Worst Kind Of Love

Capítulo 37: Fixing Holes

De manera renuente aceptó salir a comer. Bajamos el ascensor y estaba nervioso, pero aunque solo fuera para ayudarla, me estaba dando una oportunidad. Quizá ella se podía ablandar un poco.

-¿Que quieres comer?-

-Pensé que tenías claro a donde...-

-espera... Tranquila. Yo tengo claro a donde vamos a ir, pero me refiero a si tienes antojo de algo en particular. A donde vamos habrá para elegir. -

-Lo siento es que... No estoy acostumbrada a semejantes muestras de afecto.-

-Lo sé, pero al menos... Mientras requieras de mi ayuda, acostúmbrate a ello ¿Quieres?-

-Lo voy a intenta-

-con eso me basta-

Dije y cuando el ascensor se abrió en la planta baja, tome su mano y se tensó pero no opuso resistencia y salimos a mi auto. Abrí la puerta y le ayude a subir y enseguida cerré.

Conduje...

-Shane... Me siento mal por todo esto. No mereces que yo...-

-Hey... No tienes que hacerlo. Jay... Yo... Sabes que te quiero y por ti haría lo que fuera-

-eso es muy injusto-

-¿Para quién? Yo acepte ayudarte ¿Lo olvidas?-

-No sé cómo ser... Pero voy a intentar retribuirte todo lo que haces e hiciste por mí-

-Que me permitas estar a tu lado es el mejor pago-

-Ojala no tuviera que ser así. En otra etapa de mi vida, quizá me habrías enamorado-

-ojala pudiera hacerlo en esta etapa de tu vida- dije tomando su mano entrelazando mis dedos. Sonrió levemente y sin soltar su mano seguí conduciendo. Era un sueño hecho realidad y me puse como meta que se fijara en mí. Solo eso. No esperaba que ella se enamorara de un tipo como yo, ella era bonita y de una familia opulenta, yo a su lado prácticamente era una mosca. O sea... Nada.

-risotto...-

-suena delicioso. Italiana entonces...-

-¿Eres más de sushi?- Pregunto y luego rio.

-Mm no de hecho...-

-no te gusta el sushi, fue una broma-

-no sabía que supieras eso-

-Escucho en las juntas-

-yo también lo hago-

-sé que me conocen bien-

-Sé que no eres una vegetariana declarada, pero al menos evitas las carnes. Evitas lo más posible el café, sin embargo tomas té. Sin crema, y si lo necesita sustituyes por leche o de arroz o de almendra, pues eres intolerante a la lactosa. Además de que tienes OCD.-

-¿Cómo supiste de mi OCD? Eso nadie lo sabe, ni mis hermanas lo saben-

-solo hay que observarte cuando estas estresada de más... Pero con todo y tu OCD... Así me gustas-

Desviaba la mirada cada vez que le hacía un cumplido. Saco su móvil.

-Es Skyler otra vez- dijo y solté su mano.

-responde.-

-No, seguramente querrá que le haga la tarea a Georgiana y yo...-

-No eres mala, nunca creas eso aunque te lo digan, eres más amable de lo que tú misma piensas-

-No es eso, simplemente... Shane, yo no soy la persona que crees conocer.-

-Se supone que nos estamos conociendo, pero lo poco que conozco, puedo darme cuenta de que estás muy lastimada por tu familia, pero a pesar de todo, son tu familia.-

La vi agachar la cabeza y me di cuenta de que estábamos fuera del restaurante,

-llegamos.-

-¿Cacio e Pepe?-

-¿No te gusta? Podemos ir a otro lado.-

-Aquí está bien.- bajé y corrí a abrir su puerta, aunque fue extraño que no saliera antes de yo llegar a ella.

-¿Estás bien?-

-Si.- levanté su rostro y no era el de siempre.

-Jay... discúlpame, no quise entrometerme en tu vida.-

-No, parece ser que tute diste cuenta de algo que ni mi propia familia notó.-

-¿Qué?-

-Eso precisamente, el daño que me han hecho.-

-Necesitas perdonarles para que puedas tener la vida que desees.-

-Tengo la vida que quiero y que merezco.-

-De eso no hay duda, pero te falta llenar o mejor dicho, cerrar ese vacío con tu familia para que por fin puedas disfrutar de esta vida que tienes.- estiré la mano y bajó. Caminamos y esperamos para entrar.-

-¿tienen reservación?-

-No.-

-Ehm... ojalá puedan esperar un par de minutos para ubicarles una mesa.-

-Desde luego... ¿no te importa?-

-No...-

-Jay...-

Sin nada más, me abrazó y no se sentía ni bien ni mal, al contrario, se sentía con vacío y necesidad.

-Tienes razón, pera cada vez que intento hacer algo o disculpar lo que hacen, siempre hay algo que me hace darme cuenta que voy por el camino equivocado, estoy harta de hacer los deberes de Gigi, de cubrir la espalda de Lisa y de que Skyler me pida favores y me chantajee con ello.-

-Pero al final te hacen sentir mal.-

-Sí. No sé cómo, pero lo hacen, lo logran...-

-¿Cómo te ayudaban... ellos?- dije haciendo referencia a sus parejas anteriores.

-Ja, ¿es burla?-

-No, quiero saber cómo ayudarte.-

-Nunca me ayudaron a ello, eres la primera persona que se acerca y me dice esto.-

-Bueno, pues aunque no cambie tu perspectiva sobre las relaciones amorosas, quiero ayudarte a ver las cosas de otra manera ¿quieres?-

-Sí... gracias.-

-No tienes que agradecerme, te quiero y...-

-Incluso así... gracias.-

Sabía que estaba jugando con fuego, que estaba en el borde, pero sin duda, el tiempo que durase, sería el mejor vivido.

-Sr... Srita, pasen.-

Le tomé la mano y caminamos a la mesa.

-Queremos ordenar.-

-Desde luego...-

-¿Que deseas ordenar?-

-Ahm...una lasagna vegetariana.-

-Yo quiero un risotto negro.-

-Por supuesto, ¿de beber?-

-Chablis blanco enfriado a -10 grados por 10 minutos. ¿Está bien eso cariño?-

Asintió un poco tímida, ella no era así.

-¿algún aperitivo en especial?-

-Elije...- dije y levantó la mirada.

-humus.-

Sonreí, y asentí entregando mi carta, verla indefensa me dejaba molesto.

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