Casados a la fuerza © [TERMINADA] #Sakura2019

Capítulo 37.

Después de haberme quedado un rato largo admirando mi anillo y más que todo el hombre que estaba acompañando esa noche tan especial, poco a poco degustamos todas las fresas con chocolate y porque no, también el pastel que estaba riquísimo. Michael hizo a un lado la bandeja, tomó dos copas y sirvió un poco de vino tinto en ambas, luego me ofreció una copa y yo amablemente la tomé. Era un momento realmente cálido, romántico y especial. En ese momento estaba extasiada y también nerviosa, pero tenía que dejar que todo fluyera.

Llevé mi copa a la boca, le di un sorbo y me sorprendo por el sabor, es realmente delicioso.

—¿Está bueno? —Preguntó Michael, quién me buscaba con la mirada, yo lo observé rápidamente y asiento emocionada.

—Está excelente, que vino tan delicioso. No es amargo como otros, sino dulce.

—Con ese vino, tuve mi primera borrachera —Cuenta Michael y yo casi me atraganto, abro los ojos como arce y poso mi mano sobre su hombro.

—¿Me estás tomando del pelo? —Pregunto incrédula, él se niega, toma mi copa y la hace a un lago con la suya, yo sigo las copas con mis ojos y miro confundida. —No he tomado casi -Reniego.

—Ahora tomas más —Afirma— Además no quiero volver a verte borracha —Rápidamente me acuerdo de ese día y me carcajeo. Luego Michael me toma de la barbilla y me hace mirarle, sus ojos me absorben, son tan hermosos y tan intensos. Acerca su rostro al mío y empieza a besarme, succiona mi labio inferior y yo tomo su labio posterior, luego lo tomo de su nuca para traerlo más y él me toma de la cintura.

El beso tierno y dulce se vuelve a un beso romántico y apasionante, mi corazón late fuerte y siento que su corazón también, tengo los nervios por lo alto, mi corazón me va romper las costillas. Me detengo y Michael se separa mirándome serio. Suspiro y lo miro fijamente, sus ojos brillan más de lo normal, pienso: No, estoy con el amor de mi vida, ¿por qué debo de temer?, será hermoso y muy especial, ¡Venga, a lo que vinimos! Otra vez lo tomo de la nuca y luego enrollo mis brazos sobre su cuello, lo beso apasionadamente y poco a poco me pongo a horcajadas, quedando encima de él.

Él pone una mano sobre mi mejilla, está cálida, yo ladeo un poco la cabeza para sentir más su tacto y luego posa su otra mano, en mi otra mejilla. Me separa un poco de él, casi rozando nuestras fosas nasales.

—¿Segura de qué quieres hacer esto? —Pregunta preocupado y yo lo miro con ternura. Yo acaricio la punta de mi nariz con la suya y asiento.

—Claro que si —Murmuro y me pego más a él— ¿Por qué dudarlo? Eres el hombre con el que me casaré, eres el amor de mi vida y además quiero compensar todos los días que estuvimos ausentes uno con el otro.

Michael me enrolla en un abrazo fuerte y luego poco a poco me baja el vestido, siento un pequeño escalofrío al sentir sus dedos largos por la curva de mi espalda semidesnuda, luego tomo su chaqueta y se la saco por la parte de la solapa, él me ayuda a sacarla, después desabotono poco a poco su camisa, mientras él me da pequeños besos, en mi boca, en la comisura, en mis mejillas, bajando por mi cuello, le doy un poco más de acceso llegando prácticamente a mi hombro. Sus besos eran húmedos y cálidos. Inhale su aroma a vainilla y ya cuando le deje su torso completamente desnudo, sentí que mi cara ardía ¡Demonios! Pueda que sea una puritana por ser mi primera vez, pero el hecho de que sea así, no quiere decir que a este hombre se le quite lo guapo y sexy que es, tomé el botón de su pantalón, lo desabotoné y luego abrí la bragueta, me eleve un poco y le trate de bajar el pantalón, luego él me ayudó. Mis manos estaban ahora si, muy temblorosa, parecía un terremoto. Él queda completamente en bóxers y toma mis manos, deposita un beso pequeño en cada uno de mis dedos, luego con sus manos deshace el peinado tan laborioso que Janet, me hizo. ¿Qué estará pensando? Como es de tremenda ¡Definitivamente, Michael y ella, no se parecen en nada! Ágilmente Michael desabrocha mi sostén dejando mis pechos al aire, cierro los ojos y él me da un pequeño beso.