♡ || Drabble || ♡

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¿Quién no tuvo mala suerte alguna vez?

Si no la tuvieron, seguramente es porque JongHyun se la llevó.

No se quejaba (no podía), eran cosas que normalmente le pasaban por distraído.

Como cuando dejó las llaves en su casa y no podía entrar, quedándose afuera esperando al cerrajero que por cierto le cobró la mitad del sueldo que ganaba por mes. O cuando se decidió a cocinar y puso el agua a hervir, se fue a contestar mensajes en su celular, y cuando se acordó el agua ya no estaba. Y la vez en que tenía que entregar un trabajo que le tomó tres días hacerlo pero su perrita tenía otros planes, utilizándolo como baño.

Todo en un mismo día.

Yep. Su mala suerte era algo muy notable, pero al menos seguía vivo y lo agradecía.

Ese día estaba apurado, con el tiempo jugándole en contra porque iba atrasado hacia un examen, cuya falta tendría que justificarse con un certificado médico que él no tenía ganas de ir a pedir. Iba ordenando sus hojas a último momento en su mochila, caminando rápido sin prestar atención en el camino, y además intentando leer un libro que también era parte del examen.

Fue tanto su apuro que no se dio cuenta de que había una persona parada en frente suyo, chocándose y provocando que sus cosas salieran desparramadas y su trasero golpeara el suelo.

JongHyun se quejó ante su mala suerte, pataleando y haciendo un mini berrinche propio de un nene de preescolar.

Escuchó una suave risa proveniente de la persona también afectada por su choque, sólo que esta seguía de pie, sonriéndole suave.

—Deja, te ayudo —se agachó el extraño para recoger las hojas, algunas se volaron por el viento frío que se colaba por los huesos de todos, obligándolos a usar abrigos.

JongHyun llegó a recoger su libro, cerrándolo y guardándolo en su mochila, largando un fuerte suspiro.

— ¿Estás bien? —preguntó levantándose y tendiéndole la mano.

Y JongHyun creyó que estaba frente a un ángel.

Su cabello negro ébano brilloso y un abrigo del mismo color. Sus ojos eran hermosos, ¡sin palabras! Hipnóticos, con esa mirada dulce que le dedicaba en ese momento. Tenía una leve sonrisa risueña en el rostro, junto con sus mejillas tomando algo de color repentinamente contrastando perfectamente con su rostro pálido.

Tal vez porque notó tu cara de idiota. —le dijo su cerebro.

—Oh... Uh... Si... Discúlpame, yo... No te había visto y... —dijo saliendo de su trance al fin, sacando una pequeña risa en el contrario.

—Descuida, estoy bien. ¿Tú lo estás? Ibas casi corriendo.

JongHyun se acordó de su examen, fijándose la hora rápidamente y jadeando infantil ante el ahora examen perdido.

—Acabo de perder mi examen —se quejó.

—Lo siento mucho —se disculpó inmediatamente, su mirada incluso había pasado a una afligida.

—Uhg, descuida. Iba a llegar tarde de todas formas —apretó sus labios en un adorable puchero, guardando sus hojas dentro de su mochila otra vez.

—Yo... Puedo invitarte un café. Para recompensarlo, si gustas —intentó remediarlo con aquel tono tímido, aunque no fuera para nada su culpa.

¿Quién se quedó dormido? JongHyun lo hizo.

—Vamos, yo invito —tomó su mano para arrastrarlo a un café, pero luego lo miró frunciendo el ceño — ¡Tienes las manos frías! ¡Con más razón vamos a tomar un café!

JongHyun miró un poco curioso su cabellera cuando el pelinegro comenzó a estirarlo hacia la cafetería más cercana, pero luego sonrió, negando con su cabeza suavemente por el tierno extraño.

Tal vez no sea tan malo tener mala suerte de vez en cuando.

No si te encuentras con un ángel que está dispuesto a comprarte un café.

Mala suerte【JongKey】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora