Capitulo 16 "Segunda Temporada"

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3 meses...

Este mes ha sido tranquilo, de milagro ya no vomito muy seguido y los mareos de apoco se van acabando. Eh ido al médico para saber como va el embarazo cada mes y sigo con "Riesgo de perder al bebé"

Aún no se que sexo es el bebé ya que no se deja ver y aún es pequeñito, el médico dijo que a los 4 o 5 meses podré saber.

Cada día me siento en la cama a cantarle una canción a la pequeña cosa que según yo va a ser Javiera. 

Hay veces en que me imagino un futuro con ella y Justin, pero veo que ya no se nada de él y trato de imaginarme un futuro sin él, siendo una madre soltera y luchadora como lo he sido hasta ahora... lo único que se de él es que ha estado viajando muchos con sus amigos por las fotos de Instagram y por lo que me cuenta Pattie.

Supongo que después de todo no estábamos destinados a estar juntos para siempre. 

Ahora estaba con Anto en el centro comercial pasando un día de amigas, costó convencer a Felipe, pero después de caritas de perritos lo logramos. 

Estábamos comprando ropa para ella y para mi ya que mis pechos han crecido notablemente y bueno las poleras/remeras de apoco me van quedando "pequeñas" 

Me compre ropa interior y ropa para el día nueva. Opte por comprarme poleras/remeas sueltas y más que nada calzas mientras que Anto se compraba tacos, jeans apretados, poleras apretadas etc... de cierto modo mi autoestima bajaba al no poder usar lo mismo que antes, pero debo de comprender que es porque estoy embarazada.

Anto quiso entrar a una tienda de bebés yo no quería no sé a la vez tenía miedo de que todo valla bien y luego todo se derrumbe con una noticia de "______(tn) has perdido al bebé" pero Anto insistió tanto que entré.

Mirábamos cunas, coches, ropitas, juguetes etc.. pero me dedique a mirar algo que me llamo la atención era cadena de oro que salía un pequeño bebé y llevaba escrito "Gracias por darme la vida" me enamore, pregunte cuanto costaba y lo compre, le pedí a Anto que me lo pusiera y me mire en un espejo que estaba allí, me encantaba al instante una sonrisa se formo en mi rostro. 

-Te queda hermoso - dijo Anto sonriendo.

-Lo se - dije tocándolo - ¿vamos a comer? tengo demasiada hambre.

-Claro vamos - dijo tomando mi mano y saliendo al patio de comidas.

Pedimos unas ensaladas con papas fritas y dos coca-cola.

-¿No has pensado en decirle a Justin? - dijo Anto tomando de su bebida.

-Se lo diré cuando vuelva a Canadá, después de todo es el padre ¿no? tiene derecho a saber lo quiera o no - dije comiendo de mi ensalada.

-¿Aún lo amas? - dijo Anto mirándome.

-Más que nada en este mundo - dije cabizbaja - pero creo que después de todo él ya me olvidó y tendré que aceptarlo.

-Te envidió - dijo Anto sonriendo.

-¿Por qué? - dije confundida.

-Eres fuerte amiga, no he conocido a nadie como tú yo me echaba a morir por tonteras y tú siempre te mantenías fuerte... envidio tu fortaleza - dijo sincera.

-Verás que la vida te enseña a afrontar las cosas - dije sonriente.

Luego de dos horas más en el centro comercial nos fuimos de vuelta a el departamento.

-¿Cómo están mis dos hermosas princesas? - dijo Felipe saludándonos.

-Bien - dijimos riendo.

Las sorpresas que te da la vida - Nuevas SorpresasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora