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¿Que podría responderle? Leo no tenía novia en ese momento, ¿Oh si? Ya ni se sabe con Leo, pero Evan debía responder algo pronto así que por inercia dijo...

-Tal vez- Esas palabras sonaron tan secas que él mismo se sorprendió.

-¿Como que "Tal vez"?

-Es complicado.

-¿Por qué es complicado?

Evan empezaba a estresarse, le molestaba que Mikaela se mostrará tan interesada por Leo y tenía ganas de decirle que sí tenía novia, aunque fuera mentira, así que prefirió usar la vieja confiable para alejar de una vez por todas a Mikaela de las garras de Leonard.

-No, no tiene novia- Dijo y Mikaela cambió su expresión a una menos... Depresiva -Tiene novio- Y ahí destruyó todas las ilusiones de la chica.

-¿Acaso tu...?- Insinuó ella señalando intercaladamente a Evan y Leo.

-¡No! No, no...- Gritó, y fue bajando el volumen al darse cuenta de que había llamado, de nuevo, la atención de todo el salón.

-Oh, lo lamento- Dijo ella poniendo su mano en el hombro del chico en señal de compasión.

-¿Por qué?

-Por la cara que pusiste supuse que, o eran novios, o te dejó en la friendzone.

-¡¿Qué rayos?! Obvio no

-Además tienes una pinta de gay que te las pelas.

-¿Que te pasa? Claro que no, estoy muy seguro que me gustan las chicas.

-Ajá, ¿Tienes novia?

-No- Respondió dudoso.

-¿Por qué no?

-Porque, no se, simplemente no hay nadie que me llame la atención en este momento.

-Si, ajá.

-¡Que no soy gay maldita sea!

-¡Evan!- Le grita el profesor y el mencionado pone una cara de película de terror. -A coordinación por indisciplina- Dice, mencionando por lo bajo un "creo que fue mala idea".

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-Evan- Escuchó que una voz lo llamaba sutilmente a sus espaldas mientras caminaba por el pasillo con rumbo a la cafetería -Evan espera.

-Oh, hola Mikaela

-Dejaste tu cuaderno en el salón, toma- Mikaela le extendió el cuaderno a Evan bajando la mirada.

-Gracias Mika- Dijo en respuesta, la chica quedó algo aturdida por el apodo que utilizó, solo su padre solía decir... -Bueno, iré con Leo, nos vemos.

Y él se fue campante sin notar la expresión de la chica.

Mikaela quedó desconcertada en su sitio, al cabo de unos segundos retomó el rumbo hacia la cafetería al igual que Evan y se sentó en una de las mesas alejadas.

-¿Que te dijeron en coordinación?- Le preguntó Leo a Evan.

-No fui, me escondí en el baño el resto de la hora.

Ambos ríen -Debí imaginarlo, y entonces ¿Como vas con la emo?- Preguntó Leo levantando una ceja creando una divertida expresión en su rostro.

-Se llama Mikaela- Contestó con simpleza.

-¿Es todo lo que tienes para decir?

-Pues- Respira hondo -Preguntó si tenías novia.

La graciosa expresión de Leo causó un carcajada por parte de Evan -¿Y que le respondiste?- Oh, oh... Evan los pensó y nada se le ocurría, mientras su amigo le miraba expectante.

-Le dije... Em, le dije que no sabía.

-¿Por qué? Si sabes que estoy soltero, soy un hombre libre.

-Ah pues... No, no estaba seguro, como siempre andas por ahí, con, cualquiera...

-¿Me acabas de decir perro?- Preguntó indignado -Uy, todo bien. Oh, ahí está Mikaela, le llamaré- Exclama y la llama con la mano, ella nerviosa se acerca a ellos.

-Leo ¿Que haces? ¿Como se te ocu...?-Evan intentaba reprenderle pero no tuvo el tiempo suficiente -Hola Mika.

-Hola Evan- Contestó ella con timidez y luego fijó su mirada en Leonard

-Leonard, mucho gusto, mejor dime Leo- Se presentó extendiendo su mano hacia Mikaela quien esta vez sí aceptó.

La cara de Evan en ese instante no tenía precio.

-Oye, Mika, ¿Puedo decirte Mika también?- Pregunta Leo a lo que ella asiente energética-Bueno, eres nueva ¿No? ¿Que te trae a este pueblo?

-Mi mamá creció aquí, pero se fue, yo crecí en la capital, y mamá decidió volver por los viejos recuerdos, así que, heme aquí.

-Interesante- Respondió Leo, mientras Evan se retorcía por dentro debido a la repentina cercanía de sus dos compañeros.

-Y... Em ¿Como te ha parecido el lugar?- Intervino Evan

-Es... Pequeño, y aburrido, pero lindo, si creo.

-Interesante- Dice Leo nuevamente -¿Y a que se debe ese rostro triste y esa ropa oscura? ¿Por qué escondes esos bellos ojos bajo tu cabello?

Mikaela quedó sorprendida ante aquellas hermosas palabras, que pena que ese chico de lenguaje tan poético ya tenía dueño.


Tal vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora