó con la cabeza.
-Malpensada, se nota que aquí no se le puede ofrecer ayuda a nadie, pero como quieras.- paso por mi lado chocando mi hombre con el suyo bruscamente y en un segundo que se me hizo eterno agarro mi gluteo derecho y lo apretó con fuerza, me voltee a soltarle una bofetada, pero ya estaba demasiado lejos y solo podía escuchar su estruendosa pero ronca risa por todo el pasillo.
Esas ganas que te quedan cuando no te has podido defender o hacer algo en ese instante en el que te han jodido es la peor sensación de rabia en todo el universo y no era nada agradable sentirla en este momento.
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Me dolían los pies y las piernas de tanto bailar, desde chica me encantaban las fiestas. Me habían sacado a bailar varios chicos, hasta uno peli azul, pero hay alguien que no me quitaba la mirada intimidante desde que llegue y ese era Bill Cipher.
-Mabel deberías dejar de tomar después te volverás mierda y capaz y vomites aquí mismo.- dijo Kelly. La mire bajando mi vaso y me reí.
-Cállate Kelly.- Rió Pacifica.- Seguro estás celosa de que haya bailado con Will.- grito por el volumen de la música.
-Claro que no por dios.- murmuró Kelly.- Si te dieras cuenta las miradas que le está dando Bill.- dijo casi para si misma.
-Si ajá, bueno, yoo voy a marcar territorio de lo que si es mío.- sonrió Pacifica tirando su vaso rojo y dirigiéndose coquetamente a la silla alta en donde estaba sentado el rubio. Era obvio que Pacífica estaba pasada de tragos.
>Bill Cipher<
No le había quitado la mirada a la castaña en toda la fiesta, la iba a tener en mi cama antes del próximo sábado, era una promesa que me había hecho a mi mismo. Pongo mi vaso en la mesa del "bar" al ver que Pacífica se dirige a mi. Centro toda mi atención en ella, joder hay que admitirlo Pacífica esta para reventarla pero ella no era mi objetivo en estos momentos.
-Billyyy.- dice en una risita acomodándose entre mis piernas, estoy mucho más alto que ella debido a la silla y su cabeza llega a mi abdomen.
-Hey.- digo agarrando y tomando de mi vaso.
-Hay mucho calor aquí ¿no?- dice enrollando un mechón de su rubia melena en su dedo mientras me mira mordiéndose los labios. Sonrío de medio lado.
Me bajo de la silla y agarro su mano guiándola a un gran mueble de la sala. Le hago una seña para que se siente encima y lo hace, nuestra acción por así decirlo, no dura mucho, una chica pasa por nuestro lado y fórmula unas palabras con su boca las cuál logró leer "te arrepentirás". Dos segundos después la luces se encienden, y la misma chica que había pasado por mi lado se monta al pequeño bar de la habitación quedando más alta que los demás. Ahí es donde la logró reconocer, Ámbar.
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Propiedad Bill Cipher (Mabill)
Teen Fiction-Por qué? Por qué te molestas si tú lo dijiste, ¡No somos nada! -Es cierto. No somos nada, pero tú Mabel, eres propiedad Bill Cipher. Los personajes son de Alex Hirsch✅ Pero Todo lo que está escrito es producto de mi imaginación No se aceptan Copias...