Survivors - Glenn Rhee y Lexie Lutz (Glexie)

|14| - Pinan

Después de correr como locas, nos detenemos por un poco de aire. Tuvimos que enfrentarnos con algunos errantes que había en el camino, por lo que estábamos sucias. No estamos gravemente heridas, solo algunos raspones según pasábamos por el bosque.

Hemos llegado a la autopista, pero ellos no parecen haber llegado aún. Los suministros que dejamos para Sofía, están en su lugar. Por lo que Amy los recoge, y los pone en una de nuestras mochilas. Esta atardeciendo, y no hay un lugar seguro en el que pernoctar. Así que decidimos entrar al auto y pasar ahí la noche.

Para cuando Amy despierta, el sol ha salido desde hace un buen rato. Llevo algún tiempo sentada en el portaequipaje del auto, esperando alguna señal de Glenn o cualquiera del grupo.

—Come algo —le entrego una lata de frutas que encontré en uno de los autos.

—Estamos solas, ¿cierto? —Me pregunta llevando un bocado de fruta a su boca.

—No lo estamos, Amy. En cualquier momento ellos vendrán por nosotras. Le dije que estaríamos aquí —respondo apegándome a la esperanza de que Glenn y Rick me busquen con la misma intensidad con la que acompañe a Rick en su búsqueda de Lori y Carl.

—¿Qué pasaría si él cree que estas en el auto que sigue, o en el de más atrás? No notarían que no estamos hasta que se detengan. Lo que conociendo a Rick sería en muchas horas.

—Sigamos el camino hacia Fort Benning si es lo que deseas —niego con la cabeza y bajo del portaequipaje del auto—. Camina, debemos avanzar hasta encontrar un auto que no esté bloqueado y que podamos utilizar.

Pongo mi mochila en mi espalda, y reviso que tenga mi cuchillo y la pistola. No tenemos muchas municiones, así que debemos utilizarlas correctamente. Amy ata su cabello en una coleta y me sigue un poco después. En momentos como este me encanta tener mi gorra. No tengo que arreglar mucho mi cabello, ni tengo que lucir bonita.

Encontrar un auto que funcione nos toma horas. Esta atardeciendo, el clima se está poniendo tormentoso. Debemos encontrar un lugar seguro en el que detenernos hasta que amanezca. Amy señala un cartel donde dice que en la próxima salida hay un motel, y decidimos ver que nos encontramos.

Las cerraduras de todas las habitaciones del primer piso están rotas. Las habitaciones han sido destrozadas. Con algo de suerte en el segundo piso encontramos una habitación no muy dañada. La cerradura está rota, pero la cama y lo demás está intacto.

Bloqueamos la puerta usando el armario, y una butaca. Nadie entrara sin que lo notemos. Voy al baño y por suerte tiene agua. Al principio salió un poco turbia, pero luego aclaro cuando se limpió la tubería.

—Creo que tienes algo fiebre, Amy. Perdimos todos los medicamentos. Seguramente están en alguno de los autos del grupo —suspiro.

Ha comenzado a llover fuertemente, y los relámpagos iluminan el cielo. Estamos alumbrándonos con una pequeña vela que encontramos en una de las gavetas del baño. Paso la noche poniéndole paños de agua fría a Amy. No es bueno que tenga fiebre, puede complicarse sino la trato a tiempo.

El clima ha comenzado a ser un poco frío, y no tenemos la vestimenta adecuada para la estación. Deberemos detenernos en alguna tienda para ver si con algo de suerte encontramos algo que nos permita pasar el otoño, y el invierno.

—Me siento bien, Lexie —aunque la fiebre ha desaparecido. Aun se ve un poco desmejorada.

—Deberíamos quedarnos un poco más. No luces muy bien —respondo intentando que se quede en la cama.

—Tenemos que encontrar al grupo —susurra.

Se pone de pie y carga su mochila. Se parece tanto a Andrea. Tiene su carácter indomable y una fuerza de voluntad que nadie puede derrumbar.