Fui un títere. Un simple peón en una jugada maestra. El peón, a quien no importa sacrificar si se trata de matar a la reina del equipo contrario - Domynic imaginó todo como si fuera un partido de ajedrez.
El joven vampiro tenía dos altrnativas: aliarse a la cazavampiros y traicionar a su mundo; o guardarse la reliquia (una vez que la encontrara con la ayuda de la muchacha) para extorsionar a los concejales para obtener su propio beneficio. La decisión fue casi instantánea: la segunda opción era mucho mejor.
- ¿vas a ayudarme? Digo a buscar la reliquia - insistió el muchacho con voz queda. La decepción e impotencia que rondaban por su cabeza hacia unos minutos, se habían esfumado tan rápido como habían llegado a su mente.
-si - aseguró Raven - no estoy segura de cómo hacerlo pero quizá podamos hallar algo en uno archivos de mi madre que nunca me atreví a abrir - extendió la mano - ven conmigo.
La joven condujo al vampiro hasta el sótano de la casa. Era un espacio muy pequeño, únicamente delimitado por cuatro paredes sin ningún tipo de ventilación.
La muchacha apartó una caja de cartón que se ubicaba en una de las esquina del diminuto cuarto y luego con ayuda de Domynic, la trasladaron hasta la sala de estar.La superficie de la caja presentaba una capa gruesa de polvo. Desde que Raven se mudó a esa casa 3 años atrás, la enterró en el sótano y nunca la abrió. Lo único que sabía era que el contenido consistía en una gran cantidad de papeles pertenecientes a sus padres biológicos. Lo que figuraba en esas hojas era un misterio tanto para Raven como para Domynic.
Ambos jóvenes comenzaron a sacar fajos de papeles antiguos y bastante gastados; y comenzaron a leerlos. Algunos eran poco interesantes hasta que Raven encontró algo que atrajo su atención inmediatamente. Estaba escrito en otro idioma que ella no había estudiado en ninguna escuela a la que había asistido en su adolescencia.
-mira esto - le extendió el archivo a Domynic quien lo analizó de lejos como quien ve oro en polvo frente a sus ojos - parece una clase de...
-profecía - se adelantó el joven vampiro quien comenzó a leerla en voz alta - desideratum ab omnibus, occulta mundi veneficas.
Los ojos de Domynic se agrandaron cada vez más mientras leía.
-es latín - dijo el muchacho pensativo - se traduce como: algo anhelado por todos, oculto en el mundo de las brujas...
Una profecía que revelaba la ubicación de la reliquia. O al menos eso era lo que ambos esperaban que fuera. En ese caso, la caja que buscaban estaba en el mundo de las sombras.
Siempre estuvo más cerca de lo que pensaban - dijo Domynic para sí - estaba en nuestro propio mundo.
La pista estaba en mis manos todo este tiempo. ¿por qué nunca revisé estos papeles antes? - consideró Raven para sus adentros - Ahora la única alternativa que me queda es sumergirme en ese aterrador mundo para salvar algo que mis padres aparentemente protegían...
Ambos se mantuvieron en silencio, sumidos en sus pensamientos unos instantes. Ya eran las 3:37 am. Entonces uno de los dos se decidió a hablar. Para variar, fue Raven quien tomó la iniciativa esta vez:
-tenemos que ir al mundo de las brujas lo más urgente que podamos.
-no es necesario que vengas. Puedo encontrarlo sólo - intenvino Domynic tam cortante como el filo de una daga
-no te estoy preguntando. Te estoy avisando. Iremos, los dos a buscar esa reliquia. Te guste o no, te uniste a mí. Ahora soporta las consecuencias de ello.
Raven tenía un caracter un poco testarudo cuando se lo proponía. Especilamente, cuando algo le inportaba. Y todo su interés estaba volcado, en ese momento, en proteger la caja cuyo contenido tenía la capacidad de destruir su propio mundo.
Domynic se dió por vencido. Estaba más que claro que la muchacha no iba a dar el brazo a torcer en su decisión.
De todos modos, una vez que recuperaran la reliquia, él sabría deshacerse de la cazavampiros de alguna manera.La única que podía enviarlos de vuelta al mundo de las sombras, era la señora Flaws. Asi que allí estaban de nuevo, en la puerta de la casa de la vidente esperando a que la mujer los invitara a pasar.
Cuando la mujer se asomó por la puerta entreabierta, Raven se apresuró a hablar.-disculpe la hora, señora Flaws pero necesitamos su ayuda. Es urgente. Sabemos que son las 4 am pero...
La muchacha dejó la frase inconclusa ya que la vidente los obligó a pasar dejandole las palabras atrapadas en su boca.
Una vez adentro. Los tres se sentaron alrededor de una mesa en la precaria cocina del hogar.
-necesitamos que nos lleve al mundo de las sombras - Domynic odiaba andarse con rodeos y este caso no era la excepción. Él se encargó de ir directo al grano.
- ¿puedo preguntar para qué? - el ceño de la mujer se frunció ante la confusión.
- es que necesitamos buscar una reliquia - Raven como si la vidente no la entendiera aunque ella sabía pperfectamente que la anciana entendería perfectamente a qué se refería. Domynic se agachó un momento para acomodarse nudo de sus zapatos y Raven aprovechó la ocasión para susurrarle algo a la vidente - tranquila, lo tengo controlado. Él no va a quedarse con la cajita.
La señora Flaws no tuvo otra opción más que confiar en las palabras de la joven. Tuvo que contener sus nervios y enfocarse en lo que debía hacer.
-por favor, tómense de las manos - les pidió la mujer mientras se ponía de pie y se acomodaba el camisón largo y gris que traía puesto. La anciana cerró los ojos para concentrarse y comenzó a mover sus labios al ritmo de un conjuro - mittit ad umbras, mittit ad umbras, mittit ad umbras...
De repente, Domynic pudo ver lo mismo que cuando lo habían trasladado al mundo diurno. Todo lo liviano que los rodeaba comenzó a levitar con si estuviesen colgando de un hilo. Raven, por el contrario, había cerrado los ojos. Prefería no ver lo que sucedía a su alrededor y concentrarse en lo que iba a hacer en aquel mundo desconocido.
Y en un abrir y cerrar de ojos, la cocina y toda la casa de la señora Flaws se desvaneció. En su lugar, un bosque se abrió paso frente a los ojos del vampiro. Era su hogar,su casa. Raven abrió los ojos lentamente y tuvo que adaptar sus ojos a la poca claridad de ese lugar. En el mundo de las sombras, la radiación solar era menor a la del mundo diurno.
Los dos jóvenes, que estaban sentados sobre una piedra, se levantaron al unísono y se miraron dubitativos. Era hora de emprender una busqueda que podía cambiar sus vidas para siempre. Aunque sólo uno de ellos iba a beneficiarse con la reliquia. Y aunque estaban aliados, internamente sabían que se había desatado una guerra entre ellos. Una nueva guerra por el poder.
La aventura ha comenzado - pensó Raven al apartar la mirada del muchacho - la guerra a comemzado. Y no puedo permitir que él, mi mitad perfecta, gane.
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Mitades Perfectas: Condena [COMPLETA]
VampirosPrimer libro de la bilogía Mitades Perfectas. Raven Anderson sueña con ser una diseñadora exitosa y tener una vida normal. Pero por sobre todo, sueña con encontrar a alguien con quien compartir su vida. Pero tras varios fracasos en su vida amorosa...